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Habernos metido con Jeon JungKook no fue bueno, para nada lo fue.
Luego de que Suga se quedó a dormir en mi departamento por seguidad teniamos cierta sensación de que esa amenaza debía de ser tomada en serio, y bastante enserio porque la mirada que este nos lanzó no reflejó mentira ni miedo. A la mañana siguiente desperté primero levantándome viendo al contrario dormir tranquilo a pesar de los ligeros golpes en su rostro, con una mueca toqué mi propio brazo donde estaba la venda que cubria mi herida.
Al entrar a la cocina empecé a preparar el desayuno en silencio asimilando todo lo sucedido aquella tarde y noche, asimilando la amenaza, los golpes; sin poder quitar aquella imagen de ese chico entre burla y enojo al momento de amenazarlos a ambos.

Fuera cierta o no estaba conciente de que debía de andar con cuidado en la calle porque si es seguro que si nos vemos de luego esta vez YoonGi no estaria y esta vez si me dañaría. Debia aprender a defenderme al menos un poco, debía de buscar ayuda y creo que ya sabia a quien pedirle que me enseñe a defenderme sin la necesidad de usar armas; Debia de contactar a JackSon a pedirle ayuda.
Asentí para mi mismo yendo a la habitación a tomar mi celular marcando a JackSon al haber intercambiado numeros la noche anterior en la casa de Jin antes de la cena. Al hablar con este y quedar en vernos en la noche en un parque cercano a la tienda de Tae agradecí suspirando dejando el cel de lado para seguir con el desayuno, escuchando un bostezo por lo que giré observando al contrario entrar mientras me miraba y solo se sentaba a comer de lo que ya estaba servido por lo que bufé divertido sirviendo lo restante pasando su taza de café a como le gustaba; al sentarme frente a él lo miré.

-Creo que deberíamos de informar a la policía sobre esa amenaza

-¿¡Estas loco!? Si es verdadera y avisamos a la policia las consecuencias serian peores -musitó tomando del café- es mejor quedarnos tranquilos pero atentos a todo

-Si no avisamos entonces estaremos menos protegidos -suspiré pesado comiendo un poco del desayuno-

-Es mejor que solo nosotros seamos los involucrados porque el problema es nuestro y no de nadie mas

Molesto asentí aunque sabia el punto de este, en silencio comimos el desayuno ambos en nuestros propios mundos. Al salir y cerrar bien mi departamento fui con este a la calle despidiéndonos y tomando el rumbo que cada uno debia tomar; cansado solo caminé.

Puede que sea mi idea, o el miedo de la amenaza pero sentia como alguien me miraba, como alguien me seguía. Temeroso observé a mis alrededores para asegurarme de estar bien mientras instintivamente aumentaba el ritmo de mi caminata hacia el trabajo teniendo aun esa sensacion de ser vigilado por alguien; Estaba paranoico, pero luego de lo de la noche anterior y la amenaza quien no lo estaría mejor dicho.

Al llegar minutos después a la tienda entré suspirando aliviado saludando al dueño y a Zelo en el camino mientras me colocaba el chaleco que este me dio.

-Hoy será un dia algo pesado pero pondré mi mejor sonrisa -me dije a mi mismo quedándome en la caja a atender a quien fuese que llegara-

-Parece que tuviste una larga noche, ¿Como estas? -cuestionó el menor al apoyarse en el mostrador- te vez cansado si te soy sincero

-No pude dormir bien por unos problemas que tuve, pero tampoco podia faltar en mi primer dia y porque claro, necesito el dinero -me encogí de hombros saludando a la personas que entraban-

-Ya veo, al menos este trabajo no es pesado y te pagan bien...yo llevo aquí ya dos años pero me gusta, aparte de que el Señor Song es muy buen jefe y me recuerda a mis padres

Egoistic || NamSeok Donde viven las historias. Descúbrelo ahora