Narrador
Era un atardecer, cerca de un río que se encontraba mas allá de Bree, se encontraba una choza, ni muy grande pero tampoco muy chica, acojedora sería una buena forma para referirse a esa choza.
En ella vivía una joven. A simple vista sólo aparenta ser una joven de baja estatura, pero las apariencias engañan a cualquiera que no rebusca en lo profundo. En realidad no era solo una simple joven con una vida llena de hierro y armas. No, ella era muy especial.
Ella era una raza de enanos muy antigua, por así decirlo mitad enana y mitad humana, con una vida mas larga que un hombre en promedio y un poco mas alta que toda su raza (enana) pues su pueblo era una raza muy antigua pero que ahora sólo ella quedaba.
En esos momentos ella se encontraba forjando unas espadas.
El forjar, herrar y remendar corrían por sus venas, como el agua en los ríos, pues su padre y el señor de La montaña le inculcaron desde pequeña las tradiciones de los enanos de crear armas explendidas y mortales.
Estaba tranquila, hasta que tocaron a su puerta. El clima en la noche era fría y por aquellas tierras no pasaba mucha gente. Ella extrañada, agarra una daga y la esconde en su espalda, se acerca a la puerta, y la abre con cuidado.Pero al abrirla se relajo y abre paso a su hogar para que su invitado pase.
—¿He llegado en mal momento amiga mia?—
—No, solo que no esperaba visitas y menos de ti Gandalf, hace años que no escucho de ti viejo amigo— dijo dejando la daga en una mesa guiando al mago a su comedor.
—Bueno, pues he pensado en pasarte a saludar, Nathriel, hace años que no te visito y hablamos como en los tiempos de antaño— Él mago se sienta en el comedor, donde Nathriel le sirve una copa de vino.
—Siempre sabes lo que uno quiere, señorita Nathriel—
—Vamos Gandalf, ve al grano— dijo sentándose enfrente de él con un tarro de cerveza en mano.
—Tengo mucho trabajo— poniendo los pies en la mesa, empezando a tomar su bebida observando de antemano al mago enfrente de ella.—¿Ir al grano?— dijo Gandalf extrañado
—Nunca me vienes a visitar sin algún propósito en mente, Gandalf. No creo que esta vez sea diferente que las demás— dijo mirándolo en silencio, que se prolongo hasta que se escucho la risa del mago.
—¿Tan bien me conoces Nathriel?—
—Llevo años conociéndote Gandalf— dijo riéndo sonoramente la joven enana —Se cada uno de tus trucos viejo mago, nada se me escapa—
—Eres astuta, para ser una enana—
—No se si ofenderme o sentirme alagada— rieron por un momento hasta que Nathriel hablo.
—Entonces ¿Que necesitas de mi, Gandalf ?—
En ese instante la cara de mago se torno obscura y sería llamando la atención de la enana.
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La Cazadora. (El Hobbit FanFic)
FanfictionEste libro narra una historia donde el honor unirá a más de una raza. Nathriel Hacha de Bronce, un joven enana de antaño es visitada por un mago muy peculiar pidiéndole ayuda a ella, pues se embarcara en una aventura suicida con una compañía curiosa...