→Siempre hay alguien mejor.

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►Capítulo 21•


Hoseok confiaba en Jimin, sabia que quizás el menor sentía algo por YoonGi pero aun así confiaba ciegamente en la fidelidad de su novio, sabía que aunque al final su relación con él no funcionara, al menos no lo lastimaría y sería un lindo recuerdo teñido de cariño y amistad. 

Su corazón estaba intranquilo, no podía quejarse, seguramente lo que estaba pasando era obra del tan temido karma que lo castigaba por nunca haber mantenido sus promesas. 

Sus amigos confesaban sentir lastima por aquellos que caían con él. Tanto hermosas muchachas como apuestos jóvenes habían pasado por su cama y no habían dejado allí más que lágrimas y pedazos de sus corazones. Hoseok se perdía en las noches de fiesta y alcohol y jamás había tomado enserio ninguna relación, no era un mal tipo, siempre fue un excelente amigo, alguien de personalidad luminosa y bondadoso con todos. Nunca dudaba cuando de ayudar a los demás se trataba, pero jamás había logrado involucrarse y comprometerse sentimentalmente. Incluso aquellos a quienes falló en el amor, no podían decir nada malo de él, excepto que jamás podría sentar cabeza, que no sabía amar (de aquella manera única y especial) a nadie y que para él todos eran amigos y diversiones, juegos sin demasiada importancia. El error de Hoseok era pensar que la otra persona sabía como sería la "relación" desde el principio. 

Él no era perfecto, como todos tenia inseguridades y malas costumbres. "La carne es débil dicen" era la excusa que se ponía a si mismo para justificar su comportamiento. Sería hipócrita enojarse con Jimin si cometía alguna equivocación, podía entender que lo hiciera y significaría que le pagaran con la misma moneda, porque aunque solo había sido una vez, cuando apenas habían comenzado, J-Hope también lo engañó. Luego de eso se juró no volver a sus malas costumbres, porque esa noche de desliz, cayó en cuenta de que no quería a nadie mas que a Jimin en su vida y arrepentido volvió a sus brazos, pidiendo perdón en silencio y tratando de volverse un mejor hombre para él. Desde entonces había cambiado muchísimo, para bien. 

A todo esto no era menor el detalle de que el tercero en discordia fuera YoonGi, su hermano, su mejor amigo... Sobrepasaba el límite, incluso para Hoseok. 

Él sabia que seria difícil pero estaba decidido a ser el hombre que Jimin merecía y quería ser digno de recibir su amor. Fue complicado contenerse, esos días en los que YoonGi ganaba la batalla por la atención del menor eran los peores. Sus pensamientos le atormentaban y muchas veces casi cedió nuevamente a la tentación de revisar los viejos contactos de su celular e irse de fiesta, pero pudo mantenerse firme, nunca más volvió a traicionar la confianza de Jimin. 

A pesar de los malos momentos que habían estado pasando, él era muy feliz con el menor, tanto que tenía miedo de que todo fuera una cruel ilusión de la vida y que cuando menos lo esperara, ella se lo arrebatara para darle una o dos lecciones. No podía cambiar su pasado pero estaba arrepentido por haber lastimado a las personas que lo habían amado con tanta sinceridad y daba las gracias por tener a alguien como Jimin, por que ahora tenía miedo de que le llegara su turno.

"Prepárate para lo peor, esperando lo mejor". No podía evitar sentirse pesimista ante el panorama, Jimin cada vez se alejaba un poquito mas y él lo notaba pero no quería aceptarlo. Quería creer que todo estaba en su mente y que eso era solo uno de los tantos altibajos que pasarían en su relación... pero se equivocó.

La oferta que le había hecho esa tarde en el parque seguía en pie y cuando el menor lo llamó avisándole que estaba en camino, Hoseok realmente se alegró. Ya era tarde pero aún así podrían ver una película y quizás compartir uno o dos besos hasta quedarse dormidos, pero la actitud de Jimin fue fría y distante desde el momento en que cruzó la puerta del departamento y Hoseok pudo notar tristeza y culpa en sus ojos. 

Enseguida entendió lo que pasaría cuando al invitarlo al sofá, el menor se quedó de pie frente a él, con las manos entrelazadas y la cabeza gacha. Jimin ya se estaba disculpando antes de decir nada y aunque pudo sentir los escalofríos recorrerle la espalda y cómo su corazón empezaba a doler, lo tomó con suma delicadeza por las muñecas e hizo que se sentara a su lado. 

Sus miradas se encontraron solo por un instante antes de que Jimin rompiera el silencio. El menor esperaba ver enojo o decepción en el rostro de Hoseok pero lo único que recibió fue una leve sonrisa. Casi hubiera preferido recibir la indiferencia o desprecio, su amabilidad solo le hacía sentir peor, pero no podía retrasar aún más lo inevitable. No tenía intenciones de seguir hiriéndolo, intentando amarlo como sabía que él lo amaba.  


— Hyung tenemos que hablar. — 

— Ya lo se cariño... —«Ya lo sabía.»

— Lo siento mucho Hyung. —

— No te preocupes Jiminie. —«Me lo merezco. Que manera mas cruel de hacerme pagar mis errores...»»

— Eres de las personas mas bellas que he conocido y jamás podré pagarte por toda la ayuda y el amor que me has dado. Nunca conocí a alguien tan bondadoso como tu y siempre te tendré en mi corazón ¿lo sabes?. —

— Tu también me has ayudado Jiminie. Me enseñaste mucho. —«Él merece a alguien mejor que yo. No merezco ser feliz después de lo que hice.»— Se muy feliz ¿si?. Siempre estaré aquí para ti. —«Agradezco que hayas sido tú.»

— Y yo para ti Hoseok... Adiós. — 

«Te amo Jiminie»


No hacía falta mas, se habían dicho lo necesario. Esa despedida fue la parte mas fácil de afrontar, Hoseok sabía que le esperaba un doloroso camino hacia el olvido, sería duro verlo feliz con alguien más y peor sabiendo que ese alguien posiblemente fuera su mejor amigo, era algo que podía pasar y no los culparía. Se refugió en la idea de que estaban destinados a no ser, después de todo fue YoonGi quien lo salvó esa noche, fue él quien puso en riesgo su vida para protegerlo aún sin conocerlo y era de esperarse que Jimin no lo dejara pasar. 

Quizás estaba escrito su encuentro y era inevitable que nacieran esos sentimientos entre ellos... él lo único que hizo fue interponerse, retrasar las cosas y complicarlo para todos. 

Aunque le dolía el alma estaba agradecido. Jimin le había dado todo el amor que podía sentir por él, siempre le regalo las mas bellas sonrisas, hizo que el corto tiempo a su lado fuera maravilloso y no lo traicionó a pesar de lo que sentía por YoonGi. Hoseok estaba seguro de que el menor había decidido terminar la relación para no engañarlo, fue correcto hasta el último momento. Estaba feliz de haberse enamorado de él, ya que le enseñó mucho. Hoseok no sabía que podía llegar a amar al punto de sacrificar su propia felicidad por alguien más. 

Pero aun así el dolor era poco soportable, cada segundo empeoraba y estaba solo en ese departamento que de pronto se había vuelto el lugar mas frío y desolado para estar. Conocía solo un remedio para su angustia... su viejo amigo el alcohol. 

Esa noche Hoseok se perdió de nuevo...

— Esta será la última vez. —



Sweet & Cold ♡1♡| Can You Love Me?.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora