💖Eres mi razón de vivir💖 [Tomudeku]

~La cena~ (primera parte)

Pov Izuku
Ayer fue un día lleno de emociones para Tomura y para mí, no comímos gracias a ese incidente con el arroz.. pero igual no me sentí tan mal.

Me había levantado temprano para sorprender a Tomura. Él tiene el permiso de su tutor y de mi madre para quedarse en la casa, duerme en la habitación de al lado, así que cualquier cosa voy allá a molestar.

Me vestí rápido, y bajé por las escaleras con mucho cuidado, no quiero despertarlo.. aún.

Saqué toda la indumentaria de limpieza, me puse el delantal desaliñado que siempre se ocupaba para estas ocaciones, me puse un pañuelo en la cabeza y otro en la boca para que el polvo no llegue hacia mí. Seguido de eso me puse los guantes de cocina usados y el amado cloro.

Estoy muy agradecido con Tomura por haber cuidado de mi casa, y de hacer esto TODOS los días, debe ser agotador, pero desde que él se ha dedicado a limpiar diariamente, me he sentido "en casa", una sensación... maravillosa.. no sé explicar un sentimiento tan raro y menos cuando éste proviene de la limpieza.

Acto seguido a la preparación va sacudir los lugares e intenté ser silencioso en aquello. Cada mueble, esquina y rincón de la casa estaba listo, osea sin nada, ni una pinche motita de polvo.

Enceré los muebles, desinfecté CADA superficie (incluyendo ventanas, el piso, los muebles, los marcos de fotografías, los pomos de las puertas, decoraciones y utensilios).

Perfumé el ambiente con aromatizante de lavanda, ¿por qué ese y no otro? Pues porque a Tomura le agrada la lavanda, y... bueno, solo quiero ver su sonrisa.

Y terminé de limpiar la cocina, el living (sala de estar), el baño y mi habitación. En un lapso de tiempo de 2 horas.

-Estoy orgulloso -susurré para mí mismo.

Pocas veces limpiaba tanto, por la falta de mi madre, no me importaba, me deprimía por cualquier estupidez.

Me lavé y cambié de ropa. Fui directo a la habitación de Tomura, me acerqué poco a poco, la verdad me da pena despertarlo, y aún más cuando tiene una carita tan relajada; NO, me decidí a despertarlo y eso haré...

Habían pasado unos minutos y aún no lo despertaba, por yisus..

No creía que sería tan difícil.

Me armé de valor y me acerqué a su oído, perdóname Tomura.

-Toooomuuuraaaa~ -susurré

-Despiiieeeeertaaa Tooomuuraaa~

Él se removía un poco, pero no habría los ojos.

-Tooomuuuraaa, Izuuukuu tee tiiieeenee unaaa sorpreeeesaaa~

Tomura reaccionó en seguida al decír Izuku.

-¿q-quee?- él estaba medio dormido  e intentaba taparse la cara.

-Tomura~ -acaricié su mejilla con mi pulgar.

-Ah Izuku... ¡¿Izuku?! ¡¿Q-qué haces acá?!

-Levantate y no hagas preguntas -usé mi mirada de cachorrito.

-O-ok..

Bajamos las escaleras, y le mostré lo que había hecho, igual soy muy infantil para esperar un alago.

-Wow Izuku, hiciste un gran trabajo! -me miraba con una gran sonrisa; mi corazón duele de tanto palpitar.

-Jeje, tu has hecho esto muchas más veces que yo... Gracias Tomura.

-Nah.. esta bien por mi. No te preocupes.

-jeje -me apoyé en su hombro (pero más bien era su estómago ;-;).

-Cosita.. -sus mejillas se pusieron levemente rojas.

- ¡O-oye! No soy una "cosita".

- ¿No?.. pero si eres taaan pequeño y taaan tierno -puso una sonrisa burlona.

-¡¡Oyeee!! S-soy grande.. tengo 13.. -lo dije como si fuera algo realmente importante.

-Lo sé, lo sé, eres taaaan mayor -me peñiscó las mejillas.

-Tomuraaa -hice un puchero.

-Ahora que lo pienso.. tú no sabes mi edad.

-E-ehm.. solo sé que tines más de 15 años.

-Jeje.. tengo 16 y voy a cumplir los 17 en un mes.

-Woaaa.. ¡que genial!

-No tanto.. tengo más "responsabilidades" y son basura.

-Ow... pobre de tí.

-Lo sé... ¡Ah!

-¿Qué pasa Tomura?

-Verdad que Sensei nos invitó a cenar el otro día.

-¿E-en serio?- me puse nervioso- ¿quienes estarán con nosotros?¿en donde comeremos? ¿nos invitaron, incluso a mí? No creo ya que no soy muy importante. ¿Debo preocuparme de que llevar? ¿qué ropa me pondré? ¿a qué hora será? ¿será incómodo? ¿qué habra de comer? ¡¿y si soy alergico?!.. *susurrar* *susurrar*

-¡Izuku! -Tomura me ha sacado de mi trance.

-Eh.. eh.. perdón..

Pov Shigaraki Tomura
Qué tierno.. cada vez que susurra es irresistibe.

-Tranquilo.. será una cena normal, nada raro. Estará Kurogiri y Sensei, que prácticamente me criaron. Así que catalógalos como mi familia.

-Ah.. ok - me sonrió con una hermosura indescriptible.

-Le diré a Kurogiri cuando quieras cenar.

- N-no hay problema si es hoy -se sonrojó como un tomatito, Awww.

-Entonces le diré que después nos lleve.

Un rato después.

Pov Midoriya Izuku.
Me alistaba para salir con Tomura, me bañé, peiné, perfumé, y lo más difícil... me vestí; el conjunto tenía que ser cómodo, elegante y casual... ufff, me costó. Pero lo conseguí, me puse unos jeans, zapatillas rojas (mis favoritas), una camisa y un sweter café clarito que quedaba un poco grande.

Estaba listo, así que golpee la puerta de la habitación de Tomura.

Sorprendentemente hoy se arregló un poquito; pero no tanto.. el mismo atuendo de siempre, solo que se peinó un poco más... si, solo eso; aunque seguía estando guapo.

-Oh.. Que lindo eres Izuku~

-G-gracias -me sonrojé.

-No tienes que darlas -me acarició la cabeza, seguido de eso me acarició la mejilla.

Me miraba directamente a los ojos.. sus toques eran suaves y calidos, llenos de delicadeza. Acariciaba mis pecas, una a una... y de mis mejillas pasó por mis labios.. Ahhh mi corazón.. de seguro estoy como un tomate.

Y paró.. alejó su mano de mi... ;-; auch.

-Deberíamos irnos Izuku.. -sus mejillas estaban rojas.. que atractivo.

-S-si ... pero, ¿cuándo va a llegar?

-Ah.. de hecho ya llegó.

Seguido de eso sentí una "mano" sobre mi hombro.

-Disculpe joven Izuku, soy Kurogiri y lamento la intromisión, pero quería presentarme ante usted.

-Oh.. un placer conocerlo señor Kurogiri.

-El placer es mío -Kurogiri me "giño un ojo", que molesto.. no tiene por qué molestarme.

Seguido a esto Kurogiri creó un portal negro con morado.

-Debo pedirle que entre en el portal.

-E-esta bien- dijo mi arbustito un poco nervioso.

Y los tres nos adentramos en la nube que nos llevaría a nuestro destino.

   Continuara...