Y Que Hago Si Me Gustas. Libro 2. COMPLETA

61°

Tras unas rápidas y tensas presentaciones entran en el comedor.

— por dios Aller está guapísimo — dice Camila caminando del brazo de su amiga.
— Santos me pareció guapo cuando éramos unas crías, luego pensé que era afortunada por casarme con Andrew pero ahora que veo a ese hombre ya no me parece tan guapo mi marido.

— puedes bajar la voz. Andrew va a escucharte.

Zarek que camina junto a Charissa y a Argos toman asiento.

— no soporto ser el centro de atención — comenta Zarek al notar como tanto hombres como mujeres lo miraban fijamente.

— esto no pinta bien — dice Argos con una sonrisa burlona.
— solo faltaría que estos caballos te juzgarán y condenarán por puros celos.

— eso no lo digas ni en broma — dice Charissa mirandolo.

Poco a poco y sin hacerse esperar cada uno va tomando asiento.

Zarek mira la enorme mesa que tiene ante sus ojos. En los días que había compartido mesa con los Karsten nunca había visto tanta categoría. Intuitivamente mira hacia enfrente y ve como los bellos ojos de Charissa lo observa detenidamente.

— dígame capitán, como es posible que siendo tan joven sea el capitán. Lo normal es nombrar a alguien que lleve más tiempo en el barco — dice el señor Smith.

— el anterior capitán debió de ver algo en mi, y a su muerte yo tomé el relevo.

— no pusieron pegas los demás hombres. Digo como usted es aún joven.

— parece ser que yo era el más capacitado.

— ¿a que se refiere?

— Para ser capitán y mandar sobre un buen número de hombres hay que saber hacerlo. Hacerse respetar ante todo y sobre todo tomar decisiones duras.
Ver lo que yo he visto, hace que uno cambie, vivir lo que hemos vivido hace que seamos hombres de corazones de hierro, incapaces de sentir remordimientos por cualquier cosa que hagamos.

— ¿se considera un hombre peligroso?

— soy como Tizón, si noto algo que no va bien puedo ser muy peligroso.

— Tizón es un animal peligroso, pero su dueña lo controla, ¿pero quien lo controla a usted?

— yo me controlo solo. El tiempo en que Charissa estuvo en el Lucifer aprendí a controlar mi temperamento, al principio me era muy difícil lidiar con una cría.

— una cría con la que se casara en breve — dice Cassandra mirándolo fijamente.

Evan tose ante el comentario y fulmina a Isaura con una mirada al ver que habían hablado más de la cuenta.

— Isaura nos contó que la menor de los Karsten desea contraer matrimonio con usted. ¿eso es cierto?

— son cosas de crías — dice  Zarek evitando el tema.

— pero según la señora Karsten esa boda es inminente.

— eso parece — contesta Zarek con tono neutro.

— ¿Eso es cierto Evan? — pregunta el señor Smith.

— si — responde Evan con tono serio.
— Charissa se sentía agradecida con el capitán por cuidar de ella mientras estuvo en el Lucifer. Así que me propuso un trato, y tras pensarlo mucho su madre y yo aceptemos.