¿Acaso los momentos deben tener un fin?
¿Acaso los pensamientos se acaban?
¿Acaso las ideas se fugan?
¿Acaso el interés se pierde?
¿Acaso la rutina destruye?
¿Acaso el cansancio es el culpable?
Insomnio, mente voladora.
Día, noche. Son iguales.
La inspiración es corta, le cuesta crecer.
Trabajo tras trabajo, proyecto tras proyecto.
Prisión tras prisión, prioridad tras prioridad.
Reputación en caída libre.
Las horas peligran, la envidia se hace fuerte.
La máscara desgastada por el uso. El disfraz yace sucio.
¿A quién le importa?
¿A quién le importa?
El juego debe seguir. Las leyes deben cambiar.
¿Sería lo adecuado? ¿Sería lo que debe hacerse?
¿Sería lo esperado? ¿Sería lo predeterminado?
¿Los caminos siempre llevan a Roma?
La depresión asfixia. El desinterés es selectivo.
Tiro todo por la ventana. A la mierda el destino.
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Reflexiones Solitarias.
RandomMil y un hojas tengo esparcidas en toda mi habitación. Hojas que cuentan historias, hojas que son cartas sin enviar, hojas que son simples reflexiones o intentos de poesías. Llevan conmigo más de 10 años y mientras más pasa el tiempo, más hojas se...