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— Jimin, a la mesa cuatro. — Agarró lo que le había dejado en el mostrador y fue directamente a dejarlo, un café con tostadas.

Nuevamente había tomado los horarios de Jin, ya sé había vuelvo una linda costumbre del menor cubrir a Jin en sus escapadas. Cada semana, al menos tres veces en la misma, él se iba a quien sabe donde dejando su turno libre. Probablemente cualquier persona en su sano juicio no sacrificaria sus días libres para volver a trabajar.

— Eso es todo por hoy. — Sonrió su compañero. Realmente Jimin no recordaba su nombre, quizá era algo así como 'Jiho' pero, no estaba seguro así que simplemente contestó con su sonrisa característica.

A causa de la cantidad excesiva de trabajo, no tuvo ni un segundo para mirar hacía la cocina. Pero, cuando ya llevó su vista a ese lugar, no había nadie. Probablemente estén todos en los vestuarios pero ni se gastó en pensar ir.
Las puertas se volvieron a abrir y rápidamente Jimin miró al frente.

— Ya cerramos. — Terminó de decir mientras giraba a mirar a la puerta. Quien estaba allí era Jin, con alguien más.

— ¿Cerrado hasta para mi? — Sonrió de costado.

— Si, porque ya cerramos. ¿Ocurrió algo para que vinieras? Tomé tus horas ya. — Comenzó a pensar que ahora él solo quería molestarlo un poco y, probablemente es así.

— Digamos que vengo a ver a mi pequeño amigo. — Puso mala cara ante la frase "pequeño".

— No soy pequeño y, ¿qué quieres decir con eso? — En eso, la puerta de la cocina se abrió mostrando a un joven y apuesto muchacho de piel blanca, la vista de Jimin fue directo a él.

Min Yoongi.

— Creí que querías divertirte un poco hoy, por eso vine — Llevó la vista donde miraba Jimin, encontrándose con Yoongi que estaba saliendo. —. ¡Yoongi! — Lo saludo asustando un poco al castaño en el proceso.

— Oh, Jin, eres tú. — Inmediatamente se acercó y le sonrió a los tres con una sonrisa muy cálida.

— ¿Quieres venir con nosotros? Iremos a beber un poco. — Yoongi dudó un poco, no le gustaban esa clase de cosas pero, no tenía problema, además, Jin era un gran amigo que fue de ayuda en momentos difíciles.

— Claro.

— ¿Jimin? — Ya con la afirmación de sus mayores, Jimin sólo lo miró en silencio. Jin sabía que aceptaría rápidamente si sabía que allí estaría Yoongi.

Parecía dudarlo pero asintió con la cabeza repetidas veces.

— Iré a cambiarme. — Jin sonrió con su respuesta.

Jimin entró a la cocina para ir directo al vestuario.

Una sonrisa malvada apareció en el rostro de Jin mientras miraba a Yoongi. — ¿Conoces a Jimin? — El menor negó con la cabeza.

— No, nunca antes lo había visto. — El mayor levantó una ceja.

— Trabaja aquí, él está tomando mis horarios últimamente. Deberías de haberte dado cuenta, comúnmente voy a hablarte en los recesos. — Con un poco de pena Yoongi acarició su cabello castaño.

— Lo siento, no me di cuenta. — Los tres muchachos comenzaron a reír.

— Te diría que no te acerques tanto a él. — La sonrisa de Yoongi se fue al instante.

— ¿Un Alfa? — Dijo sin ganas.

— Si, es uno. — Afirmó el Omega.

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Marca De Alfa ;; Jimsu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora