Vete a la Mierda (#malec)

Decidido

6/8

Magnus

- Garbancito

- M?

- Estas bien?

- Ajam.

- Algo tienes.

- Sólo es... que me preocupa la actitud de mis padres cuando les diga.

- Tranquilo, verás que todo sale bien,

- Puedes no matarlos?

- Me crees capaz?

- Prometelo.

- Lo prometo.

- De acuerdo.

Vamos en las camionetas rumbo a la casa blanca, Alec citó a sus hermanos y padres para presentarnos formalmente como pareja y darles la noticia de que serán abuelos, espero que todo salga bien. Estamos por llegar, de lejos es linda la estructura, pero de cerca te roba el aliento, es bellísima, blanca y enorme, bajamos todos, incluidos nuestros guardias, entramos, nunca había estado por aquí, las estancias son gigantes con techos altos.
Noto que las personas que están de visita le toman fotos a Alexander, sujeto su mano entrelazando nuestros dedos, más gente se les une tomando evidencia, pasamos el área en que puede estar el público y vamos por pasillos hasta una puerta de caoba muy elegante.

- Listo?- le pregunto.

- Listo.

No suena listo pero estoy para apoyarlo. Entramos, es una estancia algo postiza, todo se ve como si no pudieras tocar nada sin ensuciarlo o romperlo, me alegro de que mi hijo no crezca por aquí.
En el escritorio se encuentra el presidente, junto a la ventana la primera dama y en los sillones están sus hermanos, el pequeño lee un comic, la chica una revista y el teñido está ojeando un libro sin leerlo, todos voltean a vernos, examinan a su hijo y luego a mi, no les gusta lo que ven y a mi tampoco, tienen el odio y la repulsión pintada en la cara, ahora entiendo lo que me hizo prometer Alexander, no llevamos 5 minutos y ya quiero borrarles esa expresión del rostro.

- Gideon.- me sorprende el tono de su padre, es frío, como un témpano de hielo, nada de cariño y ni siquiera lo llamó hijo- No recuerdo que en tu carta mencionases traer contigo a este...- me barre con la mirada.- criminal.

- No empieces padre, venimos en paz.

- Por qué no está tras las rejas ?- su madre es peor aún, su tono rebosa desprecio.

- Magnus es mi pareja.

Sus cejas se juntan en un gesto de enfado que no se molestan en ocultar.

- No hablas enserio.

- Lo hago.

- No, no lo haces.- las cosas empiezan a subir de tono, su madre a dejado su puesto junto a la ventana y se acerca al escritorio.- Lo prohíbo.

- No te estaba pidiendo permiso, madre.

- Cómo te atreves a hablarle así a tu madre?.- el presidente se levanta enfadado como si fuera la peor ofensa del mundo. - Debes obedecer a lo que dice, no permitiré que mi hijo y sucesor se junte con escoria como esa.

Dice señalandome, no puedo intervenir y sus insultos me importan una mierda, no es el primer imbécil con aires de pureza que me topo que se cree superior a todos a su alrededor.

- No te permito que insultes a mi pareja.

- Yo te crié para ser mejor que esto Gideon.

- Tú apenas parabas por la casa siempre metido en viajes de política, nosotros nos criamos sólos.