Capítulo 18: La piel de un asesino.

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Star-lord apretó los labios, aparentó sonreír con desdén. Loki agotó su comprensión, por lo que ya no le respondería con la otra mejilla.

Era como lidiar con un congelado muro que se negaba a admitir enseñando los colmillos, que estaba equivocado; que entre tanto odio y resentimiento, existía emociones gratas y no necesariamente negativas. Algo que por más que lo ocultara, hacía que las personas que lo conocían de verdad, inevitablemente fueran apegándose a él.

Todo venía en combo junto con las mentiras, el carisma, la sátira y su actitud mordaz. Pero por supuesto, para el Rey de hielo que luchó su vida entera por jamás depender y encariñar con alguien, era mucho más sencillo devorarlo todo, arrojar ráfagas de culpa como cuchillos sin importar a quien lastimase.

Peter siempre lo supo, solo que lo dejó en el olvido con el tiempo y el paulatino desarrollo de su relación. Ahora de pie en ese abandonado planeta, concluyó que su actual situación se debía a que por primera vez desde que se trazó su objetivo en la vida, el azabache afrontaba el haber sido víctima directa de su propia y acaparada confianza.

-Tienes razón...al menos en eso último-Concordó el humano asintiendo con la cabeza-Estoy harto de soportar y resultar perjudicado por tu maldito odio con el universo, hacia la vida sufrida y triste que te tocó-Soltó simulando una burlesca mueca de aflicción-¿Adivina qué?¡, no eres el único que la ha pasado mal, no eres el único que ha tenido que ganarse a punta de caídas y golpes todo lo que tiene, todo en lo que se ha convertido¡.

Antes de que el castaño pudiese continuar desahogándose, Loki se le abalanzó plantado fuertemente una mano sobre el pecho contrario.

-¿Crees que tus reclamos me importan?¡-Proclamó el azabache presionándole con su dedo índice-Pobre pobre Quill, nunca tuvo un mejor amigo-Se mofó con gestos similares a los usados por el mercenario-Mi pueblo, mi raza y lo único que me importa corre peligro mientras yo estoy aquí, a años luz de distancia tratando de resolver un jodido mierdero en compañía de alguien que si no me vendió, fue un incompetente que no supo hacer su trabajo¡.

Quill sujetó con rudeza la muñeca del azabache, completamente seguro que incluso si negligente cometió una equivocación, él no merecía tolerar esto luego de todo lo hecho.

-He estado de tu lado por años, prestando mi apoyo más allá de lo que pactamos en un principio, siempre por el bien de Jotunheim; nunca cometí un error o traición, ni reproché la naturaleza de tus motivos¡-Vociferó Peter enfurecido-Tal vez si sacaras tu puta y ególatra cabeza de tu trasero, podrías ver las cosas con sensatez, no como tu maldito narcisismo y delirio de superioridad quieren que sean¡.

El hechicero se sacudió bruscamente el agarre formando un puño con su mano. No era del tipo que recurría a la fuerza bruta; su reacción fue por reflejo natural de emociones que no deberían agobiarlo-Pedazo de...

-Solo cállate¡-Bramó el castaño retrocediendo sobre sus pasos-Te quejas de estar atorado conmigo en este agujero, cuando yo ni siquiera tendría por qué estar aquí¡-Manifestó consiguiendo recuperar seguridad-Soy un guardián de la Galaxia, no un maldito mensajero-Siguió con reprimida honestidad-Tengo una familia que me acepta con habilidades y defectos, un lugar al que pertenezco y que me ha dado una verdadera vocación...un futuro que por décadas pensé jamás tendría-Susurró Peter-Una maravillosa mujer que me ama y de la que me aparté sin avisar...

Loki no contestó, endureció su rostro y dejó caer libremente sus brazos a cada costado. El Jotun se confinó a analizar y apreciar con detenimiento cada gesto, expresión y vocablo pronunciado por el contrario

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