CAMBIO DE PLANES (CACHÉ)

Capítulo 61: "Futura esposa"

(+18)

Daniela Calle Pov

Poché y yo nos despedimos de todos agradeciéndoles una vez más por haber venido hasta acá y por haber sido cómplices de esta maravillosa sorpresa, besamos la cabecita de nuestra pequeña y nos aproximamos al elevador.

Juliana habia sido buena hermana y sobre todo buena complice que se ofreció a cuidar de Luna por esta noche...Afortunadamente mi hija deseaba ver y estar con Ramón, así que no nos fue muy dificil convencerla de quedarse con su tía aunque...No sin antes escuchar las tipicas frases de mi hermana...

"Usen condón"

"Los dedos no embarazan pero existen condones para dedos"

"El arnes de Calle está en el segundo cajón de su tocador de maquillaje, ahí lo ha conservado y supongo que usado en el tiempo que estuvieron separadas" (Mierda, no recordaba lo chismosa que podia llegar a ser mi hermana a tal punto de andar buscando cosas en mis cajones)

"La lengua de Daniela es casi tan rasposa como la lengua de un gato...No dudo que Poché llegue al orgasmo en menos de cinco segundos" (Eso era mentira, lo decia solo porque una vez le lamí el brazo buscando venganza en tiempos de sed) Y mil y otras locas frases más...

No cabía la emoción en nuestros rostros, estábamos tan felices que no podíamos dejar de sonreír.

-Te amo.-dije susurrando por veinteava vez en la noche a mi preciosa mujer. Ella sonrió y lentamente comenzó a besarme recargando mi cuerpo en una de las paredes del elevador. Nuestro piso era el número treinta, lo que indicaba que pronto llegaríamos.

Nos separamos lentamente al escuchar el elevador abrirse y caminamos de la mano como dos locas enamoradas. Saqué la llave en cuanto llegamos a la habitación reservada y antes de colocarla en la cerradura eléctrica agarré de la cintura a Poché y en un hábil movimiento la estrellé contra la puerta.

Comencé a besar sus labios con ferocidad tomando entre mis dientes sus labios y saboreando la extensión de su boca.

Solté un jadeo al sentir sus manos en mi trasero y yo aproveché para apretar sus pechos con mis dos manos provocando esta vez un jadeo salir de los labios de Poché contra los míos.

Mi prometida intentó tomar la orilla de mi blusa para comenzar a levantarla pero rápidamente me separé de ella negando con la cabeza.

-Oh no...Tú gozarás esta noche, prometo que será la mejor noche de tu vida amor.-susurré a pocos centímetros de sus labios. Poché bufó con su cabello despeinado.

Me regaló una última sonrisa pervertida y me quitó la llave de las manos, la pasó por la cerradura eléctrica, abrió la puerta, sujetó el cuello de mi blusa con una de sus manos y me obligó a caminar sintiéndome completamente dominada por ella.

La miré abriendo los ojos lo más que pude al ver sus acciones, cerré la puerta detrás de mí y con rudeza lanzó mi cuerpo a la enorme cama del hotel provocando que un ligero quejido saliera de mis labios.

Me recargué en mis codos sobre la cama y esperé cualquier movimiento de mi amor. Poché estaba parada frente a mí mordiéndose el labio inferior con deseo.

Mierda...Amaba verla en ese estado provocativo y extremadamente sexy...Era la diosa de la seducción.

-Creo que...Se te está olvidando quien lleva el control de todo esto.-dijo Poché comenzando a desvestirse frente a mí. Tragué saliva sintiendo como pasaba lentamente dicho liquido por mi garganta.