Sweet & Cold ♡1♡| Can You Love Me?.

→Fe.

►Capítulo 17•

La casa era un desastre, pero afuera hacía una noche preciosa, asique resolvieron ponerse cómodos en las sillas del balcón, cada uno con un café y una manta para cubrirse. La luna brillaba azul y triste, Jimin sonreía nostálgico. Recordar iba a ser doloroso, pero era necesario. 

— Siempre que podía a acompañaba a mi hermano a sus clases de piano... se llamaba Jihyun. Tocaba desde muy pequeño y me encantaba oírlo. Era realmente muy bueno. Al final de las clases siempre interpretaba una obra para mi, nunca supe como se llamaba... decía que solo él podía tocarla para mi... Era mi favorita. Las clases siempre terminaban conmigo improvisando al son de su música... No se si lo sabías pero me gusta la danza.—Una pequeña sonrisa brilló en sus labios y comenzó a tararear la melodía— ¿La conoces?. —

— La verdad no... —

— Nadie sabe decirme como se llama esa obra. Suena mucho mejor en mi cabeza, soy terrible tarareándola. —

— Podemos buscarla luego si quieres. —

— Ya lo intenté, muchas veces. Pero esta bien... Me basta con el recuerdo. El vivía burlándose de mi, siempre hacía cosas como esa para divertirse con mi frustración. Decía  que aunque yo fuera el mayor por dos años, él siempre sería el hyung. Era muy grande y alto para su edad, valiente y tonto... muy tonto y testarudo, no entendía ni aceptaba un "no" por respuesta y siempre defendía a quien lo necesitaba. Yo estaba seguro de que cuando creciéramos, el sería el orgullo de mi familia, que me llenaría de sobrinitos guapos y cabezas duras como su padre y que seguiríamos siendo tan unidos como siempre... —soltó un suspiro— Tenía solo 15 años hyung... era muy joven aún. —

— Jimin no lo hagas si no quieres... — YoonGi quería saber mas de su historia, por supuesto que la curiosidad estaba allí, Jimin había perdido a un hermano y entendía todos los miedos que ahora él sentía y aunque fuera egoísta, eso le daba cierto alivio... pero aun así no quería hacerlo pasar por esos dolorosos recuerdos. 

— No te preocupes hyung, quiero que lo sepas... necesito compartir esto contigo. Ese día su profesora había cambiado el horario de la clase. Casi siempre tenía problemas personales, no era la primera vez que lo hacía. Yo insistí en quedarme y esperarlo ya que terminarían entrada la noche. Él me dijo que no pasaría nada y que podría volver solo a casa... Quizás si le hubiera hecho caso... —

— No te culpes Jimin, eras su hermano mayor, debías cuidarlo. —

— Perdí la cuenta de las veces que me han dicho exacto lo que acabas de decir tú, pero no estoy atormentándome en vano... Sencillamente fue mi culpa y lo acepto. Al salir YO quise ir por otro camino porque el de siempre era muy oscuro a esas horas y creí que sería peligroso. ¡JA! si hubiera sabido... Nos topamos con dos hombres al pasar por un callejón que servía de atajo. Quizás su intención al principio solo era robarnos, pero cuando ya les habíamos dado todo lo que traíamos, uno de ellos me tomó del brazo y le dijo algo al oído a su compañero... —soltó una risa sarcástica— Estas viéndome ahora hyung, soy pequeño y débil, un inútil que no pudo zafarse por si solo, aunque intenté hacerlo... Le rogué que se fuera, que corriera, le dije que yo estaría bien pero no me hizo caso, no quiso abandonarme... —Jimin se levantó y apoyó los brazos sobre el barandal del balcón, con la vista fija en algo muy lejano— Jihyun falleció esa noche intentando salvarme, lo apuñalaron varias veces en el pecho y lo dejaron tirado en ese callejón. —

YoonGi estaba atónito, la ira lo consumía y pronto se sintió impotente, no había nada que pudiera hacer, no tenía una puta máquina del tiempo... solo podía seguir escuchándolo. 

— Se aburrieron de mi media hora después, pensaron que ya estaba muerto cuando me dejaron tirado a su lado... —

— ¿Que te hicieron Jimin? —preguntó aterrado y al borde de un ataque de furia. 

— Me usaron hyung... —el mayor sintió que su corazón dejó de latir un momento, el rostro de Jimin era frío e inexpresivo— Pero no importa lo que hicieron conmigo, hubiera pasado por eso mil veces mas con tal de poder salvarlo, pero él no iba a dejarme... antes de desmayarme pude acariciar su rostro una última vez. Sabía que Dios se lo había llevado y rogaba que me permitiera ir también. Lo último que recuerdo de esa noche es el grito de una mujer pidiendo ayuda y luego ver como me alejaban de él, recuerdo las luces azules y rojas y las voces pidiéndome que resistiera. — 

— Si existiera un Dios no debería permitir que esas cosas ocurrieran...—no quería ni siquiera imaginar, lo que esas bestias le habían hecho... ¿Como se atrevían a ponerle una mano encima?.

— Esos hombres pagaron por lo que hicieron hyung... meses después supe que los habían capturado y que en la cárcel los demás criminales se encargaron de ellos. Murieron dos semanas luego de ser arrestados. — Jimin seguía con la mirada perdida en la luna y YoonGi no sabía como reaccionar, no esperaba todo eso— No culpes a Dios Hyung. Le agradezco haber evitado que Jihyun sufriera y estoy seguro de que está con él, ambos cuidándome. Las personas son libres de hacer lo que quieran. Creo que todos venimos al mundo siendo Ángeles y es el alejarnos de Dios lo que nos quita las alas... yo siento lástima de quienes terminan tan corrompidos como para hacer cosas así, porque ellos no tienen nada en sus corazones... —se giró para ver a su hyung a los ojos y con una sonrisa dijo— ellos están solos, yo no. —

YoonGi quedó sorprendido, no esperaba que le respondiera eso y no entendía como, después de todo lo que había vivido, aún tenía su fe intacta. Él la había perdido hacía mucho tiempo... Pensaba que si en verdad existiera un Dios, entonces no habría tanta maldad y desgracias en el mundo, la gente buena no pasaría dolor ni desesperación y la vida sería justa con quienes hieren como hirieron a Jimin o a Taehyung. Pero aún así, con todo lo que había vivido, el menor sonreía y aunque le arrebataron todo y no hubo nadie ahí para salvar a su hermano o a él, no se sentía abandonado y es más... era agradecido.

— Taehyung saldrá de esta, él esta vivo y luchando... es fuerte y no esta solo —YoonGi sintió las lágrimas amenazar con salir nuevamente— Te tiene a ti, a tu madre, a nosotros y a Dios. —

¿Como podía ser tan sabio?, tenía razón, Taehyung estaba dormido en el hospital pero seguía vivo y aunque no aún no había pensado en frío, estaba profundamente agradecido por ello. Jimin era pequeño y débil de cuerpo pero su corazón era gigante y su espíritu invencible. 

Las horas pasaron entre sonrisas e historias. Ambos contaron sus anécdotas mas graciosas y felices, recordando a sus hermanos menores, tratando de disipar la tristeza y las preocupaciones, hasta que vieron como el cielo comenzaba a aclararse. 

— Pronto voy a irme unos días a Busan, tengo que llevarle sus flores... —dijo Jimin observando el color rojizo del que se empezaba a teñir el cielo.

— ¿Su aniversario? —el menor negó con la cabeza.

— Su cumpleaños... es la única fecha que quiero recordar. —Sonó triste, pero al verlo, Jimin tenía una tierna y cálida expresión de paz en el rostro— Me voy a quedar contigo hasta entonces... Te prometo que no dejaré que pases por esto solo. —

Y así quedaron unos momentos más, viendo el amanecer. YoonGi, perdido en sus reflexiones, no notó que el menor lo observaba atentamente. Jimin estaba muy sorprendido... Jamás las había visto tan de cerca. Aturdido decidió volver a su departamento pero antes de hacerlo tomó algo del suelo del balcón, sin que YoonGi se diera cuenta. Ya en su habitación, sacó de su bolsillo la hermosa pluma que había tomado, la observo maravillado varios minutos, ya no era negra como la primera vez que las vio, tenía un bonito tono gris... Parecía estar cambiando frente a sus ojos y luego de la nada desapareció.

YoonGi aún sorprendido por la repentina huida del menor, resolvió bañarse y alistarse para ir a hablar con los chicos. Quería contarles todo lo que había pasado y necesitaba su apoyo para poder volver a la clínica.

Al salir de su departamento Jimin lo esperaba en el pasillo, listo para ir con él hasta el fin del mundo si fuera necesario.