Sueño de Unión.

8)"Emperador"

Aquella noche los corazones de muchos estuvieron al borde de los sentimientos. Algunos lloraron y otros simplemente se mantuvieron expectantes. Lo que si ocurrió y en lo que muchos estaban juntos y aterrados, fue de estar en la presencia de aquel que debe ser exaltado, lo quieran o no. Los 30 Platonianos fueron llevados por Yesky ante el Emperador. Lo curioso de aquello fue que… Excel no pidió que se les llevase a su sala. El capitán de los Paladines estaba reunido con Card Im Flin, que era el mejor amigo y compañero, y discutían sobre el nuevo plan del Emperador. Algo ambicioso y grande vendría. Los números de muertos serian incontables, pero lo que Quinn realmente le aterraba era el hecho de solo fallar en algo más.

-    Creo que no está de más preguntar… ¿Qué rayos hacen ellos aquí, Yesky? – pregunto Excel, que estaba algo somnoliento.

-    Su absolutes me ordeno traerlos. – respondió, con una voz muy curiosa.

Excel era muy impaciente en cuanto a Yesky, pero sabía en qué momentos debía prestarle atención a aquel hombre. Los 30 estaban un tanto atemorizados, ¿Y cómo no?, así que el Emperador decidió seguir el juego, por así decirlo, de Yesky.

-    ¡Oh! Cierto… – dijo, y Yesky se confundió. – Tengo una pregunta y oferta para cada uno de ustedes.

-    ¿Y para Yesky? – intervino el hombre, con algo de emoción.

-    Sí… también para ti. – palmeo el hombro del loco hombre. – Ve y tráeme un trago de Atlas IV Fergus Vi-Ñá… no le pongas mucho hielo… ¿Desean algo de tomar, señores?

Los 30 solo negaron con la cabeza, pero por dentro querían probar aquel vino. En las afueras de la Utopía, y en las Unidades, siempre se rumoreaba sobre un vino que solo el Emperador tomaba. El majestuoso Atlas IV Fergus Vi-Ñá era la bebida exclusiva para el más poderoso en la majestuosa Utopía. Fergus había sido un hombre conocido por los 2 primeros, quien ayudo a establecer los límites y reglas, y debido a aquello su nombre fue reconocido y el primer mes del año se le otorgo. Además, su esposa, preparaba junto con él un vino celestial y son eso fue aún más de renombre.

-    Saben… Platonis era una gran Unidad. ¡Perdón!... intento de Unidad. – se disculpó con una reverencia, bastante burlona. – ¡Pero sí que resistieron! De no ser por os planes fallidos del joven Troy… aun estarían con vida y de pie.

-    Aún estamos con vida… y de pie. – dijo uno llamado Her.

-    Cierto… me refería a todos. No solo a ustedes. – tomo la copa que Yesky le entregaba. – Troy Kanh Protega les costó todo. No entiendo cómo pudo entrar a las murallas y no lo reconocieron. De hecho… no conozco de cara a casi nadie de renombre… pero si se todo lo que hacen.

-    Quinn siempre informa. – intervino Yesky. – Por eso sabemos todo. Enders vive en Mayus, en la casa grande.

Excel se quedó mudo. Tomó todo el vino de un solo sorbo y arrojo la copa cerca de Yesky, sorprendiendo a los 30. La ira empezaba a incrementar.

-    Ultima vez… Yesky Fermund… que mencionas a mi padre. – dijo Excel mirando con ira, con una mirada diabólica al hombre. – ¡Disculpen! Mi oferta es… les doy 2 días para que me digan… cual es el plan o que es lo que Troy y Robert quieren. Si ya lo saben, pueden hablar ahora.

-    ¿Traicionar a nuestro rey? – pregunto uno.

-    No lo vean como traición… vean mi oferta como… el plan de escape. – decía mientras miraba a todos los presentes. – Soy un hombre de mucha palabra. Y les dije que mientras más se demoren, uno a uno irán siendo colgados.

Los Platonianos se aterraron.

-    ¡Y lo hare! – grito y su rostro cambio bruscamente. – Pero tienen 2 días. ¡Claro! En esos 2 días, 2 de ustedes… serán colgados. – dijo, ahora con una sonrisa. – Así que, pues, si ya lo saben, díganlo.