Capítulo 17: Violador, mutilador, secuestrador

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Daniela Calle Pov

No sabía cuándo iba a regresar Poché de su viaje...No sabía cómo estaba, ya había pasado una semana desde la última vez que había hablado con ella. Lo único que sabía era que estaba haciendo lo que le apasionaba y que estaba perfectamente bien con Johann.

No me molestaba taaanto que estuviera con él, porque sabía perfectamente la relación de mejores amigos que habían llevado durante años. Incluso me daba confianza que él estuviera con ella, porque también sabía que por el amor y el cariño que Johann le tenía a Poché, iba a cuidar de ella en su totalidad y no iba a dejar que nada malo le pasara mientras yo no estuviera.

Pero de cierta forma los problemas que teníamos me estaban afectando más de lo que creía... Todo me estaba saliendo mal. No me concentraba en el trabajo, las cosas que tenía que hacer, las hacia mal por andar pensando en ella y en nuestra situación...

Por eso mismo había decidido tomarme unos días para poder aclarar mis pensamientos, emociones, sentimientos, etc. Junto a Luna, disfrutar de ella, salir, conocer, hacer cosas para que mi mente se despejara de cualquier pensamiento.

-Luna está creciendo muy rápido.-dijo Paula observando como mi hija jugaba con su hija en la alfombra junto a los sofás de la sala. La hija de mi amiga se llamaba Lucia y tenía un año exactamente.

Paula me había invitado a tomar un refrigerio en su casa, quería que nuestras hijas convivieran y se hicieran mejores amigas desde muy pequeñas, lo cual me pareció perfecto, ya que así podríamos salir juntas a comprar ropa madres e hijas.

-Lo se...Y no sabes la tristeza que me da que Luna este creciendo y que Poché no la esté viendo crecer como debe de ser.-dije en tono triste. Paula me miró y tomo mis manos. Las dos estábamos sentadas frente a frente en el comedor junto a la sala.

-Ay amiga...Solo espero que Poché entienda que por más que ame su trabajo, debe tener prioridades con ustedes que son su familia.-Paula intentaba darme sus mejores palabras de aliento, pero la verdad no me ayudaban mucho. Estaba muy deprimida.

-A ella le dejó de importar su familia, ya tampoco le importa Valentina y eso es injusto. Ella es la única familia directa que le queda en este mundo y al parecer ya se le olvidó eso.-respondí empezando a sentir coraje.

Seguimos platicando de mi situación con María José y tanto ella como yo intercambiábamos puntos de vista diferentes. Paula me aconsejaba en cada cosa que le contaba, incluso me sugirió que fuera más detallista con ella, que no me pusiera brava ni sintiera tantos celos con sus amigos.

Mi celular empezó a vibrar en medio de la conversación, me disculpe con Paula y empecé a leer un mensaje que Daniel me había mandado.

"Quiero verte, muero por verte"

Una revoltura en mi estómago se hizo presente, dejándome con los ojos abiertos después de leer ese mensaje, puesto que desde hace unos dos meses, Daniel me había confesado algo que me había dejado completamente helada. Algo que jamás hubiera imaginado a estas instancias de la vida.

Daniel me había confesado que estaba perdidamente enamorado de mí, que después de tantos años el seguía enamorado de mí. Incluso me había confesado que creía que yo era el amor de su vida, la mujer de su vida.

Flashback on

Poché estaba muy ocupada empacando sus cosas para viajar a New York y yo estaba ayudándole a guardar la ropa que creímos necesaria que ocuparía durante una semana.

CAMBIO DE PLANES (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora