Barely Breathing (Ziam Fanfiction)

Capitulo veintiuno

Capitulo veintiuno:

La luna alumbraba intensa, la noche estaba fría y por la calle no se sentía absolutamente nada de ruido.

Liam Payne descansaba en su cama.

Un golpe en la puerta lo despierta casi sin querer. Minutos después, Liam caminaba lentamente hacia la puerta, revolver en mano. Apuntó hacia la puerta y con cuidado abrió despacio apuntando a la cabeza de la silueta que encontró. Delante de él, halló un hombre sucio, flaco y vagabundo que lo miraba con diversión.

—¿Papá? —preguntó incrédulo.

El hombre quitó de mala gana el revolver de su cabeza.

—¡Déjame pasar! —le dijo mientras lo apartaba bruscamente de su camino.

—¿Dónde está tu hermana? —preguntó apurado mientras miraba en todas las direcciones.

Liam estaba en shock, hacía mucho que no veía a su padre. Se había marchado hace un largo tiempo, y jamás había dejado ni siquiera un llamado o un saludo, sus hijos llegaron a pensar que quizás había muerto… Pero siempre descartaban la posibilidad cuando volvía en el momento menos pensado, borracho y en busca de comida. Liam quiso abrazarlo, lo extrañaba mucho.

—¿No me has oído? —preguntó alzando el tono de voz.

—Está durmiendo—le dijo Liam volviendo del trance.

Lo vio caminando hacia su habitación y temió que quisiera despertarla para pedirle algún favor, en fin, molestarla con alguna de sus incoherencias o ilegalidades.

—¿Qué estás haciendo aquí? —le preguntó frenándolo.

—¿Debo tener una razón para venir a mi propia casa a ver a mis hijos? —le dijo dramatizando.

Liam lo miró mal.

—No te quedarás aquí—sentenció Liam.

Su padre lo miró desafiante, Liam era bien hijo de su padre.

***

—¿Por qué está papá aquí? —preguntó Alicia en susurro mientras lo veían comer.

—La misma mierda de siempre, Alicia—le respondió Liam.

El hombre levantó la mirada con recelo.

—¿Qué tienen que andar cuchicheando de su padre? —los retó.

Ambos lo miraron con mala cara, la única cara con la que lo podían mirar.

—¿Qué demonios estás haciendo aquí? —le preguntó Alicia sacada de sus casillas.

Su padre se levantó de la silla y lo miró a Liam con seriedad.

—Liam, tengo que hablar contigo. —dijo seriamente y la miró a Alicia. Liam se acercó a él mientras Alicia lo tenía tomado del brazo. La Payne sabía cuántos males tuvieron que pasar por culpa de ese hombre, no confiaba en él y jamás lo dejaría a solas con su hermano.

—Alicia, hija, déjanos a solas—dijo dramatizando e intentó una caricia en la mejilla de su hija a la cual ella reaccionó ariscamente quitándose rápidamente.

—Ve, Alicia—le pidió Liam.

Una vez que estuvieron solos, el desagradable hombre comenzó.

—Hoy me levanté temprano y quise recorrer mi querido barrio—comentó de manera sarcástica. —Saludar a mis amigos de la cuadra, esos hijos de perra que le dijeron a los mafiosos donde era mi casa…—continuó. —Y llegó una mierda de comentario a mis oídos que espero, me aclares.