Apenas se había marchado y se quedó vacío, destrozado y sin sentidos, se encontró perdido en cuanto escucho la camioneta partir, se odio aun más por no detenerlo, quería correr tras el y pedirle disculpas, quería buscarlo y rogarle que le perdonará, fue a casa de su Tía Matsuda y al ser recibido por unos cálidos abrazos solo se sintió terriblemente mal, se alejo de sus brazos pues vio el peligro de comenzar a llorar, si empezaba temía no poder parar, pudo sentir la preocupación salir de aquellas dos a las que tanto quería, pero no podía solo fingir que estaba bien, estaba confundido, sabía lo que había pasado y que el había sido el que lo provocó todo, era el gran culpable pero no lograba comprender que era verdad, no merecía consuelo, merecía sufrir, pero no comprendía nada, esta vez se había ido, y no podía buscarlo, quería llorar, pero solo unas cuantas lágrimas cayeron de su triste mirada, y termino toturandose con sus pensamientos, con recuerdos que solo lastimaban más y más, podía imaginarlo llegando a su casa, no había comido ni salido de su habitación, el susurro de voces le indico que ya llevaba un gran rato encerrado, seguro estaban preocupadas, era un idiota, mira que estar así apenas pasadas unas horas, ¿como resistiría toda la vida?, nisiquiera comprendía que fuera tan doloroso, esto debía ser sencillo, Morinaga no debería dolerle tanto su ausencia, la puerta se entre abrio, había escuchado hace un rato a Matsuda pedirle que comiera, el agradeció pero se negó, esta vez eran unos pequeños pies los que entraban con miedo, no, más bien con preocupación, estaba dando la espalda a la puerta, pero pudo saber quién era, se sentó despacio en la cama, y solo reviso su celular una vez más esperando una sola llamada, no quería a Kanako ahí, no quería que lo viera así, el siempre se mostraba fuerte ante sus hermanos incluso cuando murió su madre, ¿Por qué mostrarse débil? ¿Solo por...? El, el no llamaría, y si lo hiciera el no debía contestar ese llamado, pero empezaba a creer que no podría contenerse, que si le llama simplemente le contestaría sin dudar, le gritaria que lo sentía, y que lo necesitaba, tal vez necesitaría más que eso, pero se volvía a quebrar al notar que era tarde y no recibía llamado alguno, ¿habrá llegado con bien a casa?, tal vez no debió dejarlo ir en esa condición, pero eso estaba estipulado, olvido que Kanako se encontraba ahí, pero pronunció como si nada el nombre de aquel que había perdido
-MorinagaY Souichi comenzó a llorar, por que desde que se marchó, no fue capaz de pronunciar su nombre nisiquiera en su mente
-¿No crees que Morinaga igual esta sufriendo, hermano?
Creo que debiste hablar con el, seguro te habría preferido por sobre todo, y así ahora estarían los dos felices cenando, ya vi que tienes el celular en tu mano, anda, que yo se que Morinaga contestará inmediatamente y vendrá veloz hasta ti, entonces podrás disculparte y todo arregladoSouichi se giro ante ella, limpiando sus lágrimas, aunque no era necesario la oscuridad de la habitación era ayuda para ocultar su tristeza, lastima que su voz desde el principio comenzó a quebrarse dejando que Kanako logrará ver en medio de la oscuridad su sufrimiento
-N-no se de que hablas Kanako, estoy pescando una gripe- trago en seco- si tu piensas que estoy así por él te has confundido desde principio niña
-Se que es por el, cuando tienes gripe no lloras, además hace calor, y el es lo único que te falta
-¿Ah?, ¿Quién demonios esta llorando?
-¡Hermano!, ¿apoco lo de ayer no tiene nada que ver con esto? ¿con que llegarás tan mal hace rato? ¿Acaso fue la gripe la que te dijo todo eso ayer en tu...
-No, pero, esto es lo mejor, y no estoy diciendo que tienes razón ¿escuchas?, solo digo que el necesita eso, y siempre lo necesito, la verdad es que lamento que lo hayas tenido que saber y...Los pequeños brazos de su hermana se rodearon en su cuello, comenzó a llorar sin sentido
-Esta bien hermano, sospeche todo, ocultarlo de mi es tonto, pero es que solo tu te complicas tanto, lo que tienes con el no tienes que esconderlo, por que a nadie le importa, mientras tu seas feliz no importa con quien sea, además a todos les agrada Morinaga, nadie te juzgará, ni se burlara, bueno al menos nadie que te importe, tu al fin debes aceptar que un simple amigo jamás te haría sentir asi, y ¿sabes una cosa? Puedo ver justo ahora en esos ojos tan bonitos que siempre has tenido, que el sentimiento es verdadero y puro, incluso si tu no encuentras las palabras para describirlo, eso prueba que es demasiado para ti, demasiado para que puedas expresarlo, existe y no podría ser mejor, y debes luchar por eso y seguir lo sientes
-Basta- soltó una triste risa, las lágrimas no le bastaban, incluso podía empezar a reírse mientras lloraba de la ironía y cruel situación, podía volverse loco en ese momento- ¿cuando creciste tanto?-He, en realidad creo que se lo debo a la hermosa familia que tengo, a mi bobo hermano mayor, que siempre me ha cuidado incluso de los monstruos que habitaban debajo de la cama
-Yo, yo, se que a tus ojos se ve estúpido, realmente yo igual lo veo así, probablemente tienes razón, y sin embargo no puedo hacerte caso, esto es lo que debe hacerse, se que sera para su bien, se que esto es lo que necesita, se que superará lo que yo dije y al final será feliz, lo único que debo hacer es quedarme aquí, y dejar que pase su vida así
-¿Por qué?
-Por que yo nunca podría darle lo que quiere
-Ahora puedes
-Si, pero le estaría arrebatando aquello que tanto espero, por lo que tanto sufrió, el hablarlo antes con el no habría funcionado, yo lo conservaría pero siempre vería esa tristeza en su mirada, el se enfadaría y quizás le llevaría más tiempo perdonar
-Debes decirle, decirle que son unos, unos tontos
-Son unos idiotas, pero ellos algún día comprenderán y dejarán a Morinaga ser feliz con quien quiera
-Estas renunciando a él, lo hiciste renunciar a ti, y el ahora quiere ser feliz contigo
-Me odiara, se podrá enamorar en un futuro cuando les haga ver a ellos la verdad, y al fin podrán aceptarlo
-¿Y tu?
-Yo estoy bien niña, después de todo tengo una hermosa Familia ¿no?Ella asintió, el acarició sus cabellos y le ordenó ya no preocuparse, le dijo que durmiera y le agradecería a su tía por preocuparse, al salir de su habitación la niña le dirigió una tierna sonrisa, escucho susurros y pasos alrededor de otra hora más, hasta que por fin observó las luces apagarse y las puertas cerrarse.
Se sentía patético dejar que su hermana lo viera así, solo por que no tenía la suficiente fuerza para volver al departamento que tanto solía maldecir, y que ahora le atormentaba más que nunca, la única cosa que podía levantarlo era su familia, pero Kanako solo estaría por las vacaciones, Tomoe estaba lejos y ni hablar de su padre, la única que le quedaría era Matsuda, que aunque consoladora, le hacía sentir increíblemente melancólico, justo ahora las investigaciones eran obsoletas, y se sentía patético claro, es verdad, jamás entendió como Morinaga era capaz de siempre decir "Te amo" tan fácilmente, el no podía controlar sus sentimientos, no podía clasificarlo, no podía nombrarlo, no sabia que era y eso le molestaba pero sabía algo, lo sentía, crecía cada vez más de manera preocupante, y era un cúmulo de emociones que de ninguna manera podía expresar, siempre le faltaban las palabras exactas, pero el discurso de su hermana le hizo pensar que quizá no eran suficientes todas las palabras imposibles, quizá solo una, "amor", ¿era amor lo que sentía por Morinaga?, ¿era amor lo que vivía con el todo el tiempo? ¿de verdad eso era?, de repente le pareció insignificante eso, ¿amor?, lloro amargamente, "amor" le pareció era una palabra muy simple, sin chiste y sin sentido, que de ningúna manera describía todo lo que sentía por Morinaga, "amor" quedaba pequeño para lo que el sentía, quizá Morinaga sentía igual pero era la palabra que más se aproximaba a su sentir, a él incluso le pareció quedaba muy lejos de llegar a describir lo que sentía, así que penso "aún no inventan la palabra, ¿como se supone que se la dijera a ese idiota? ¡La estúpida palabra no a sido inventada!" volvió a llorar en un grito ahogado, probablemente solo bastaba decir todo lo que acababa de pensar, pero ya no importaba, se había marchado y el había sido quien lo empujó a irse, lo había perdido y jamás lo vería de nuevo, y no volvería a escuchar su voz, ni podría jamás decirle todo, no valía la pena pensar en que no podia decirle que la palabra amor quedaba pequeña, no valía la pena pensar en eso, sus sentimientos siempre se quedarían escondidos en su pecho, y sería repetidos una y otra vez por su cabeza cada vez que lo llegara a recordar, que ya podía ver sería seguido, pero al menos podía imaginarlo al fin reunido con sus padres, y así obtendría la felicidad que tanto merecía, quería irse con la idea de Morinaga feliz abrazando a sus padres en su casa, pero su último pensamiento antes de lograr dormir fue un Morinaga sumergido en una bañera llorando melancolicamente y por eso mientras dormía lloró, le destrozaba incluso en sueños verle llorar.
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El motivo
FanfictionEs un tirano, aquel ser humano sin corazón... Mientras sus labios escupen dolor, mientras su corazón se rompe y sus ojos se llenan de lágrimas la imagen de Souichi se vuelve borrosa, un golpe tras otro. ¿Por qué? Portada por: Mxxrrisxn Personajes de...