Capítulo 095. (Capítulos finales)

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  ++ACLARACIÓN: este capítulo lo había subido por equivocación antes, por eso la mayoría no entendía nada (me llovieron mensajes, lo siento). Espero que ahora puedan comprender lo que sucedía y me disculpen por mi torpeza :( Y sí, leyeron bien, capítulos finales...


Fijé mi vista en el reloj de pared y solté un suspiro corto. Estaba ansiosa y sentía que me desmayaría al mismo tiempo. Ni siquiera podía pensar con calma porque imaginaba cómo sería todo en el juicio y qué pasaría luego de eso. Estaba segura de que mi vida cambiaría, y rogaba no salir lastimada. Rogaba dejar de llorar todas las noches, poder reír sin estar al pendiente de mis problemas y dudas, y por sobre todo eso ser feliz de una buena vez.

Claire me había informado sobre lo que pasaría y cómo debía actuar frente al juez, pero a decir verdad no le había prestado mucha atención. Lo único que hacía en ese momento era imaginar a mamá sentada en una de las sillas de la corte con sus manos esposadas y una mirada maliciosa en su rostro, como si quisiera soltarse y asesinarme con sus propias manos. Y es que eso era lo que ocurriría; ella siempre había pensado que yo era una cobarde, y le demostraría lo fuerte que era ahora.

Mis expectativas de una "vida feliz" comenzaban a rearmarse de a poco. Incluso podía imaginarme al lado de Justin otra vez, sonriéndole como tantas veces lo había hecho. Y seguía pensando que nuestras discusiones, enojos, reproches y celos eran en su momento una fatalidad para mí, y ahora extrañaba todo eso.

Ojalá él estuviera a mi lado ahora, tomando mi mano con delicadeza y repitiéndome que todo saldría bien. Que mamá estaría presa y ambos viviríamos felices y juntos. Después de todo, Justin seguía ocupando gran parte de mi corazón, y dolía horrores no poder siquiera hablar con él.

Abrí el grifo del lavamanos y mojé mi cara, observando mi reflejo en el gran espejo. La luz brillante hacía que me diera cuenta de lo horrible, demacrada y destruida que me veía. Y volví a mi realidad de la peor forma cuando miré mi cuerpo. Alcé mi blusa hasta mi pecho y me horroricé; estaba demasiado delgada, tanto que incluso podía notar mis costillas. Llevé mi mano hacia mi boca y luego despeiné mi cabello, detestando no saber qué hacer.

Busqué un moño con la mirada y al hallarlo me hice una coleta alta, quitando de debajo de mis ojos todo resto de delineador negro, el cual se había corrido debido a mi llanto. Eran las cuatro de la madrugada y estaba sufriendo de un espantoso insomnio que amenazaba con permanecer en mí por mucho tiempo más. Caminé hasta la tina y la llené de agua, para luego echarle jabón. Parecía que lo único que necesitaba era una relajante ducha, y reí irónica en mi interior por creer que eso solucionaría todos mis problemas.

Me despojé de mi ropa interior y entré, recostándome. El agua tibia sobrepasaba mis hombros y apenas tocaba mi barbilla; cerré los ojos, palpando mi abdomen y subiendo hasta mis rostro, el cual refregué. Deseé entonces permanecer así de tranquila todo lo que restaba de mi vida, aun sabiendo que era más posible respirar en el espacio exterior a que eso sucediera.

Unos treinta minutos después decidí salir, abriéndome paso nuevamente hacia mi habitación. Me envolví en una bata de seda y dejé mi cabello suelto otra vez. Caminé hacia mi cama, la cual estaba totalmente desecha debido a todo lo que me había movido en estas pocas horas de "sueño", y me acosté sin cubrirme. Las sábanas blancas se entrelazaban con mis piernas de una forma placentera, haciéndome cerrar los ojos. Tomé una almohada entre mis manos y apoyé mi cabeza en ésta, sintiendo como iba conciliando el sueño de apoco y cayendo en los brazos de Morfeo.

[...]

Desperté debido a un suave toque en mi brazo. Abrí los ojos con lentitud, encontrándome con Logan. Pude notar que su ojo derecho aún estaba morado y que tenía leves moretones en su cuello y mejillas. Le sonreí a pesar de apenas poder asimilar bien qué ocurría, y él me tendió su mano para que me levantara.

Invisible »Jb. |FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora