Sol dejó un bol con palomitas de maíz sobre la mesa de la sala, Theo se inclinó un poco para tomar un manojo de palomitas y recostarse en el sofá llevándose cada una a la boca. Le dio play a la película y durante los primeros veinte minutos de ella ninguno habló.
Sol pensaba en cómo debía decirle a Theo su teoría y sobre si él podía o no creerle y guardar su secreto, pero confiaba en Theo y sabía que él no era de esa clase de persona.
Sentía su teléfono vibrar en su bolsillo y sabía que era Rome, no quería leer los mensajes por si Theo los veía, estaban muy cerca y él fácilmente podía mirar un poco y leer toda la conversación. Intentó concentrarse en la película pero necesitaba hablar con Theo; sobre el beso y sobre los tests.
Theo volvió a inclinarse a la mesa y tomar un poco más de palomitas, miró a Sol y le sonrió.
— ¿Qué sucede? —preguntó, ella lo miró sin entender—. Tienes una cara de preocupada, ¿pasa algo?
—Ohh eh—balbuceó—. Sólo estaba pensando.
— ¿Se puede saber en qué?
Sol sonrió un tanto tímida, debía decirle sus inquietudes con el beso. Él no había tocado el tema y tenía un tanto de miedo que fuese sólo ella la que se preocupara tanto. Tal vez debía escuchar a su hermana mayor cuando le decía que era demasiado joven como para preocuparse de cosas para mayores.
—Sobre el beso que nos dimos...
—Me gustó—confesó interrumpiéndola—. No sé qué haya significado para ti pero para mí fue algo serio, no sé si eso es lo que quieres saber.
—Pa-para mí también fue serio—respondió—. No beso a chicos que no me gusten; tampoco es que he besado a muchos, solo que bueno, tú entiendes.
Theo rio.
—Sí, creo que lo hago—sonrió—. Yo también beso sólo a quién me gusta—la miró y dudó un poco si debía acercarse más a ella. Así podía tenerla a la altura de sus labios y besarla.
Sol miró sus labios y se sonrojó, Theo se acercó un poco a ella y se mantuvo a esa distancia. El ritmo cardíaco de Sol fue aumentando y su respiración iba más rápido de lo normal, estaba de más decir que estaba nerviosa y al notar que Theo no dejaba de mirar sus labios, entró en un estado de nerviosismo y se alejó.
—Me di cuenta de algo en la página del colegio—habló, Theo se acomodó en el sillón y la miró con atención.
— ¿De qué te diste cuenta? —preguntó aunque ya sabía la respuesta, y lo peor era que no sabía cómo responderla.
—Hay un grupo de chicos que están usando nuestra información cada vez que contestamos un test del foro, Rome y yo creemos que son los del equipo de computación.
—Eh, Sol yo...
—Queremos saber quiénes son y para qué hacen todo esto pero no conocemos a nadie del equipo de computación y ninguno de ellos lo confesará, pero a ti sí te lo dirán.
— ¿Por qué crees que es el equipo de computación?
—Son los que saben de esto—respondió—. Minerva está ahí, puedes preguntarle si sabe sobre algo que se llama T&M
—T&M mmm.
—Sí, deben ser las siglas de alguna palabra clave—mencionó—, pero no sé qué puede ser en realidad.
—Las iniciales de los nombres—ella negó.
—Es muy obvio, nadie es tan obvio—respondió.
Theo se acomodó en el sillón, volteó su cuerpo hacia Sol y la miró con atención.
—Entonces tú quieres que averigüe para qué es T&M—ella asintió—. ¿Qué pasa si no es lo que crees que es?
—No creo nada, sólo quiero saber quiénes son los que hacen esto y saber para qué usan mi información.
—El colegio siempre usa la información de uno, es como Facebook, te recomienda y te pone al inicio lo que más te gusta—explicó Theo, aunque sabía que no tenía mucho sentido lo que estaba diciendo, en caso tal, era él y Minerva los que recomendaban los tests.
Sol negó, ella sabía que todo tenía una razón e iba más allá de una simple recomendación.
— ¿Vas a ayudarme a descubrir quiénes son los que hacen todo esto?
Theo suspiró, tenía que decirle ahora que estaba la oportunidad a flote pero dudada si era lo mejor para ese momento. Él sabía que si le decía la verdad, todo quedaría hasta ahí, ya nada entre ellos regresaría a ser igual.
—Está bien, te ayudaré.
Y Minerva lo mataría cuando supiese lo que había sucedido.
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#MiercolesDeTheo
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La primera vez que Theo besó a una chica
Short StorySol Martinez era la chica más linda que tenía el salón de segundo año, todos los chicos de su salón deseaban que ella le prestara la más mínima atención, la intentaban cortejar de todas las formas posibles pero a Sol no le gustaba ninguna, a menos c...