Capitulo dieciséis

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Capitulo dieciséis

Eran eso de las ocho de la mañana, lo sabía, se había quedado dormido. Liam había abandonado el cuarto del Motel muy temprano seguro. Necesitaba bañarse y comer algo y apenas se daba cuenta de que ni siquiera llegaría temprano para ir a la escuela.

Agradeció que su madre estuviera de viaje, hoy no iría a la escuela, no iba a pasar vergüenza como siempre que llegaba tarde, además no tenía mucho entusiasmo. Y tampoco tenía muchas ganas de verle la cara de estúpido al director diciéndole con la mirada que hable con su madre por lo ocurrido. No quería hablar de lo ocurrido, prefería olvidarlo, ya tenía demasiada vergüenza.

Caminó hasta la puerta y miró a los lados, esperaba que ninguno de sus compañeros de curso cruzara por su casa a esta hora o no podría evitar un extenso cuestionario acerca de por qué no iba a la escuela y si el “pequeño incidente” del otro día tenía que ver.

Literalmente era tratado por los que no lo habían tratado jamás, de una forma ofensiva para él. Lo veían como un enfermo sin control al que debían cuidar y cuidarse de él, un psicópata que se cortaba sin razones en el baño de la escuela y alguno que otro no soltaba la idea de que lo hizo para llamar la atención o tal vez porque le gustaba el masoquismo.

No tenía ganas de pensar en eso.

Abrió la puerta de su casa y dejó la campera sobre el sillón. Allí se detuvo porque creyó sentir algo diferente, y miró su casa de arriba abajo mientras parecía inmóvil frente a la estufa.

Casi por leerle el pensamiento su madre salió del lugar donde él apuntaba la mirada y lo observó enojada y feliz, no sé si hay algún tipo de adjetivo para describir esas dos emociones juntas.

—Llegué temprano esta mañana. —le contó sin expresión alguna. —No te encontré en casa. No había nota, ni siquiera me contestaste cuando te llamé unas quinientas veces. ¿Dónde demonios estabas?

Zayn tragó saliva, debería haber sabido que esto alguna vez pasaría.

—Estaba con los chicos. —respondió rápidamente mientras intentaba sacarse el tema de encima.

—¿Con los chicos? —preguntó su madre.

Allí hubo un intercambio de miradas tan fuerte que parecían estar matándose con la mirada más que discutiendo.

—Jorge, Lucas, Danny—dijo Zayn como si fuera obvio.

Zayn bajó la mirada y se quitó parte de la ropa, se quería bañar, pero lo más importante, quería quitarse a la madre de encima. No le iba a contar sobre Liam y menos sobre lo que pasó en la escuela.

—Y ¿Quién te dio el permiso de volver a estas horas? —le preguntó ella, aún sin expresiones, estaba en un estado de shock. Lauren acostumbraba a hacerlo luego de una situación de nervios y digamos que estuvo toda la noche tratando de encontrar a su único hijo que había dejado la casa sola y se había ido por ahí a tomar y fumar por las peligrosas calles del barrio.

—Yo me lo di, mamá. Tú no estabas, ¡ahora déjame en paz! —le respondió Zayn y se quitó la remera para dirigirse al baño. Recordó las cicatrices y corrió a encerrarse en el baño, otro descuido como ese y todo se le iría a la mierda.

Bajo la ducha cerró los ojos y le dio espacio a su memoria para recordar la maravillosa noche que había pasado. Recordó cada beso, caricia, toque y roce y lo disfrutó de la misma forma. Pensó en que esa noche Liam no parecía el hombre que lo había amenazado a la salida de la fiesta de Alicia, ni tampoco el que lo violó aquella noche, a ese no le habría dado ni un escupitajo, a este le entregaría su cuerpo todas las noches.

Barely Breathing (Ziam Fanfiction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora