Cap. 14

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 A pesar de la poca luz que había en el lugar se podía observar cómo la gente seguía trabajando, aunque parecían hacer movimientos claramente pensados y con el mínimo ruido de ser posible. Después del accidente en su habitación se había puesto al día con Charlotte que le explico amablemente que es lo que estaba pasando y a cambio ella le contó lo que le había pasado, para su fortuna su tribu tenia buenos tratos con ellos lo cual era buena señal pues le ayudarían a regresar. Después de su rápida charla Charlotte se fue a ver a más pacientes y le dijo que podría caminar por el lugar a lo cual Sofía no se negó.

Mientras tanto Lía miraba hacia la aldea, había intentado dormir, pero el sol pegada directamente en su rostro lo cual le parecía muy molesto, a pesar de ser un clima agradable disfrutaba más del frío del lugar donde había crecido. Seguía cansada y el calor solo hacía que se agotara, continúo mirando la aldea esperando que algo pasara.

-Que tenemos aquí, ¿no lograste correr? - Lía se puso de pie rápidamente, giró y logro esquivar un puñetazo que iba directamente a su rostro del sujeto que minutos antes había sido humillado por aquella chica, pero fue lo único que logro hacer con tan poca energía que tenía, un segundo puñetazo impacto en su abdomen lo que hizo se doblara y un tercero en la mejilla que la dejo inconsciente.

El hombre regordete la cargo en sus hombros con facilidad, el plan era tener rehenes si algo salía mal y aunque odiaba a la mujer a cargo de la misión su estrategia era buena y por eso la odiaba aún más.

Camino por el sendero que habían marcado para no perderse el lugar era tan confuso que la idea de su hijo lo hizo sentirse orgulloso. Mientras más se acercaba podía distinguir las voces de las chicas a cargo del cuidado de los rehenes parecían reírse por algo, se sintió culpable porque debían asesinarlas en ese viaje.

Cuando al fin llego al lugar ya no solo estaban las dos chicas si no también alguien más que no conocía y un animal grande blanco.

- ¡QUE CARAJOS! –gritó.

Las dos chicas miraban alternadamente a el hombre y a la mujer como si pensaran de qué lado ponerse.

- ¿Quién eres? – miraba a Tahm y a Wari, se percató que algo faltaba ahí - ¿Dónde están las mujeres? – les pregunto esta vez a Fer y Ale que estaban congeladas. –Maldita sea, creo que debo hacer todo yo. -

Dicho esto, aventó el cuerpo de Lía sobre Tahm que intento atraparla, pero solo hizo que ambas cayeran, la aparto rápidamente, se puso de pie. El hombre ya se encontraba junto a ella intentando el mismo movimiento que con Lía, pero Tahm estaba preparada así que los esquivo con facilidad, uso su alabarda para bloquear un par de golpes más e intento golpearlo con la misma pero el hombre a pesar de su tamaño era rápido logro esquivarla y se hizo hacia atrás.

Tomo impulso y ataco nuevamente a Tahm que se mantenía a la defensiva bloqueando cada golpe que intentaba el hombre, hacia unos intentos por golpearlo con la alabarda, pero él los esquivaba.

Mientras tanto Fer y Ale veían la pelea, no se habían movido desde que llego la chica. Al intentar esquivar uno de los golpes de Tahm el hombre cayo.

- NO SE QUEDEN AHÍ, AYUDEN- le grito a Fer, ambas se miraron y corrieron hacia la chica que había aventado minutos atrás, Tahm las miro pensando que le harían algo, pero al contrario revisaban que estuviera bien.

