❛ Vida arreglada ❜ ─ MiChaeng (G!P)

O3;; La Cena. 🐧

Narra Mina:

Estaba lista. Lista para encontrarme con aquella persona y enfrentar mi futuro, ¿No?

— Es por el bien de la empresa... — repetí por enésima vez aquello, acompañado de un soplido y una mueca de disgusto.

Estaba vestida como me sentí cómoda, un vestido hasta las rodillas morado, bastante oscuro, y unos zapatos con plataforma. Quería intimidar a aquella persona que se atrevía a despojarme de mi libertad.

— Minari, ya está por llegar. —dijo mi padre tocando la puerta de mi habitación. Ya estaba terminando de maquillarme y salí sonriente, como si nada me afectase.

— ¿Qué tal estoy, papá? —Solté frente a él, mientras me miraba, su expresión era de sorpresa y parecía gustoso de que me vistiese tan bien para la ocasión.

— Hija, sin dudas estás hermosa... —me sonrió, sus ojos parecían tristes y se quedó callado por un largo rato observándome afectuosamente— Te ves como tu madre...

Las palabras de mi padre ablandaron mis duro corazón, y por un momento pensé en mi madre. ¿Qué haría ella en mi lugar?
Me veía como ella, pero tal vez no actuaba como ella. Seguramente estaría diciéndome que no acepta esto, que yo debo ser feliz con quien yo amo en verdad... Pero me diría también que no se juzga a un libro por su portada; diría que debo conocer a la persona antes de ser malvada, antes de cometer un error.

Solo abracé a mi padre rápidamente y luego se oyó en la puerta dos leves golpes. Abrimos y vi a un hombre, tal vez misma edad que mi padre, con un traje bastante elegante y algo nervioso o ansioso.
Yo estaba por desilusionarme al ver a éste, pero detrás de él se encontraba una joven tímida y algo temblorosa. Era más pequeña que yo, y vestida menos formal pero bonito. Un lunar debajo de su boca destacaba en su cara y su pelo corto la hacía ver algo más joven incluso. ¡Eso es! La reconocí con esos rasgos. La chica que vi esta mañana.

— Buenas tardes, Señor Myoui. — saludó el hombre con una reverencia, mi padre y yo nos movimos de la puerta y dejamos pasar a ambos.

— Buenas tardes, Señor Son. — dijo mi padre, imitando al otro.

La chica y yo nos quedamos mirándonos, no era lo que esperaba que pasase justo ahora. ¿Por qué mi Padre no me dijo que esa persona era una chica? No tengo problemas con eso, pero... ¿Acaso en serio esto es un arreglo de mi padre?

— Oh, claro. Como veo que no hablaran: las presentaré — se aclaró la garganta el señor Son— Ella es mi hija menor, Son Chaeyoung. Y Ella, Chae, es la hija del señor Myoui, la señorita Myoui Mina.

— Un placer, Mina. —se reverenció la chica a mi lado, me sorprendía su simpleza y su hermosura, era elegantemente desaliñada.

— El placer es mío, Chaeyoung. —sonreí haciendo lo mismo, un suspiro involuntario salió de mi boca, como de alivio. Ya sabía el nombre de aquella extraña: Son Chaeyoung.

Había estado mordiendo mi labio de solo pensar en que podría haber sido un hombre mayor, sin dudas esto aliviaba la situación pero igual dolía aún.

— Bien, ustedes conozcanse. Nosotros vamos a hablar sobre trabajo y arreglos. Vamos, señor Son. —Dijo mi Padre, para luego irse entre risas junto al padre de Chaeyoung.

El silencio reinó el lugar, pero no era como un silencio incómodo, más bien era peor que incómodo. Me senté por fin en el sofá de la sala, golpeando el mismo para que Chae se sentase junto a mí, y eso hizo.

— Esto es incómodo. Lamento intervenir en tu casa, tu vida y todo tu futuro, pero tanto tú como yo sabemos que no había opción. No con nuestras familias... De todos modos, y ya que esta mañana nos conocimos, ¿Por qué no me cuentas algo sobre tí? —al fin soltó Chae, parecía callada pero se la veo bastante elocuente.

— Bien... Me llamo Myoui Mina, vamos a la misma escuela, vivo con mi Padre, soy heredera de la empresa más grande en Corea, soy algo anti, me gusta la música triste... —dije, pensando en más cosas sobre mí, pero pronto la menos me interrumpió.

— No, dime algo que no toda la escuela sepa. —me miró fijamente, tenía una intensa pero tierna mirada— ¿Quién es Myoui Mina en realidad?

— Yo —realmente no sabía qué responder. Me pareció muy directa y chocante, dolió en cierto modo su forma de decir las cosas.— ¿Que no toda la escuela sepa?, Insinúas que saben de mi por ser la rica, ¿verdad?, Apenas entré a esa escuela hoy, ¿Cómo saben tanto de mí? —miré enojada a Chae, sabía que no tenía la culpa. Pero estaba harta— ¿Hay rumores también...? —sabía que no me gustaría ls respuesta, pero quería oírlo.

— Mina, no necesitas saber lo que la gente piensa de tí. No necesitas estar a la defensiva y tampoco necesitas que yo te diga que claro que hay rumores. —Movió su mano frente a su cara y enumeró los rumores, dedo por dedo— “Se acostó con el director para entrar ya que su padre es muy tacaño”, “es una chica fácil”, “Si es rica y está aquí, entonces es una farsa”, “Es muy despistada, engreída y egocéntrica.” etcétera, etcétera. Etcé... —miró hacia mí luego de hablar sobre cada rumor. Estaba totalmente devastada. Yo no había hecho nada de eso, ni siquiera hablé con otros alumnos el primer día.

— Yo no... —suspiré profunda y fatigadamente— yo no he hecho eso.

— He dicho Rumores, no hechos. Son cosas que oí, y tú querías saberlo. —me miró nuevamente— pero, no deben afectarte. Todos son unos idiotas que no aprecian el arte y su belleza. —hizo una gran pausa y luego agregó— Mina, nadie sabe de tí, por eso me gustaría conocerte. Quiero que los rumores no sean más que eso, y quiero evitar que hablen demás sin conocerte ni apreciar tu arte y su belleza. —Sonrió animadamente— Sin conocer a Myoui Mina.

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💕 Ah, Feliz año nuevo. 💕

Corrección:
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