capítulo 46

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*Asa*

no quiero empezar de una vez con el asunto que la trajo aquí está noche después de haber estado con ella todo el día, ¿que pudo haber pasado en 2 o 3 horas?, mas o menos el lapso de tiempo desde que se fue con ese tipo.

-de acuerdo, ¿cual era tu pregunta?- empecé, debía hacer que tomara confianza y se soltará un poco.

-hmm se me acaba de olvidar- no pude evitar entrecerrar mis ojos ante esa respuesta, pero antes de que yo pudiera pensar en que decir, ella volvió a hablar- ah si si, ¿porque no usas gafas en la escuela?, por lo que vi el otro día diría que te hacen falta.

-¿cuando has visto a alguien popular usar gafas como estas?- respondí con sinceridad señalando mis gafas.

-cierto- sonrió un poco de lado y movió un poco su cabeza como si acabará de entender algo muy obvio, lo cual si lo era-¿porque quieres ser popular?

Me quede callado y apoye mi mentón en mi mano mientras sonreía inocente, era mi turno de preguntar además de que no quería responder esa pregunta específicamente.
Ella pareció entender mi silencio
- cierto, es tu turno.

-gracias-dije gracioso, hice un cuatro con mis pierna y me aclare la garganta antes de hablar- hmm esto me lo estuve preguntando desde que entre en tu habitación la primera vez ¿quien es kate?

-es mi nana- dijo animada, vi como su cuerpo se relajaba un poco, supongo que tampoco queria responder la pregunta que tanto ansío hacerle- la conozco desde que tengo memoria, diría que es como mi segunda madre, siempre ha estado conmigo.

-¿y donde esta tu madre?- fue su momento de callar con los labios fruncidos- esta bien, te toca.

-¿puedo quedarme con esta gorra?- se quito la gorra y le empezo a dar vueltas en su dedo.

-en serio, ¿esa es tu pregunta?-asintió con la cabeza- de acuerdo, quédatela- puse mis ojos en blanco y reí, esta chica siempre me sorprende, pensé que preguntaría de nuevo lo de la popularidad, pero nunca hace lo que pienso que hará.

-gracias, te toca.

-¿donde esta tu madre?

-en El Salvador- levante mi ceja y parpadee varias veces, no se donde queda eso, ella entendió mi duda tacita y volvió a hablar- es un país muy pequeño, no me sorprende que no sepas de el.

-bueno te toca de nuevo- tome mi taza del escritorio- me resigno, no podre terminar mi tarea hoy, al menos me falta poco- me levante y fui a sentarme en mi cama con mi espalda apoyada en la pared, Nath me imitó gateando hasta llegar a mi lado, pues estaba en el borde de mi cama.

-¿seguro no quieres terminar tu tarea? Por mi no te preocupes- dijo un poco tímida, no se porque se está comportando de esta manera, tan...¿suelta? ¿sería esa la palabra correcta? Sea como sea me encanta.

-cuando hablo con alguien me gusta ponerle atención- voltee mi cabeza para verla y lleve la taza a mis labios- ¿cual es tu pregunta?- dije antes de tomar.

-¿eres un nuevo rico o estas castigado?

-¿po...porque lo dices?- mi corazón palpito un poco mas rápido, el miedo empezó a formarse.

-tu ropa, este lugar,  no son de alguien que nació con dinero, a menos que este castigado.

-¿que...que tiene de malo mi ropa? jaja- cada vez me ponía más nervioso, se me hacia raro que no preguntara eso antes, pero no significa que me gustaría responder para ser sincero.

-pues... llevas el uniforme que venden en el instituto, la mayoría los manda a hacer a la medida-¿ como puede darse cuenta de eso? Yo no sabría distinguir eso, creo que nadie puede.

Por Una ApuestaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora