Barely Breathing (Ziam Fanfiction)

Capitulo diecisiete

Capitulo diecisiete

Las cosas estaban tensas… Zayn y su madre no se hablaban. Él jamás lo permitiría, cada vez que se presentaba la oportunidad, se encargaba de derribar el momento con su espada de rencor, vergüenza, miedo y orgullo.

No tenía por qué preocuparse, eso había sido cosa de una sola vez después de varios años, no pasaría de nuevo. No necesitaba tratamiento, ni necesitaba cambiar. Y después de todo se seguía preguntando si lo antes afirmado era del todo cierto, nunca había conformado a nadie, quizás sí debía cambiar.

***

Era ya parte de su rutina pasar la madrugada en un cuarto de hotel con Liam, y eso que al principio creyó que no lo soportaría ni para hablar por dos minutos. Levantó la mirada y lo vio sentado sobre la cama con el cigarro entre sus dedos y creyó que eso sería lo que harían toda la noche, porque no parecía querer moverse, ni hablar desde anoche.

Zayn se mordió un labio y lo miró desde el rincón.

—¿Vas a quedarte allí sentado toda la noche? —le preguntó con poco interés.

Liam frunció los hombros y mantuvo su mirada en la caja de cigarrillos que giraba en su mano, pensativo.

—No me vas a responder—dijo Zayn en un tono bajo, como si le dijera sin decir.

Liam levantó la vista más melancólica que pudo poner y lo miró.

—¿Qué quieres que haga? —le preguntó.

Zayn lo miró y se asombró de que le estuviera preguntando qué hacer, como si alguna vez le hubiera gustado recibir órdenes, como si alguna vez hubiera demostrado una pizca de ignorancia. Era la primera vez que le escuchaba decir esa frase con todo el significado que tuviera.

—¿Acaso tengo que decirte? —le dijo Zayn y avanzó hacia él.

Le robó el cigarrillo de las manos y probó mientras se sentaba a su lado.

—A ver, no me vas a decir que te ofendiste porque anoche fui yo quien…—intentó decir mientras se reía.

—Ni lo digas—interrumpió Liam enojado.

Zayn se rio y le golpeó el brazo.

Liam mantenía la mirada en un punto inexistente, donde hallaba la tranquilidad que necesitaba para reflexionar sobre cosas que prefería no contar. Pero Zayn se seguía riendo de él y eso parecía molestarle cada vez menos, y que en este momento estén hablando y no teniendo sexo le había parecido interesante. Cerró los ojos con pesar y la sonrisa de Zayn desapareció.

El morocho lo acompañó poniendo cara larga y eso lo hizo sentir mejor. Pero Liam había tenido muy pocos momentos de felicidad en su vida, estaba acostumbrado al dolor, la vergüenza, al miedo y esta situación no reflejaba ninguno de ellos. Estaba perdido, había perdido.

Zayn apoyó sin querer su barbilla sobre el hombro de Liam y le provocó una sacudida. El castaño lo tomó del cuello y lo azotó contra el barandal de la cama. Liam apretaba fuerte, con toda la furia que pudo concentrar en sus músculos. Pero Zayn lo miraba serio y con una mano sosteniendo la muñeca como si esperara el momento preciso para quitárselo de encima.

—Liam, —intentó decir Zayn entre gemidos, se aclaró la garganta. —no te tengo miedo, así que deja de hacerte el malo.

Liam apretó con más fuerza, no le gustaba que los pendejos le quitaran autoridad y menos que le dijeran que no daba miedo, era Liam Payne el hombre que más daba miedo en todo el mundo.

—¿No? ¿No me tienes miedo? —dijo Liam con un tono burlón. —Pues, yo en tu lugar empezaría a temer.

Zayn le apretó la muñeca y luchó en demasía para quitarse la mano de Liam del cuello hasta que por fin lo consiguió. Y con toda la fuerza que contenía lo arrojó hacia atrás dejándolo tendido en la cama. La respuesta de Liam no tardó en llegar y empujó al morocho tan fuerte contra la pared que lo hizo gemir.