Roger estaba molesto cuado en realidad no tenía por qué estarlo.
Su mamá le había conseguido un tutor, lo cual sabía que necesitaba pero lo que no le parecía era que lo hicieran el sábado a partir de las 2 hasta las 6. Con descanso para comer. Aunque sacara malas calificaciones merecía un descanso.
─¿Qué no podemos hacerlo entre semana después de la escuela?
Fue la primera pregunta que le hizo Roger a su mamá cuado ella le dijo acerca del horario de las lecciones.
─No, amor. Tanto Brian como tú tienen tareas y otras labores que atender.
Maldijo en sus pensamientos pero sabía que era necesario. Al menos no era los domingos que era cuando su padre, Michael Taylor, descansaba y podían salir con su madre y hermana.
El sábado su madre fue a despertarlo a eso de las 11 de la mañana; como siempre, fue difícil despertarlo. Tomó su desayuno, se aseó y se vistió y después fue a hacer tarea.
Genial, a parte de 4 horas extra de escuela tenía que hacer las tareas para la próxima semana.
Terminó a eso de la 1 y media de la tarde. Brian no tardaría en llegar. Sin nada más que hacer, sacó dos plumas de su lapicera y comenzó a golpearlas levemente en la mesa. Aunque él tocaba el ukelele y un poco de guitarra, Roger tenía un muy buen ritmo y a veces comenzaba a marcar ritmos con sus manos o con baquetas improvisadas.
Abrió su cuaderno una vez más, esta vez con el propósito de escribir algunos versos. Ese era un pasatiempo suyo también, aunque nunca había terminado una canción completa.
Volteó hacia la ventana del comedor donde estaba y pudo ver a Clare, su hermana pequeña de 9 años, jugar en el patio. Una nostalgia tintada con una pequeña pizca de envidia lo invadió. Roger extrañaba mucho esos días. Clare estaba en su Year 4 de la Primary Education de Inglaterra y obviamente tenía muchas menos obligaciones que su hermano mayor que iba en el Year 10 de la Secondary Education, lo cual era un salto bastante grande.
La hora de su cita con el hijo de Ruth May, Brian, llegó más rápido que tarde. Lo siguiente que Roger supo fue que alguien había tocado el timbre de su casa y que su madre se acercaba a la puerta a abrirla.
El corazón del chico rubio se aceleró. Aunque parecía un chico extrovertido si lo veías de lejos, la verdad era que sólo era así cuando ya se había aclimatado a las personas y estaba cómodo. Lo mismo iba para su mejor amigo, John. Sólo podían ser completamente ellos mismos estando el uno con el otro, puesto que ya llevaban un par de años siendo mejores amigos.
Roger se asomó un poco hacia el pasillo que conectaba el comedor con donde estaba la puerta principal. Pudo divisar a un chico alto y muy delgado, pero no se veía mal. Era de esas personas que se ven delgadas natural, porque así es su complexión y no porque estén enfermas o algo.
Parece que se echó la botella de gel en la cabeza. Roger reprimió una risa ante este pensamiento.
Había tenido un amigo así. A James, quien fue su compañero hace dos grados, no le gustaba su pelo chino y su solución a ello era prácticamente vaciar su tarro de gel en la cabeza e intentar manejar su pelo así. En lo personal, Rog nunca había tenido ese problema porque su pelo era muy lacio. Ahora tenía un corte de pelo simple, con fleco de lado. Brian tenía un peinado tipo Elvis un poco extraño, aunque aún así se le veía un poco ondulado el pelo y del lado izquierdo la mitad de un rulo se le formaba hacia arriba, en opinión de Roger eso se veía particularmente... adorable.
─¡Roggie!
Escuchó a su madre gritarle haciéndolo dar un pequeño saltito del susto y haciendo que saliera de sus pensamientos. Su nerviosismo al conocer gente nueva se volvió a hacer presente.
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Tutor 《Maylor》
FanfictionRoger apesta en física. Y a Brian no le vendría de más un trabajo. ────────── Pareja: Roger Taylor & Brian May. Fandom: Queen.