Primera parte: In the name of love ♡
Segunda parte: Back to you ♡
Delfina Alzamendi y Ámbar Smith no son las típicas adolescentes bellas y populares, pero sí las más envidiadas por todas y deseadas por todos en el colegio, bueno... casi.
Ámbar cree...
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Lunes...
Con un suspiro de alivio, la pelinegra abandona el salón de Matemáticas pensando en lo sencillo que ha sido evadir a su ex novio, y es que Gastón parece haberle facilitado mucho las cosas, pues no se ha presentado en ninguna de las clases que comparte con ella.
- Tonta... - se reprocha Delfina en voz baja, pues tampoco puede evitar preocuparse por él, si bien se esforzó por ignorar sus llamadas y se refugió en casa de Sheri durante todo el fin de semana, aquel beso en las afueras de la fiesta no ha podido abandonar su mente desde entonces.
- Delfi - la voz del mismo Gastón la saca de sus pensamientos, se sobresalta un poco al encontrarse de frente con él, y no tarda en querer pasar por su lado, pero está claro que Gastón no iba a permitir eso - Delfi, por favor - la mira con ojos suplicantes mientras la detiene del brazo y la acerca a él con suavidad, tal como hacía cuando eran pareja, tal como a ella le gustaba.
- No - dice Delfina separándose un poco de él, mirando a su alrededor incómoda al estar captando todas las miradas en el pasillo, cosa que a Gastón nunca le ha importado - No quiero hablar contigo, estoy harta de que creas en todos antes de mí -
- Perdóname - Gastón vuelve a acercarse a ella sin quitar esa mirada que tanto la derrite por dentro - Delfi, en serio, sé que he sido un idiota... pero, Delfi yo te amo, y sé que tú también me sigues amando porque lo pude sentir en ese beso, pude sentir que tampoco has dejado de amarme -
- ¿Q-Qué beso? - cuestiona la pelinegra intentando sonar indiferente - No recuerdo ningún beso -
- ¿Lo olvidaste? - Gastón sonríe de lado al notar el nerviosismo de Delfina, sabe que está mintiendo, que recuerda ese beso a la perfección, por lo que se acerca más a ella, uniendo sus frentes de la misma manera en que lo hizo la noche de la fiesta - Qué mal que lo olvidaras... yo no he olvidado uno sólo de tus besos - repite sus propias palabras, logrando que toda indiferencia desaparezca de la mirada de Delfina, pues ahora sus ojos vuelven a tener aquel brillo que sólo expresan al ver a Gastón.
- No... - repite ella de nuevo, apartando su mirada pues odia sentirse tan vulnerable ante él, pero antes de que pueda decir algo más, se distrae al observar a Ámbar acercándose a ella, por lo que rueda los ojos y se apresura a alejarse, pero se ve rápidamente detenida por la voz de la rubia.
- Delfina, espera... -
- ¿Qué? - la pelinegra la observa con profunda seriedad - ¿Ahora sí quieres hablar? Tarde, Ámbar... -
De nuevo está a punto de alejarse, pero esta vez quien la detiene del brazo es Ámbar, logrando que Delfina la mire con fastidio, cosa que cambia al escuchar lo que la rubia tiene para decirle.
- Mi madre está embarazada -
...
Esta vez quien lo busca es ella, pero no para pedir por otra oportunidad, tampoco para llenarlo de mentiras, sino todo lo contrario, pues lo que ahora Nina busca es la verdad, por mucho que pueda dolerle.