Fue corta esa distracción, pero fue suficiente para que el hombre le colocara un buen gancho que la hizo escupir, pero logro bloquear el siguiente golpe, retrocedió un poco para mirarlo, se veía cansado al parecer su edad jugaba bastante en su contra aun así el golpe que había recibido le movió el piso, le dolía la mandíbula y la falta de alimento le daba cierta desventaja. Tahm se sobo inconscientemente y el hombre le sonrió burlonamente. La observaba y la desafiaba con la mirada, pero ella era lista y esperaría que él hiciera el movimiento y así fue. Una vez más intento darle un gancho que fue bloqueado justo como esperaba, el siguiente golpe iba dirigido a su hombro, Tahm pudo verlo y se movió para bloquearlo, pero solo fue una finta, el hombre se agacho y lanzo una patada a la pierna de Tahm que no lo esperaba en absoluto. Gritó. Había sido un golpe directo, el hombre triunfante observo a la mujer a sus pies y daría el golpe final pero antes de poder conectarlo la cabeza de Wari lo aventaba contra un árbol, intento ponerse de pie, pero su espalda había quedado muy lastimada.

- Claro que vamos a ayudar, IMBÉCIL- Ale con toda la fuerza que pudo le dio un puñetazo en el rostro que lo durmió al instante.

- AUUUUCHHHH!!!-

- JAJAJAJA deberías ver tu cara- Fer la imitó.

- Cállate – Ale se sobaba el puño mientras se acercaba a Tahm – ¿Estas bien? –

- Lo estaré ¿Cómo esta ella? – miro hacia Fer.

- Inconsciente pero saludable- alzo los pulgares.

- ¿Por qué no le ayudaron? – Se sobaba con fuerza la pierna, de verdad le había dolido y rogaba por que no fuera nada serio.

- Argg ese viejo es odioso, además somos rehenes de cierta forma – Fer se encogió de hombros – ¿Ella es tu amiga?

- No, pensé que era parte de los suyos-

- Jamás la había visto, pero mira esas marcas y ropas ni siquiera es de esta aldea- Ale ahora estaba junto a Fer y tocaba a la chica con curiosidad.

Tahm se acercó cojeando un poco, también observó las marcas, sobre todo las de su brazo izquierdo y su clavícula. Wari estaba a su lado y esta se apoyó en él.

- Sé de donde viene, pero estas marcas deberían de coincidir- las señalo.

- Lo importante aquí es, ¿Es buena o mala? –

- Supongo que lo sabremos cuando despierte, ayúdenme a subirla a Wari –

Tahm las guió hasta donde estaban las demás, seguían inconscientes e incluso el hombre estaba dormido, recostaron a Lía junto a ellos y se quejó. Las demás se pusieron alertas, pero la chica solo se movió un poco y continúo durmiendo.

- ¿Por qué no despiertan? Intente de todo, pero siguen... dormidas.

- Es una toxina – dijo Ale, Fer le dio un codazo - ¿Qué?, si ya no ayudamos al viejo ese porque no contarle todo, da igual, ya traicionamos o como sea, es mas no podemos traicionar algo de lo que nunca fuimos parte- Ale parecía molesta – Como te decía – se aclaró la garganta – Es una toxina que preparan se despertaran como en dos días más- se encogió de hombros.

- Bien y que se supone que haga en dos días, quedarme aquí- miro a su alrededor, apoyo su pie y un dolor recorrió todo su cuerpo. - MALDICIÓN- se sujetó como pudo de Wari.

- Ve el lado positivo- dijo Ale

- Que hay de positivo en tener una pierna lesionada, a mis amigos inconscientes y ni una pizca de alimento. –

- Que estas a unos metros de la tribu pantano, ya sabes esa que es famosa por sus remedios curativos – Fer fue quien hablo esta vez – Tienes dos rehenes – señalo al muchacho y luego en dirección a donde había sido la pelea – ellos son tu llave. –

- Pero hay que esperar a que termine el revuelo o pensaran que venimos con ellos- dijo Ale – aunque claro venimos con ellos, solo que ahora es diferente, el plan original era entrar y salir lo más pronto posible pero ya tardaron demasiado y que consiguieran un rehén significa que no van bien las cosas-

- Entonces démosles más dificultades- Tahm sonrió. 



// Se vienen las posadas y yo tengo unas ganas infinitas de ponche, los quiero. \\

Aqua CuratioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora