Sweet & Cold ♡1♡| Can You Love Me?.

→"Yo lloraré contigo".

►Capítulo 16•

•El día del accidente: Jimin•

Las semanas después del cumpleaños de Taehyung fueron muy tranquilas, para Jimin era un alivio saber que se había vuelto muy cercano a los chicos, parecía una mala broma del destino, que si no hubiese sido por su horrible experiencia en su primera noche en Seúl, quizás nunca se hubiera cruzado con ellos. Ahora agradecía que aquello hubiese ocurrido y que fuera YoonGi quien lo salvó esa noche, todo se lo debía a él. 

Las cosas con Hoseok iban bien, se divertía mucho con él cuando salían, era un buen amigo ademas de un excelente compañero y hasta el momento no se había arrepentido -para nada- de haberle dado una oportunidad. Todavía se sentía inseguro de ir mas allá de los besos, aún habían fantasmas con los cuales luchar y cada vez que quería intentar, ellos se lo impedían, pero una de las tantas virtudes que empezaba a amar de Hoseok, era la paciencia con la que lo esperaba y como parecía entender exactamente lo que Jimin necesitaba: a veces solo un beso, a veces solo un abrazo, a veces un poco mas que eso e incluso cuando debían parar. Hoseok era sencillamente un caballero. 

No negaría ni minimizaría los hermosos sentimientos que empezaban a surgir por el pelirrojo pero tampoco podía ignorar aquellos que tenían otro dueño, cuando Yoongi aparecía, su mente se volvía un mar de dudas. Había guardado en lo mas profundo de su corazón aquellos sentimientos desesperados por el mayor, pero las mariposas que llenaban su cuerpo entero cuando lo veía llegar, no desaparecerían jamás. No tenía intensiones de lastimar a nadie... ya no quería mas dramas. Todo iba tan bien y apreciaba tanto la amistad que había forjado con Yoongi, que no iba a arriesgarse a arruinar las cosas.

Ese día había empezado como cualquier otro, muy tranquilo y llano, dicen que así es la calma antes de la tormenta y vaya que tienen razón. Esa noche salió un poco mas temprano de la tienda, su jefe haría una parrillada familiar y aunque lo habían invitado con gusto y sinceros deseos de que compartiera la velada con ellos, Jimin los rechazó cortésmente... pocas veces había sentido tantas ganas de estar en su casa. Al llegar al departamento llamó a YoonGi para invitarlo a cenar. No era la primera vez claramente, muchas otras veces lo habían hecho, sin compromisos de ningún tipo, solo dos amigos beneficiándose de ser vecinos para dividir gastos y trabajo que ninguno quería realizar. Pero el mayor no contestó... Supuso que seguía trabajando asique se preparó unos fideos instantáneos y buscó algo que ver en la televisión.

Ya bastante entrada la noche, mas bien madrugada, y aunque estaba muy relajado, no podía conciliar el sueño y ya las películas lo habían cansado, por lo que decidió acomodarse en su cama y retomar el libro, que ya estaba a punto de terminar, con su imprescindible té de manzanilla sobre la mesita de noche.

Estaba a punto de dormirse cuando escuchó movimientos en el departamento vecino. — «¡Esta vez se ha pasado!... Tendremos que hacer una intervención y tratar su adicción al trabajo.» —Pensó divertido Jimin, antes de caer rendido por el cansancio. 

El sueño no le duró demasiado, pasados maso menos unos treinta minutos, lo que se escuchaba del otro lado de la fina pared, no eran simples sonidos típicos de alguien que acaba de llegar a su hogar. Cabe mencionar que Yoongi siempre era muy respetuoso con el silencio cuando llegaba tarde.. ¿Qué podría estar haciendo a esas horas de la madrugada?. De repente la curiosidad se convirtió en preocupación y en un solo salto Jimin había salido de la cama, cuando sintió los destrozos en el departamento vecino... Corrió hasta la puerta de al lado y golpeo desesperadamente mientras llamaba al mayor para que le abriera... Pero no había respuesta.