Golpes del Destino.

26: Hermano.

—Joder.

Noah había perdido su arma al haber sido víctima de la explosión.

—¿A qué han venido? —Ivano sonrió de manera siniestra —Apuesto a que sabían que vendría y decidieron visitarme, ¿cierto?

El agente giró a mirar a Milenka, la cual tenía los ojos muy abiertos, también cortes superficiales le salpicaban en la cara, y estaban llorándole los ojos por la cantidad de humo que había.

Ambos se pusieron de pie y comenzaron a retroceder.

—¿Ya tan rápido se van? Pero es que yo no quiero que se vayan —Ivano disparó un poco de fuego hacia el techo —Los voy a obligar a quedarse.

Entonces apunto hacia ellos y le dio caña al lanza fuegos.

Los dos agentes se separaron al correr uno por un lado y al otro al lado contrario.

Noah se escondió detrás de un archivero y Lenka detrás de la mesa donde había hallado el marcador para despertar a Noah.

Ambos estaban ocultos de Ivano, pero no tardaría en encontrarlos.

Podían mirarse, así que Milenka echó una mirada de reojo hacia atrás donde localizó con la mirada el arma de Noah. Él la miró a ella, y negó con la cabeza.

Milenka sólo le asintió como diciéndole «yo te cubro, ve a por ella», y mientras él se preguntaba cómo carajos iba sin que Ivano lo viera.

Milenka traía su Beretta oculta detrás de la espalda, la sacó para apuntar por encima de la mesa y comenzó a disparar.

Entonces Noah echó a correr por la pistola y se le unió a ella.

Ivano corría y mientras se quitó el lanza fuegos para tomar dos armas que tenía detrás y también disparaba hacia ellos.

—¿Por qué no se rinden? —se había escondido detrás de un pilar que sostenía el techo —Sus intentos son inútiles contra mí.

—¿Y por qué no me la chupas? —contestó Noah.

Milenka se sentía impotente, escondía detrás de esa mesa, así saltó y comenzó a disparar en cuanto estaba del otro lado.

—Milenka, no! —gritó Noah.

Estaba furiosa porque ella sabía que el socio de su padre había muerto también, además de muchos trabajadores de ahí mismo. Inocentes.

Ella corrió hacia el pilar donde había visto escondido a Ivano y fue a por él, pero luego sus balas se terminaron.

Y cuando estaba cargándola, Ivano asomó su rostro y disparó hacia ella, dándole en el muslo derecho.

—¡Joder!

Cayó al suelo presionando su muslo, tenía la bala alojada dentro.

Ivano comenzó a acercarse a ella, un arma apuntándola y la otra en dirección a dónde estaba Noah.

—¿Lo ven? Yo les avisé —dijo con fingido pesar —Les dije que lo que hacían era inútil. —Tu arma, arrójala lo más lejos que puedas.

—¿Crees que voy a hacerlo? —Milenka lo miró burlonamente —Estúpido, ya no tengo balas.

Noah comenzó a acercarse, pero se detuvo en cuanto Ivano negó con la cabeza.

—Quieto. O le disparo a la chica. —le señaló con la barbilla el arma que aún apuntaba hacia él —Arrójala hacia acá.

Noah se resistía. Y no iba preparado como para un encuentro como ese. No pensó que los hubiesen seguido tan rápido. Empezó a caminar más pero volvió a detenerse cuando Ivano disparó a un lado de Milenka.