Capítulo XXXIV: Cataclismo - parte 2

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Twilight sólo repetía «no puede estar muerto, no puede estar muerto» sin poder reaccionar. Volteaba a todos lados sin un lugar en específico y seguía repitiendo lo mismo. Estaba postrada frente a las hermanas inconscientes encima de un charco de sangre dejado por esas heridas. Se agarraba la cabeza y cerraba con mucha fuerza los ojos recordando esas visiones. Visiones que la atormentaron hasta ese momento.

Muchos ponys estaban viendo lo que quedaba de la montaña. Lograban distinguir las estacas colocadas por la diosa pero no dejaba ver nada más por la altura hasta que varios pegasos fueron a inspeccionar más de cerca.

Al llegar ahí, no creían lo que veian. Pensaban que ambas princesas habían muerto pero al acercarse más se percataron que aún respiraban, así pues, se las llevaron sin perder tiempo hasta un lugar donde docenas de ponys médicos las asistieron.

Los médicos determinaron que no había órganos vitales dañados, a pesar de las demás heridas y sus cascos cersenados, todo lo demás en ellas estaba normal. Vatnaech fue muy cuidadosa al hacer esos cortes y los demas daños físicos para no matarlas. Pero quedaba la duda en twilight: ¿Que pasó con Vatnaech si es que mató a discord?

Tal fue el shock de twilight que no podía hablar, apenas se dio cuenta cuando se llevaron a las princesas, ignoraba todo lo demás.

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Cloud: Tío spike. ¿Todavia te duele mucho?

Spike: No, ya no me duele, no te preocupes pequeña. Todo va a estar bien.

Cloud: ¿Por qué no regresa mamá?

Spike: ya regresará, debe estar ayudando a muchos ponys.

Spike apenas podía mantenerse conciente pero no podía asustar a la pequeña Cloud si se desmayaba frente a ella. Soporto el dolor por bastante tiempo, ahí junto a la pequeña.

Cloud: no veo al tío discord por ningún lado tampoco. ¿En donde estará?

Spike: ya aparecerá, el siempre es así.

Spike no sabía nada sobre lo sucedido con discord, tampoco nada sobre celestia y luna pero tenía el presentimiento de que las cosas estaban peor de lo que imaginaba. Momentos después pasó un pony desconocido y spike le pidió que buscará a la princesa twilight, pero este apenas podía razonar la situación.

Spike: por favor, escucheme! Busque a la princesa twilight, digale que va de parte de spike.

Pony: todos están muertos...

Spike: escucha! Nadie ha muerto!

Y el pony ignoró las palabras de spike y siguió caminando.

Spike: es inutil, ahora mismo nadie está en sus cabales.

Cloud: tío spike, yo la buscaré.

Spike: no, quedate aquí. La buscaremos los dos en cuanto me recupere.

Cloud: pero... Estas muy herido, no puedes moverte.

Spike: no vayas a buscarla. Sólo... quedate aquí, por favor cloud.

Cloud no tuvo más remedio que hacerle caso a spike y se quedó ahí. El lo hacía para no generar un mayor trauma con todo lo que había más adelante. Y ahí se quedaron por horas.. Cloud estaba dormida cubierta por el brazo y el ala de spike para cubrirla del sol, el seguía despierto; al final soporto más de lo esperado ese dolor, pero se quedaba pensando en todo lo sucedido. Se preguntaba sobre el estado de las princesas, de todos los soldados dragones y de las demás Naciones.

Egoistamente los ponys ayudaban más a los suyos y los pocos soldados de otras naciones capaces de moverse, se refugiaban donde podían.
Pero aún siendo sólo a los ponys, no se daban a basto para ayudarlos.

MLP: Lágrima de PlataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora