"El jardín"

Parte 9: Si cumples...

9-Si cumples....

**Yylfordt**

Termino de vacunar a un pequeño que no deja de llorar en el regazo de su madre mientras ésta está embobada mirando a Kyoraku sensei. Todas las mujeres babean por él, le ven tan dominante, tan macho, que cualquiera se resiste. Suspiro molesto por los gritos del enano y me retiro para dejar la jeringuilla vacía de la vacuna.

-Vamos pequeño, ya está ^^ ahora mami te comprará algo ¿verdad?-

-S-sí....muchas gracias Kyoraku sensei, es usted un médico maravilloso-

-Ya será menos mujer. Solo cumplo mi labor-

Pongo los ojos en blanco al ver la cara de tonto que se le pone a veces cuando parece interesado en algo pero no tardo en sentir sus manos en mi culo manoseándome con disimulo.

-Ahora no, todavía quedan pacientes...-

-¿Estás celoso, Yyl-chan?-

-En absoluto, solo siento vergüenza ajena-

-Oh! Eso duele. Puedo compensártelo muy bien...-

-¿Yyl??- el doctor y yo nos quedamos petrificados al ver a una figura muy familiar para mí en la puerta observándome con una sonrisa. Su cabello largo blanco, sus ojos marrones idénticos a los míos, rostro perfilado, el hakama rojo con una chaqueta de mangas largas blanca y un gorro negro sobre su cabeza....mi hermano mayor, el pilar de nuestra familia....Ukitake Jushiro.

-Nii-san.... ¿qué ha ocurrido?? ¿¿Estás bien??- me acerco corriendo a posar mis brazos en sus hombros pero él me calma con una sonrisa.

-Estoy bien....quería visitarte antes de que empiecen a hacerme pruebas para ingresarme-

-¿Cómo?? Pero la lista de espera....-

-No lo sé. Aizen Sousuke me llamó al templo y me dijo que podía hacerme las pruebas para ser hospitalizado y empezar mi tratamiento. Es una buena noticia ¿no?-

-Por supuesto....claro que lo es, hermano....- casi se me saltan las lágrimas. Mi hermano lleva enfermo de tuberculosis desde hace años y ningún médico ha sido lo suficientemente competente para atenderle, aparte que su tratamiento es muy caro y se ha mantenido en vida gracias al trabajo de sacerdote en el templo de Karakura donde pagan sus medicinas por caridad. Yo para ayudar empecé a trabajar gratis ayudando en el pequeño servicio de curanderos que había en el pueblo hasta que este hospital se abrió. Ahora soy enfermero fijo, pero antes como prácticos, tuve que pasar por muchas manos. Y comer muchas pollas.

-¿es usted Kyoraku Shunsui, el jefe de Yyl?- presto atención a mi jefe que sigue hipnotizado mirando a mi hermano. Conozco esa mirada, por lo que le doy un codazo haciendo que espabile.

-Eh, sí....soy Kyoraku, aunque puedes llamarme Shunsui ^^ estamos en confianza, Ukitake-san-

-Sensei....mi hermano es sa-cer-do-te en el templo....-

-Ya, ya, no hace falta que me lo recalques, lo veo en sus vestimentas-

-Sí....y recuera que los sacerdotes están abstenidos de todo.....TO-DO-

-Ah! Yylfordt no seas pesadito, solo me estoy presentando ¡no hay nada malo en ello!!- mi jefe da una carcajada y mi hermano sonríe con esa benevolencia que le caracteriza. Pese a que es el hermano mayor, es muy inocente, aparte de virgen, ya que nadie ha querido casi tocarle por su enfermedad, como si fuera un maldito leproso. Me arde la sangre al recordar cómo los que eran nuestros amigos decidieron dejar de serlo al enterarse de que podrían contagiarse con solo estar a su lado. Por eso mi madre tuvo que aislarle en el templo....mi hermano nunca se ha quejado de nada, jamás le he visto enfadarse....siempre con una sonrisa en sus labios...