TRABAJANDO CON MI EX

CAPITULO 1 MI EX, MI NUEVO JEFE

              "Él fue el amor de mi vida y mi mayor decepción y eso sello mi destino"

Al mirar la cuenta bancaria en su laptop Sabrina suspiro frustrada porque todo se reduce a ceros, sus finanzas en general están en rojo, con cuentas por pagar apiladas, su despensa vacía y habiendo sido despedida de su sexto empleo en dos meses, solo puede decir que es un desastre ambulante y se preguntó cómo pudo haber pegado con el señor perfección, el que no tolera el desorden, que es un maniático del control y por supuesto llevaba sus finanzas impecables.

¡Sabrina olvídate del desgraciado!-se reprendió dándose un golpe en su sien sacandole un gesto de dolor-

Ya pasaron 3 años debería estar muerto y bien enterrado, execrado completamente de su corazón.

Sin duda las feministas la asesinarían y si fuera una novela los críticos lo llamarían "una relación toxica" y sin duda desmenuzarían al escritor.

En la tarde Sabrina recibió la visita de sus amigos

 Guadalupe "no podía ser más obvio su nombre mexicano ya que ella es mexicana",

Tara, nombre dado por lo la película "Lo que el viento se llevó"

Marcelo, ojo se pronuncia Márchelo porque es italiano.

Lupita era peluquera, estatura promedio,  súper sociable y buena gente y soltera.

Tara era Diseñadora de Modas, delgada, cabello castaño tenía un pequeño hijo de casi tres años llamado Andrea Nicolai.

Marcelo, 28 años de cabello pelo negro, ojazos verdes súper guapo y totalmente heterosexual.

Por su parte Sabrina era blanca, cabello castaño, rizado, ojos color miel, estatura promedio y para nada se consideraba una beldad, además que había nacido sin duda con muy mala suerte o como dicen estrellada, siempre andaba metiendo la pata, por eso no duraba mucho en sus empleos, y en cuanto a novios, mejor ni hablar, su límite fue el señor pomposo, que le destrozo su corazón sin remordimientos.

Da un sorbo a su café mientras acaricia a Lucrecia su gata angora pretenciosa que le gusta acostarse en su regazo para que su ama la acaricie. ¡Gata engreída! Pero la adora, así mismo se desbana los sesos tratando de encontrar una solución.

— Y si me corto el cabello, en los salones pagan muy bien y pueda pagar-propuso reunidos todo en la sala de su apartamento.

Lupita que había estado concentrada en una revista de chisme grito:

— Ni se te ocurra por vida de Cristo cortarte tu hermosa cabellera- hasta Toto, su perro buldog levanto la cabeza y le cuestiono, para luego echarse de nuevo el muy flojo

— Y si acepto el trabajo de bailarina exotica - sugiere viendo el anuncio en la sección de clasificados del periódico.

Sus amigas se miraron y terminaron negando con sus cabezas.

— No sabes bailar Sabrina, naciste sin duda con 2 pies izquierdos.-apunto Tara riéndose de ella descaradamente.

— Bueno no creo que a los clientes del club Oasis le importe mucho si bailo bien o no- razono siguiendo el juego, porque ni loca trabajaría como bailarina exótica.

— Claro que no, esos viejos verdes solo quieren meter mano-indico Lupita poniendo cara de asco- De ningún modo lo harás, no estás tan desesperada o sí?- pregunto ahora preocupada.

Esto era lo bello de sus amigos siempre se preocuparían por ellos y tratarían de ayudarla.

Marcelo regreso con una bandeja de café, es que el no solo era un galán también le metía a lo de la cocina. Era todo un estuchito de sorpresas.