SAM 'S POV
Viernes, 25 de Enero.
Me sentía diferente, nunca me hubiera imaginado que yo, sería la primera en besarle. Pero tube un impulso y lo hice, del cual no me arrepiento. Entré a casa con una sonrisa de oreja a oreja.
- ¿Dónde estabas? - Upss...
- Estaba... con Will dando una vuelta.
- Que yo sepa Will no tiene moto. - Responde mi hermano seriamente.
- ¿Me estabas espiando?
- ¿Quién era el chico con quién te estabas besando?
- ¡Me estabas espiando! ¡Dylan no tienes nigún derecho a hacer eso! - Grito furiosa.
- Soy tu hermano, y mi deber es cuidarte. ¿Con quien te has besado?
- Con nadie. - Salgo hacía mi habitación corriendo, pero me coge del brazo haciendo que me diese la vuelta.
- ¿Era alguien del equipo? - Pregunta muy cabreado, pero no espero a responderle, subo las escaleras mientras le oigo gritar. - ¡Samantha baja aquí ahora mismo! ¡Samantha!
"¡Será imbécil! ¿Qué derecho tiene?" Mis lágrimas empezaron a salir descontroladamente durante toda la noche.
Sábado, 26 de Enero.
Llevaba más de 10 horas llorando y mis ojos estaban muy hinchados y rojos. Eran las 9 de la mañana cuando tocaron mi puerta y entró Dylan sonriendo.
- Pequeña, levantaya, hoy hay partido. - Hermanos bipolares, tenéis que ser extinguidos del universo, gracias.
- No quiero ir. - Digo aún con mi cara sobre la almohada.
- No tienes otra opción, en 5 minutos te quiero en el coche.
Salió de mi habitación y empecé a patalear. Me levanté de la cama y abrí el armario. Me pongo una camiseta de manga larga y unas mallas junto con mis mustangs. Cojo las gafas negras de encima del escritorio y la chaqueta, que había colgada en la silla y salgo de mi habitación. Corro escaleras abajo y me adentro en el coche. En cuanto cerré la puerta, lo puso en marcha y durante todo el camino no hablamos, y se lo agradecí, sinceramente. Entramos en el recinto cerrado y seguía con mis gafas de sol negras puestas. Me senté en la baqueta y cogí el móvil, necesitaba hablar con Will.
*Conversación de whats app*
S: Will
S: Te necesito...
W: ¿Qué pasa pequeña?
S: Ayer besé a Matt.
W: ¿¡Qué!? ¿Samantha Miller besando a un chico que no sea yo? ES UNA BROMA.
S: Pues no te lo creas, pero hay más.
W: ¿No me dirás que te ha desvirgado?
S: ¡Will! ¡No!
S: Esto es más serio.
W: Cuéntame.
S: Dylan nos espió y me preguntó que quien era.
W: ¿Y qué le dijiste?
S: ¿Qué le iba ha decir? He besado a Matthew Johnson, ya puedes matarlo.
S: ¡Pues no! Le dije que nadie
W: Te grito ¿Verdad?
S: Si.
W: Has llorado toda la noche ¿No?
S: ¿Tu también me espías? :(
W: No hace falta espiarte para saber como eres Sam y por favor sonrie.
S: Lo dudo...
*Fin de la conversación de whats app*
Acabó el partido y se acercó Matt. No quería que me viese Dylan con él, así que intente ser lo más borde que pude aún que me doliese por dentro. Cuando me quité las gafas y me vio como estaba, sus ojos estaban llenos de culpabilidad y en ese momento me sentía la peor persona de este mundo. No podía aguantarlo más, salí corriendo hacia el coche y le grité a Dylan que se diera prisa para poder volver a casa y seguir llorando. Pero no aguanté, empecé a llorar de nuevo y todo por culpa del estupido de Dylan. Este, entró en el coche pero no lo arrancó.
- ¿Por qué no nos vamos? - Digo intentando parecer lo más tranquila posible.
- ¿Me vas a decir ya por qué llevas así todo el día?
- Lo sabes perfectamente. - Respondo mirando por la ventana.
- Oh venga ¿Llevas toda la noche llorando por qué te grité?
- No, lloro porque me gusta.
- Perdóname, no quería hablarte así... pero dime ¿Quién es?
- No quiero que me controles Dylan. Y ahora vayamonos a casa.
Encendió el coche y nos marchamos a casa. En cuanto llegamos, cerré de un portazo y me lancé en mi cama, cerré los ojos durante unos minutos intentando dormir y olvidarme de todo aquello. Pero era imposible ya que sonaba 'Love runs out' desde mi movil. "¿Quién diablos es ahora?" Miré la pantalla del movil y era Matt. "¡Dios! Me estaba llamando ¿Y ahora que le digo? " Opté por colgarle, no estaba preparada para hablar con él. Unos segundos después sonaron dos mensajes también de él.
* Conversación de Whats App*
M: ¿Por qué me cuelgas?
M: ¿Podemos hacer skype? Por favor. - Por una parte no quería hablar con él pero por otra le necesitaba.
S: Esta bien...
S: Espera cinco minutos ¿Vale?
M: Esperaré lo que haga falta.
*Fin de la conversación de Whats App*
Me levanté de la cama y me dirigí a mi armario. Cogí una jersey beige y me até el pelo con un pañuelo. Fui al baño y intenté disimular mis ojeras. Me acerqué a la cama y abrí skype. ¿Estaba preparada?
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Mi Historia: Samantha Miller. | EDITANDO |
Roman d'amourTodo el mundo esta gritando el dia de mi decimoctavo cumpleaños. Me duele la cabeza y estoy mareada. No puedo más, creo que me voy a desmayar. Os preguntareis el por qué de todo esto... Para que me entendais, tengo que contaros mi historia. La histo...