Vete a la Mierda (#malec)

Flojera

Magnus

Me encargo de tallar con delicadeza su espalda, sus piernas, sus brazos, su abdomen, nos lavamos mutuamente el cabello, limpio con suavidad aquello que lastimé, no hace falta hablar, es un silencio muy cómodo, me seco y pongo una toalla en la cintura, lo envuelvo a él con una más grande y lo llevo a la cama quitando antes todas las mantas sucias, voy al botiquín por una pomada, se la pongo y lo dejo recostado boca abajo, le seco el cabello y me acuesto a su lado, tiene los brazos bajo su mejilla, comienzo a acariciar sus mechones negros, su rostro.

- Eres precioso.

No necesito hablar fuerte, está a centímetros de mi, dejo un beso dulce que apenas es un roce en sus labios.

- Te quiero.

Me responde igual de bajito, me quiere, me quiere.!!, me quiere.!!!, una sonrisa boba se extiende por mi cara, mis cachetes duelen de tanto estirarse.

- Yo también te quiero bebé.

Vuelvo a besarlo pero no lo llevo más lejos porque está lastimado. Me distraigo al escuchar afuera ruidos, voy a la ventana.

- Llegaron

- Mm. - hace un puchero adorable que borro con un beso, es tan hermoso, es oficial, estoy perdidamente enamorado de este chico. Me rescuesto de nuevo, momentos después tocan la puerta.

- Adelante.

- Hola, sólo venía a avisar que todo está en orden...- Ragnor recorre la habitación con la mirada.- o tal vez no.

- Envía al servicio quieres.

- Claro.

Se retira dejándonos otra vez en silencio, Alexander está dormitando y me pega la flojera, nos dormimos otro ratito.