El frío llegó sin avisar. Él se sorprendió, pero no le dio mucha importancia.
El tiempo pasaba y el frío iba en aumento. Pero él seguía allí, no le prestaba atención.
Los abrigos dejaron de servir. Así que decidió quedarse quieto, no luchó.
Sus piernas comenzaron a congelarse. Así que decidió tirarse en el suelo en posición fetal para soportar, no luchó.
La sangre de sus venas se cristalizó. El frío llenaba todo su ser, pero él nunca luchó.
Nunca luchó porque esperaba un milagro. Esperaba que el tiempo retrocediese y que todo volviese a ser cálido como antes.
Pero cuando sintió el frío en su corazón, se percató del gran error que había cometido.
Se arrepintió, pero ya era tarde. Sus lágrimas recorrieron su rostro buscando llegar al suelo.
Esto fue lo último que hizo. Su corazón se congeló.
Él cometió malas decisiones y esperó un milagro del tiempo. Pero el tiempo no entiende de esas cosas.

ESTÁS LEYENDO
Reflexiones Solitarias.
RandomMil y un hojas tengo esparcidas en toda mi habitación. Hojas que cuentan historias, hojas que son cartas sin enviar, hojas que son simples reflexiones o intentos de poesías. Llevan conmigo más de 10 años y mientras más pasa el tiempo, más hojas se...