Barely Breathing (Ziam Fanfiction)

Capitulo veinte

Capitulo veinte

Golpeando la puerta, Zayn esperó fuera para que Alicia lo atendiera. Sabía que sería una velada incómoda, más aun sabiendo que Liam podría aparecer en cualquier momento, pero lo prefería a quedarse en casa con su madre que lo perseguía de arriba abajo con preguntas.

Con Alicia hablaron un buen rato de cosas de la vida como solían hacer y ella le contó algunos datos sobre su infancia y la de Liam que a Zayn le sorprendieron bastante porque se le hacía muy difícil imaginar que Liam en algún momento de su vida fue tierno e inofensivo. Se rio por eso. Todo iba bien hasta que se sienten unos pasos en la escalera y Liam baja como quien no quiere la cosa, y luego, al ver como lo miraban se detiene y cruza la mirada con quien más esperaba hacerlo.

—Hola—le dice Alicia tratando de sacarlo del trance.

—Hola—respondió Liam mientras no despegaba la mirada de Zayn. Zayn bajó la mirada, le costó sostenerla esta vez.

—Yo…—intentó decir. —Voy por una cerveza.

Alicia se levantó de repente del sillón y habló.

—¿Sabes? No hay cerveza. —comentó. —Voy a comprar y vuelvo.

Liam se dio la vuelta y la miró con los ojos bien abiertos ¡De ninguna manera se iba! No pensaba pasar tanto tiempo a solas con Zayn, no después de lo que pasó anoche. Pero antes de que pudiera protestar, ella ya había azotado la puerta.

Reinó el silencio y la incomodidad se instauró en el ambiente, Liam no lo iba a dejar solo sentado en el sillón, quizás en otro momento lo hubiera hecho, era muy capaz, pero no ahora y no con Zayn.

Visto y considerando que Alicia no vendría y que había sido todo un pretexto para que tuvieran que pasar la tarde juntos por alguna razón, decidieron dar el brazo a torcer y conversar. Salieron afuera y se sentaron en uno de los escalones de la pequeña galería.

—Entonces… ¿Bailaste toda la noche? —le preguntó Liam para romper el hielo.

—Un poco. —respondió Zayn. —Y ¿tu?

—Dormí. —dijo casi sin decir porque dudó hasta el último momento.

—¿Dormiste? —preguntó Zayn incrédulo, pensando en el beso de ayer y en la forma en la que Liam lo había dicho.

Liam omitiría los detalles, se le veía en los ojos como giró de un lado al otro en la cama y no consiguió quedarse dormido. Se acarició muchas veces los labios porque no quería perder la sensación, y parecía haber funcionado porque no la perdió hasta ahora. Pasó la noche entera recordando cada segundo de sus bocas unidas con desesperación y agonía por el tiempo justo: ahora si podría decir que había sido el beso que esperaba, de la forma que quería y con la persona que había deseado desde el primer día. Nunca olvidaría la cara que le vio cuando se separaron, porque nunca lo vio tan entregado, tan dispuesto y tan sumiso, supo que le podría haber pedido lo que quisiera y lo hubiera conseguido.

—Bueno, creo que lo hice—arregló.

Ambos se rieron de pura incomodidad.

Liam se mordió los labios y dejó salir la pregunta que tenía en mente.

—¿Lucas, no? —preguntó.

Zayn se sonrió instantáneamente luego de que ese nombre fue pronunciado y a Liam le picaron los celos.

—Sí. —respondió. —Es mi mejor amigo. Cuando pequeños compartíamos todo, desde una cena en familia hasta…

—La cama—agregó Liam.