Capitulo <13>

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-¡Felix! -grito mi kwami con fuerza mientras le fulminaba con la mirada-.

- ¿que es lo que quieres? -mencione ya arto ante sus llamados-.

-pues comer, ¿que esperas? -dijo para luego volar a mi alrededor-.

Saque un trozo de queso que tenia en uno de mis bolsillos, se lo lance y el simplemente se lo trago enseguida. Rodee los ojos ante eso y procedi a realizar el trabajo de hoy.

Aunque admitia que me costaba concentrarme ya que habia cierta mujer en mi cabeza, no lograba dejar de pensar en ella durante el trabajo y eso me estaba costando un poco.

-señor agreste su cafe -dijo aquella rubia entrando a mi oficina para dejar la taza sobre mi escritorio-.

-gracias allegra -dije para luego tomar un sorbo de este y continuar-.

El mini gato negro se escondia en mi chaqueta mientras esperaba a que mi secretaria saliera, lo cual hizo y este sin mas se recosto en algun lugar de mi oficina.

La mañana de hoy se veia mas que aburrida y la gran magnitud de trabajos amontonados me estaba estresando, tenia que revisar aparte si habian diseños con error alguno o no.

Me pase la mano por mi pelo y lo acomode, todo esto me estaba haciendo quedarme sin tiempo.

"Necesito a alguien que sepa de esto tanto como yo.."

Pense por un momento y recorde enseguida que conocia a cierta persona capaz de ayudarme.

-¡Allegra ven por favor! -grite para luego ver como entraba enseguida-.

-si ¿señor? -pregunto curiosa mientras le miraba-.

-llamame a brigette dupaing-cheng ahora-.

Sin expresion alguna como siempre se fue de la oficina en busca de la recien nombrada, era una idea explendida y de paso mataria a dos pajaros de un solo tiro.

¿el porque?

Era mas que facil, tendria tiempo de estar con ella en mi forma civil y tambien me enfocaria en terminar mi trabajo, un plan perfecto.

Espere por un rato hasta que la puerta se volvio abrir.

La dupaing ingreso quedando frente a mi sin dirigirme la mirada algo que me desanimo un poco.

-¿me necesitaba señor agreste?-dijo esta casi en un susurro-.

-primero mireme a los ojos, es de mala educacion que no lo haga-hable de manera seria buscando esa excusa para que me viese-.

Aquello recien dicho la hizo suspirar, dirigiendo sus ojos a los mios chocando entre si ambos colores azules.

No pude sentir un ardor en mi rostro y trate de hablar sin nervio alguno.

- b-bueno, señorita brid se solicita su ayuda con los diseños-me miro con sorpresa- todo esto se me ha acumulado y he recordado su habilidad similar a la mia.

- ¿a que se refiere?-.

-necesito tu talento para revisar los diseños y cuales son sus errores, ¿puedo contar con usted?-.

Pase mi mano por una carpeta acercandosela a esta lo cual ella tomo en sus manos y asintio con la cabeza no muy segura, decidi ignorar aquella accion.

Simplemente le pedi que se sentase frente a mi y prosiguiera a empezar con aquel trabajo pedido por mi.

-bueno allegra puedes dejarnos-pedi que se fuera asi finalmente dejandome solo con ella-.

Decidi observarla por unos minutos, sus ojos como dos zafiros en ellos se podian notar. Sus labios tan finos y provocativos con un ligero toque de brillo en ellos, su maquillaje tan claro sin abusar de ello algo que le hacia verse tan natural.

&lt;&lt; Perdóname&gt;&gt; felix x brigette  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora