Capítulo 20

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Narra Gastón

A pesar del enojo, está vez necesitaba de Guido. Pero no podía escribirle así que acudí a Pato.

  - Que orgulloso que sos boludo- renegó. -Tenes que agarrar el teléfono y decirle Guido necesito el numero de Alma-
  - No le voy a escribir. Me mintió el pelotudo-
  - Baja los humos un poco. Tiene que tener alguna explicación-
  - Si, está caliente con Alma-
  - Seguís y no le pido una mierda Gastón. Deja que te explique él y deja de suponer estupideces-
  - Bueno Dale, pedile el número-

Vi que agarró su celular. Le mando un mensaje. Fui impaciente en la espera. Guido es de los que contesta tarde. Le pedí que lo llamara sería más rápido.

  -Guido-
  - ......
  - Gastón necesita el número de Alma. Me lo pasas?-
  - ....
  - Dale. Listo Gil-
  - ....

  -Que te dijo?-
  -Ahora te lo manda-

Ayer en la tarde Alma se fue enojada. Lo peor se fue con mi hermano. No se que onda con ellos. Pero tengo que saber. Además no quiero a mi hijo lejos.

Espere unos minutos y por fin me lo mando. Sólo el número, no hizo ningún tipo de comentario.

  - Che me voy a ir- dijo Pato. -Ya que no te fuiste está tarde ensayamos-
  - Uh Bueno-
  - Vas a ir?-
  - Y si-
  - Bueno y no sigas con Guido boludo-
  - Raja Pato. Déjame en paz-

Se va y quedó sólo. Agendo a Alma. El contacto como Guido la tenía es como siempre le dijo "Pálida".
La agende a mi modo y le escribí.

No me contestó enseguida. Pero si lo hizo. Quedamos en que la pasaría a buscar a casa de su padrino, está noche e iríamos a algún lado. No dijimos donde, sólo que saldríamos solos los tres.
Tal vez sea momento de hablar profundamente. Entender esos malos entendidos. Y hablar seriamente de mi hermano.

Pasaron lentas las horas. Antes de ir por Alma estuve en un ensayo con mis hermanos. Con Guido no nos dirigimos la palabra. Más que para ponernos de acuerdo con cosas de la banda. El actuaba con normalidad, no le daba importancia a mi enojo. Simplemente se enfocaba en lo que tenía que hacerlo. El ensayo!

Pase primero a la estación de servicio. Pedí que cargarán nafta. Luego tomé las calles a mi destino. Me sudaban las manos, estaba nervioso.
Estacione en frente a la casa y toque bocina. Salió ella con nuestro hijo en brazos. Se despidió de su padrino, quien levanto su mano y me saludó.

Me bajé y le fui a abrir. La ayude con la pañalera, la deje en los asientos de atrás y volví a subir a mi lugar.

  - Todo bien?- pregunto.
  - Si- dijo seria.
  - A donde querés ir?-
  - Donde sea- dijo con la misma postura.
  - Vas a bajar un poco?- digo ya molesto.
  - Yo?- pregunto.
  - Bueno- respondo y pongo marcha.

Me dirijo algo lejos. Mi idea era que estemos solos. La llevo a un lugar para comer al aire libre. El día estaba hermoso, no sería problema para Noah.

Bajamos y tomamos asiento en una mesa. Vino una mujer y nos atendió. Pedimos pizza vegana.

  -Y bien?- digo suspirando. -Más Tranquila?-
  - La pregunta es al revés o no?-
  - Dale, me vas a reprochar lo de mi hermano todo un año?- mira para otro lado. -Me lo das?- hago énfasis a Noah.
  - Si- sonrió y me lo entregó.
  - Puedo pregunta, sin que te enojes.- río. -Que onda con Guido?-
  - Lo que te dije ayer, te lo repito. El quería mantener contacto conmigo por Noah, nada más. Es tu hermano, tío de Noah-
  - Esta bien- digo poco conforme. -Por que te fuiste?-
  - Ya quedó atrás- se negó a decirme.
  - No quedó atrás. Alma te fuiste y no me diste un por que-
  - Te escuché hablar con Patricio. El decía por que estabas conmigo, no lo negaste, te quedaste callado-
  - Que? Cuando?- digo sin entender mucho.
  - El día del Baby Shower- me recordó. Se me vino todo a la cabeza.

*Flashback*

- Por que haces todo esto?- me preguntaba Pato.
- Por Alma, por mi hijo- respondí seguro.
- Siento que tu relación con Alma es sólo por el embarazo Gastón, si es así va a terminar mal-  negué enseguida.
- Mira Pato yo.. - decidí hablar después de unos segundos de silencio.
- La querés?-
- Obio que la...
- No te hablo de una amistad- volvió a decir Pato.

  - El te pregunto si me querías. Ibas a decir que Si, pero te interrumpió. Te dijo que no hablaba de una amistad. Entonces entendí todo- dejó caer lagrimas. -Tu cariño por la amistad que tuvimos era lo que sentías. no quise escuchar tu respuesta me fui al balcón, Guido apareció después. No le dije nada por que apareciste. Después fui a la cocina y el me siguió, me pregunto que me pasaba y le conté. Le dije que me iría y me dijo que la distancia nos iba a hacer bien-
  - Alma...-
  - No se si nos hizo bien o no. Pero ya pasó, estoy acá por Noah, nuestro hijo-
  - No escuchaste la conversación completa- digo angustiado. - Si le respondí a Pato. Le dije que te amaba y ese amor por vos no se ha ido ni un poco-
  - Gastón no es necesario que sigas...-
  - No, escuchame. Te digo la verdad- llevo una mano a mi corazón dejando en claro la sinceridad de mis palabras.

  -Acá está su pizza. Que disfruten- apareció de nuevo la mujer y ella oculto su rostro entre sus manos. Agradecí y se retiró.

  -Esperaba que me odies-
  -No puedo... Alma, esto va más allá de los años que compartimos como amigos-
  - No se que pensar. Lo único en que quiero pensar ahora es Noah-
  - Yo también. Quiero lo mejor para él y como mi hijo quiero estar día día con él-
  - Sabes que no voy a separarlos.- Dice mirándome a los ojos.
  - Como madre de mi hijo, te quiero conmigo. Como la mujer que Amo- tomo su mano.

No me miró.
Comimos tranquilos. Luego de eso pague y decidimos ir a caminar un poco. Noah reclamó con un llanto que lo alimenten. Volvimos al auto para que pueda amamantarlo con más comodidad. Me causaba tanta ternura esa imagen. Me hacían feliz. El enojo se me fue. Sólo quería recuperarla.

  -Bueno ahora provechito y listo-sonrió.
  - Puedo hacerlo yo?- Digo con timidez.
  - Deja de preguntar. Puedo- rió y me lo dió. Aún no caía que ya ella padre. La idea de que ese pequeño en mis brazos era mi hijo era raro. Obvio la vida te cambia. Dentro de un tiempo tendré a alguien que me llame diferente. Ya no es Gastón para todo quien quiera mombrarme, seré Papá para esta criatura.
Empecé a dar pequeños golpes en su espaldita. Finalmente logramos lo que queríamos y acomodamos con mantas el asiento trasero. Lo acostamos ahí y salimos del auto. Nos sentamos en un banco frete al auto. De apoco tomé su mano. Me miró cuando lo hice.

  -Estas cada vez más hermosa- digo y conectamos miradas. Sonríe sonrojandose fácilmente. -Dejame demostrarte que te Amo-
  -Y si no funciona?-
  - Por no tomar riesgos? Si los dos sentimos cosas, por que negarnos? Tenemos un hijo-
  - No se- miró para abajo y agarre su mentón para volver a levantar su mirada.
  - Por favor- digo y sello nuestros labios. Nos dimos un dulce beso. La tomo de sus mejillas para profundizar la conexión de nuestros labios. Lo disfrute, me sentí vivo y contento. -Vamos a mi casa. Quedense conmigo hoy-
  - Gastón, no-
  - Pero por que no?-
  - Por que no es así. Tres meses separados y después actuar como si nada?-
  - Tenes razón te entiendo- digo y la vuelvo a besar. Ella corto con el beso y sonrió.
  - Me llevas? Se va a poner frío y no quiero que Noah se enferme-
  - Bueno Vamos-

Dulce Condena //Gastón Sardelli// [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora