XV

2.6K 126 3
                                    

No sabía cómo había terminado en eso, pero ahora no hacía más que observarla dormir en silencio. Cada facción de su cara era perfecta, y cuando duerme balbucea cosas sin sentido, también sonríe sin querer hacerlo y se mueve mucho tirando sábanas en el suelo.
Ahora que estaba viviendo eso, podía confirmar que por fin siente amor de verdad por alguien, por fin quiere proteger a alguien de todo lo malo y por fin quiere pasar el resto de sus horas con alguien.
Nunca le gustaba la idea de enamorarse, es más, tuvo novias pero no supo cómo tratarlas. Por eso después decidió no estar con ninguna salvo que sea por placer mutuo, solo quería concentrarse en el fútbol y así lo hizo.
Suspiró y siguió mirándola, rogaba que el día de mañana lo quiera como lo quiso hace un rato en su cama, y le diga a su amigo que esto que pasó si había significado algo para ella y que fue lo suficientemente importante como para dejarlo y estar con el.
Pensó que el mañana por ahí no iba a ser como el quisiera y tenía que adaptarse a las consecuencias que probablemente aceptaría ya que no iba a dejar de estar con ella.
Había que decidir que hacer con esto que les pasaba y la paciencia era algo que no iba con el, se notaba en todo lo que hacía y más en la cancha. Cristian no tiene paciencia de esperar a que un amigo llegue al área y hacerle el pase para que el otro marque, una vez que el consigue la pelota corre y patea el mismo y a veces sale bien, otras recibe insultos y pide perdón. Ahora tampoco tenía paciencia así que movió despacito a Luna y está en medio de quejidos se despertó.

-¿Que pasa? -Lo miró dormida.

-Necesito saber qué va a pasar después de esto -Preguntó el.

Aunque estaba algo cansada y muerta de sueño, fue suficiente lo que el jugador dijo para que se despabile.

-¿Pasar como? -Dijo para darse tiempo a pensar.

-Pasar Lu -Dijo el- ¿Vas a seguir con Licha o vas a dejarlo y estar conmigo?

-Yo le dije a él que íbamos a intentar estar juntos -Respondio- No puedo echarme para atrás ahora

-O sea que lo nuestro queda acá -Afirmo y se levanto enojado.

-No sé que querés que haga, yo le di mi palabra a él, no puedo fallarle

-¿Y a mi sí? -Cristian la miró esperando respuesta.

-No, a vos no te estoy fallando -Dijo pero fue suficiente para que el se vista rápidamente -¿Qué haces? -Se acercó.

-Dejame Luna -Ella tomó su brazo para frenarlo.

-No dale, hablemos -Insistió pero el la saco de una manera bruta de su lado, se puso la remera y salió de la habitación.

Luna escuchó la puerta cerrarse indicando que el se había ido y se tiro en la cama frustrada por la escena de recién. Se había metido en un quilombo tremendo y ella misma era la culpable.
Lo que le dijo Licha ese día era lo que ella debió ver hecho pero no pudo, ya con atender su llamada a la tarde le había fallado a Licha.

-Antes de que te vayas ¿Te puedo pedir un favor?-Ella asintió- Sé que podés hablar con quien quieras y verte con quien quieras pero agradecería que te alejes de Cristian... Hoy en el entrenamiento nos cruzamos feo y para evitar malos entendidos, ya sabes...

-Si, creo que es lo mejor después de lo de hoy -Le sonrió y le dio un corto beso para después bajar del auto y subir a su edificio.

Otra vez era víctima de sus arranques cuando estaba enojada, y su resentimiento, odiaba esa parte de ella que no la dejaba pensar bien las cosas porque después sufría las consecuencias de tener que vivir cosas que la incomodaban y la hacían sentir atada. Ella era un alma libre que no soportaba las ataduras de nadie, y cuando las sufría de tanto aguantar explotaba terminando con todo lo que haya a su paso.
Luna podía desordenar tus planes en un segundo y en el siguiente acomodaba todo tal cual estaba antes.
Y a Cristian le fascinaban los desastres.

***

Es corto pero bueno ahre
Besos
Abril💚

Secreto|| Cristian Pavon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora