Las semanas seguían pasando, casi siempre teníamos algo que hacer, aunque ese algo fuera estar tumbados sin hacer nada.La voz había seguido apareciendo de vez en cuando pero eran cosas que podía ignorar, así que intentaba no prestarle atención o darle importancia.
Estábamos sentados en el sillón viendo una serie cuando mi móvil empezó a sonar.
Intenté alcanzarlo pero no llegaba, también digamos que no me esforcé mucho.
Josh se estiró un poco y me lo pasó.
—Es tu madre.— asentí y tras mirar la pantalla contesté.
—H...— iba a decir "Hola mamá" pero ella empezó a gritar.
—¡Tyler! ¡Maddy está de parto, te paso la dirección del hospital ahora mismo para que vayáis!— me levanté del sillón casi dándole un manotazo a Josh (accidentalmente).
—¿¡QUÉ?!
—¡QUE ESTÁ DE PARTO!
—¡DEJA DE CONTESTARME Y MÁNDAME LA DIRECCIÓN!— colgó y yo me giré rápido hacia donde estaba Josh.
—¿Va todo b...— no dejé que terminara.
—VOY, BUENO, VAMOS, O NO SÉ, PERO ¡AHHHH!— la emoción no dejaba que mi cerebro pensara correctamente, así que solo podía decir cosas incoherentes. Por la cara de Josh pude saber que no había entendido nada.— ¡MADDY VA A TENER EL BEBÉ!— casi chillé mientras iba corriendo a cambiarme de ropa.
Una vez los dos estábamos preparados fuimos al hospital y después de mucho esperar pudimos pasar a ver a mi sobrina.
Estuvimos allí bastante rato.
Al volver a casa Josh fue al baño mientras que yo me quedé en el salón, empecé a revisar los mensajes que tenía hasta que me pareció escuchar un ruido.
Me acerqué lentamente a la ventana y miré el exterior atentamente intentando ver de dónde provenía ese ruido.
—¿Qué haces?— salté del susto.
—¡No me asustes así! ¡Por Dios!— Josh se rió.
—Últimamente te asustas con cualquier cosa, ¿Estás bien?
—Yo no me asusto con cualquier cosa.— dije frunciendo el ceño y con los brazos cruzados.
—Cariño...ayer te asustaste cuando entré a la habitación aunque llevaba hablándote desde el pasillo.— habló medio riéndose.
—Bueno...— dije alargando la "e".- Puede que me asuste un poquito más que antes, pero eso no significa que me asuste con cualquier cosa.
—¿Seguro?— asentí con demasiada seguridad, la cual se fue cuando Josh dió una palmada delante de mi cara y yo volví a asustarme.
—¡Idiota!— los dos nos reímos, hasta que yo conseguí ponerme serio apuntándole con el dedo.— No lo vuelvas a hacer, ¿entendido?
—¿Y si lo vuelvo a hacer? ¿Qué harás?— dijo con tono desafiante, el cuál sabía que no iba en serio.
—Te cortaré el pene mientras duermes.— intentamos mantenernos serios mirándonos pero no pudimos y acabamos riéndonos de nuevo.
—Ahora en serio, ¿qué estabas mirando?
—Me pareció escuchar algo afuera.
Quizás si que me estaba volviendo algo paranoico.
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