Cap.8 Precaución

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Jimin está sentado en la sala junto a Jungkook y a Hoseok. Desde hace rato trata de convencer a su hermano de que lo acompañe a comprar ropa, pues su contextura y estatura son muy similares a las del dios; sin embargo, Hoseok se opone rotundamente alegando que no tiene por qué prestarse para ello. —Ayúdame y no te quejes, es tu madre después de todo la que viene. Sabes que es demasiado observadora y no se le pasa nada.—Argumenta Jimin con algo de impaciencia.

—¿Por qué tengo yo que probarme ropa para él?

—¿Cuál es tu problema conmigo? —Cuestiona Jungkook.

—Ninguno, pero no soy tan amable como mi hermanito, no suelo hacer cosas si no me benefician y no me beneficia ayudarte, además no quiero.

—Eres muy torpe, hyung—Jimin rueda los ojos—Por supuesto que te beneficia. Madre te culpará por cualquier comportamiento inadecuado mío y podría castigarte cortando tu manutención ¿crees que verá con buenos ojos a Jungkook? mi única esperanza es que lo acepte como mi pareja.

—No había pensado en eso—Hoseok tuerce su cabeza pensativo.

—Lamento informarte que tengo un efecto algo intenso sobre las mujeres—Le dice Jungkook a Jimin con una sonrisa juguetona y el pecho bien enderezado con orgullo—Tu madre caerá en encantada, no te preocupes mucho por ello.

—Solo eres un parlanchín. No veo a Jimin babeando por ti.—Le molesta Hoseok. Aún no, piensa Jungkook. El rubio solo se aclara la garganta con timidez porque eso no es del todo cierto y lo sabe. Ha tenido la suerte de mantener la compostura, pero la batalla consigo mismo es medieval.

—¿Quieres probar de qué estoy hecho? —Ofrece el dios con autosuficiencia.

—No, no quiero—Hoseok lo corta con una mueca de horror y Jimin frunce en el ceño con algo de asco.—No me van los chicos, aunque se trate del mismísimo dios del placer.

—Que bien.—Jungkook sonríe con alivio.

—¿Qué dices?

—Nada ¿Qué tal si lo dejamos en que te quedo debiendo una con lo de la ropa? Piénsalo, un dios en deuda contigo, podría ser muy provechoso.

—Trato.—se estrechan las manos—Comienzas a agradarme un poco — Jimin niega con la cabeza y exhala un suspiro, su hermano es un tonto y Jungkook un manipulador.

—Entonces iré a arreglarme, no tardo.—Avisa antes de que la tregua que acaban de hacer termine. Hoseok aprovecha que está a solas con Jungkook para hacerle un par de preguntas, pues como hermano mayor de Jimin, su deber es conocer a la persona con la que convivirá tres meses—¿Cuáles son tus intenciones con mi hermano?

—Quiero complacerlo.

—O sea, solo quieres llevarlo a la cama.

—Que conozca el placer sexual lo conducirá a donde él desea llegar ¿No lo has comprendido? Encontrar el amor real para un ser humano, implica que esa persona tenga experiencia. El amor a primera vista y esas cosas son solo travesuras de lo que ustedes llaman Cupido. El amor real se obtiene después de conocer a fondo a una persona, aceptarla tal y como es y elegir estar juntos.—Dice recitando las palabras que oyó alguna vez en su pasado. Hoseok siente que fue tomado por sorpresa, pues pensó que Jungkook era mucho más superficial y desinteresado por esas cosas tan sentimentales, pero le agrada ver tras esa capa de fina belleza y lujuria por doquier, una llama de sentimientos muy humanos.

El dios del placerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora