CAPITULO 15 QUE PASE LO INEVITABLE

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Despierta al día siguiente cuando una luz se cuela por la rendija del ventanal.

Se da un estirón y le toma unos segundos caer en cuenta donde está y al recordar todo lo que paso la noche anterior una sonrisa tonta de adolescente enamorada se refleja en su rostro.

Suspira profundo y corre al baño a vaciar su vejiga.

Al bajar se maravilla de semejante casa, todo en ella refleja opulencia y buen gusto, desde cuadros de pintores famosos, alfombras persas en el piso, muebles sacados de una revista, la amplitud de cada espacio, la pintura, los acabados.

Una mansión para el solo, o es que ¿vive con alguien?.

No, el es soltero, pero que semejante derroche, esta casa para el solito, sin duda necesita compañía y a ella le encantaría ser esa compañía.

Su estomago sigue el olor proveniente de lo que imagina es la cocina, al entrar lo encuentra el allí, preparando el desayuno , ¡esta que se infarta!. Esta vestido con una camisa blanca, arremangada en los brazos, los primeros botones desprendidos dejando ver su fuertísimo y trabajado pecho, unos jeans color caqui que se ajustan a sus caderas, es todo un muñeco.

— Que bueno que despertaste, el desayuno ya esta listo- indica el sirviendo un plato para luego llevarlos a la mesada.

— ¿Tu no desayunas?- le pregunta al ver solo servirse café cargado y para ella ha puesto un vaso con zumo de naranja.

— Yo no desayuno-informa.

— Estas metido en alguna dieta rara, yo intente una vez pero no pude por mas de dos días-Habla con su acostumbrada lengua suelta.

El la mira con esos bellos ojos que hora se achican como detallandola y una sonrisa divertida curva sus labios.

— Tengo una dieta a base de frutas y cereales, además soy vegetariano.

Con razón esta en tan buena forma, ¡un hombre que cuida su físico!

— ¿No imagine que tu cocinaras?-pregunto asombrada

— Si, ¿porque la sorpresa?-pregunta dando un sorbo a su café

  Ella no respondió de momento y vio que el dedico a tomar su café mientras leía la prensa y ella empezó a engullir con ganas su desayuno, sintiéndose tan feliz de estar allí compartiendo el desayuno con el.  

  — ¿No tienes mujer de servicio?-pregunta ahora aunque lo obvio es que no debe tener una sino varias chicas de servicio,  pues con semejante casa, no modo que el haga los quehaceres.  

— Si pero hoy he querido cocinar para ti-revela y ahora ella queda como Shakira"ciega,sorda y muda".

— Wao- expresa con la boca en un gran O

— Y le di el di libre- añade el picaron. ¿Debería estar preocupada?. En realidad su única preocupación en estos momentos en terminarse ese suculento desayuno.

— ¿Porque?-pregunta cuando ya se siente satisfecha.  El a su vez la mira complacido como a terminado con todo su plato en un santiamén. 

Al parecer es el tipo de chica que es mejor vestirle que darle de comer o lo llevara a la ruina- piensa el divertido.

— Para que estemos solos-responde con su voz aterciopelada y su mirada profunda.

— ¿Como?- eso salio casi como un grito.

— No te escandalices, ¿quieres ahora postre?-pregunta poniéndose de pie cuando ella a asentido con los ojos emocionados.

— Luego me llevara a casa- le advierte cuando ha puesto la tarta delante de ella y ya no le importa otra cosa que disfrutar de esa ricura.

TRABAJANDO CON MI EXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora