Capítulo 18

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BAEKHYUN

-Hyung, ¿estás bien? –Pregunto Sehun entrando detrás de mí y cerrando la puerta.

-Yo... -lo mire, las lágrimas se habían detenido, pero seguramente mis ojos estaban rojos ya que me ardían.

-Hey. –Se acercó y me rodeo con sus brazos. –Todo está bien hyung...

No era lo mismo, sus brazos no me transmitían esa calidez y seguridad, él no podía entender lo que yo sentía pero no me parecía correcto estar entre sus brazos por más que quisiera consolarme.

-Estoy bien... -me separe de él parándome frente al espejo.

Ciertamente no me había equivocado, mis ojos están rojos al igual que mi nariz.

-Solo me emocione. –Mentí, nadie iba a saberlo.

Escuchamos que alguien llamaba a la puerta, el me miro a través del espejo a lo que yo asentí.

Él salió para ver quién era y después de unos minutos regreso.

-Hyung, era Chanyeol. –giré tan rápido que me había mareado y tuve que sostenerme de Sehun que rápidamente se acercó evitando que cayera. - ¿Seguro de que estas bien? –Toco mi frente con tanta ternura que podía casi derretirme.

-Sehun, dime algo. –Lo mire serio. –Capaz que sea una locura, pero he tenido una duda desde hace un tiempo. –Él asintió. - ¿Tu sientes algo por mí o por Baekboom?

Si, sé que era extraño preguntarlo, pero no había podido sacarme esa duda. Si bien él era muy atento con respecto al trabajo me había dado cuenta de que siempre nombraba a mí hermano o por ahí él se quedaba congelado mirándome.

- ¿De qué hablas hyung? –rio incómodo.

-Sabes de lo que hablo. –aclare mi garganta. –Solo dime... -pedí suplicante.

Suspiro tomando asiento en un sillón que estaba en el camerino. –Estábamos juntos... cuando comencé a trabajar con él había quedado deslumbrado por su personalidad, aunque todos creyeran que era malo o engreído, en realidad era una persona muy insegura que usaba su mal carácter para esconderse de los demás...

- ¿Por qué desapareció en realidad?

-Tuvimos una pelea muy fea, yo ni siquiera sabía que él había pedido unas vacaciones hasta que me lo comunicó uno de mis compañeros en la empresa. Cuando te conocí te dije que él había dejado una carta. –Asentí.

-Aunque me dijiste que había sido enviada a mitad de un mes.

-Sí, así fue. –su mirada mostró tristeza. –Él me dijo que quería que nos tomáramos un tiempo para pensar en todo lo que había pasado y que cuando se sintiera seguro volvería, pero los días fueron pasando y ya estaba desesperado al no saber nada de él.

- ¿Fue ahí que buscaste a Jongdae? –me senté a su lado tocando su brazo como tratando de darle apoyo.

-Sí, le conté todo lo que había pasado y sobre el trabajo de Boom. Él sabía que era más importante primero encontrarte a ti para poder terminar el drama y que el resto lo solucionaría yo...

-Espero que así sea, tengo una idea de donde puede estar... he estado haciendo memoria en estos días y creo que es donde puedes encontrarlo.

-No quería agobiarte con mis asuntos por eso no te conté nada. -me miro afligido.

-Está bien, lo entiendo. –le sonreí. –Ahora eres tú el que debe de tomar unas vacaciones porque es algo lejos donde debes ir. Debes traerlo de vuelta así pueda golpearlo por comportarse como un niño. –Ambos reímos.

- ¿Se puede? –Escuchamos que alguien hablo del otro lado de la puerta.

-Adelante. –dije.

Una chica del staff entro. –Está todo listo para la siguiente escena, el director le llama. –Se inclinó y salió.

-Bien, es hora de seguir. –Dije más animado poniéndome de pie, miré a Sehun que seguía sentado en el sillón. –No te quedes ahí, ve por él.

Saqué mi cuaderno y le escribí lo que necesitaba para ir por Boom.

-Aquí. –le extendí el papel. –Estoy muy seguro de que podrás encontrarlo ahí.

Salí del camerino con fuerzas renovadas, después de todo debía dar lo mejor de mí hasta el final.

Después de grabar las últimas escenas decidí tomar las cosas que había dejado atrás y salir de la villa, si bien había tenido que escapar de Chanyeol reiteradas veces, logré llegar al hotel sin más problemas y Jongdae ya me esperaba en la recepción con todas mis cosas.

-Jongin te está esperando afuera. Él te llevará a tu departamento de nuevo. –Asentí tomando mi maleta. –Baekhyun, gracias...

-Está bien, estaré esperando que me confirmes el lugar donde daré las entrevistas. –Me acerque a él y lo abrace.

Si bien le costo devolverme el abrazo, lo hizo.

-No hay rencores Jongdae, y deseo que puedas volver con Minseok. –Susurre, sonreí separandome de él girando y saliendo del hotel.

Reconocí de inmediato el auto de Jongin así que guarde mis cosas en la parte de atrás y luego tome lugar a su lado.

- ¿Listo? –Asintió. - ¿Estas bien Baekhyun?

Quería llorar, al menos esto había término de forma diferente a la vez anterior.

-Lo estaré...

No volvimos a hablar en el resto del viaje. Llegamos a mi departamento y él se ofreció a ayudarme a subir mis cosas lo cual decline.

-Kyungsoo quería que cenemos esta noche.

-Dile que me disculpe, pero solo quiero descansar, luego lo llamare.

Me despedí de él y entre en el gran edificio.

Cuando entre en mi departamento no pude evitar sentir como si ayer hubiera salido siendo otro y hoy era una persona totalmente diferente.

Todo estaba oscuro, no quería prender las luces así que deje mis cosas por cualquier lado de la sala y caminé a ciegas a mi habitación hasta que pude por fin tirarme a mi cama.     

Un montón de pensamientos invaden mi cabeza pero decidí ignorarlos y prepararme para dormir aunque aún fueran las siete de la tarde, el viaje habia sido largo. 

Mañana sera un nuevo dia, quedaban aun las entrevistas pero por hoy solo descansaria y  concluiría con esta parte de lo que terminaría siendo la salida de Baekboom del mundo del espetaculo. 

Por fin podía respirar con tranquilidad al saber que ya no tendría que volver a hacerme pasar por alguien más, por fin podía volver a mi vida normal aunque ya no sintiera la misma emoción que antes.

~¤~

Ya habia pasado casi una semana ignorando todo lo que pasaba a mi alrededor. Mantenia la mayor parte del tiempo mi celular apagado o en silencio.

Estaba haciendo mi vida en automático, me sentia como adormecido.

Muchas cosas habian perdido un poco de su brillo y lo unico en lo que me mantenia era dibujar. Pasaba madrugadas enteras dibujando y dormia como cuatro horas máximo, cuando me despertaba volvia de nuevo a internarme en mi mundo de fantasía.

Ignoraba lo que me estaba pasando aunque tampoco queria saberlo en realidad, huia de cualquier pensamiento que me llevara a él.

No podia creer como en tan poco tiempo habia podido encariñarme con ese orejon...

Como habia terminado por enamorarme de él...

Eras tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora