ғʀɪᴇɴᴅs ; ᴠɪʀɢᴀᴛᴏ [✓]

28

2 meses después...

Christopher.

Ya han pasado dos meses de tortura. Dos meses desde que Erick y Joel se hicieron novios. Dos meses dónde me la paso acostado hundiéndome en la soledad que yo mismo creé.

Sí, aquellos dos ahora son novios y desde aquel día Joel ha estado bastante distante conmigo. Si me hablaba era un "hola" o un "adiós", o me pedía la tarea que no hizo por estar con Erick.

Ahora me junto la mayoría del tiempo con Zabdiel, por lo menos el logra sacarme de la cama los findes de semana o animarme los días que estoy con los ánimos bajos.

Suspiro mirando la pantalla del celular que ahora se encuentra apagada.

Zabdiel me ha mandado un mensaje a anunciándome que no vendrá a la escuela.

Guardo el celular y levanto la vista encontrándome con Joel viniendo hacia mí, ruedo los ojos y doy la vuelta para empezar caminar y alejarme de él. Hasta que siento su mano en mi hombro, que me impide dar un paso más.

Me di vuelta encarando lo con el rostro serio, ya lo ignoré bastante y es hora de encararlo.

—¿Qué quieres? ¿La tarea de matemática? Pues no la hice, así que adiós— dije seco y firme, dándome vuelta nuevamente para seguir mí camino pero su mano tiró de mí brazo apegandome a él.

—Lo siento— susurra cerca de mí rostro— Perdón por dejarte de lado— se disculpó haciendo puchero.

Mierda. Odio cuando hace eso, me dan ganas de besarlo. Pero lamentablemente otro ya lo está haciendo.

No dije nada, solo fijé mí vista en otra cosa que no sea su rostro.

—Se que tú te haces rogar, por eso te traje un regalo que espero que te guste— me sonrió y sacó una caja, no tan grande pero tampoco chiquita, envuelta en un lindo papel de regalo con un moño bonito pegado a él.

Me lo extendió y yo lo acepte un poco dudoso.

—¿No es una bomba?— bromeé.

—¡Claro que no!— rió y casi me derrito al escucharlo— Espero que te guste, nos vemos— se acercó a mí y beso mi mejilla.

Podía jurar que mis mejillas se tornaron rojas.

—Nos vemos— murmuré mirándolo irse.

×××

Llegué a mí casa azotando la puerta, por lo que me gané un grito por parte de mí madre, pero la ignoré y fui directo a mí cuarto.

Salte a mi cama y rompí con algo de emoción el papel de regalo. Abro la caja color blanco y veo un hermoso osito de peluche también color blanco con un papelito pegado a su oreja.

Sonrío de oreja a oreja y tomo la nota y comienzo a leer.

"Perdón, bebé.

No quiero darte excusas, olvidé nuestra amistad y te ignoré. Siento mucho eso, fui muy estúpido,lo sé. Te quiero muchísimo, hasta el cielo, y prometo no volver a hacerlo, no quiero perderte por nada ni por nadie del mundo.

¿Me disculpas ♡?"

J.P

«Te quiero muchísimo, hasta el cielo»

Era lo único que se repetía en mí cabeza.

Estaba sonriendo como un tonto, como un tonto enamorado. Y la verdad es que si lo estoy.

Agarré el celular y lo prendí. Abrí el chat con Joel y rápidamente escribí;

"Gracias por el regalo,te perdono ♡"

×××

(editado)