4. Visita al Pasado.

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Allison

Erick y Jeison van a llegar a Riverstong en la noche, tenía muchas horas de descanso pero no podía aprovecharlas para ello. Me dirigí a la oficina de mi compañero, como siempre estaba con la cabeza metida en él computador, di suaves toques en la puerta para anunciar mi llegada.

—Pienso ir a mi antigua casa. —Mi compañero dejo de mirar él computador para verme. —¿Quieres acompañarme?, claro si no estas muy ocupado.

—Claro All. —Dice levantándose del asiento.

Caminamos a la salida de la Estación, sin decir palabras, mi compañero y yo nos hemos unido un poco pero siempre cuando Caminábamos un silencio se adueñaba de nosotros. Llegamos a su auto, mi compañero se había comprado un Audi negro hace unos días, no m había subido en este pero sentir la comodidad del asiento me relajo.

—No estoy prepara aún para pasar por esa calle, pero es él único camino. —solte un largo suspiro.—pero debo de hacerlo.

—Tranquila, yo estoy contigo para darte apoyo.

Él resto del viaje nos mantuvimos en silencio, cerré los ojos para evitar ver aquella simple calle, le di la dirección a Andew para que llegue fácilmente.

La casa lucia peor que antes, la conocían como la Casa maldita, usaban mi casa para darles miedo a los niños hace años, mi padre llegó a contarme sobre esta historia que habían inventado de mi hogar. Hace años lucía en muy mal estado, totalmente con aire fantasmagórico, pero al entrar allí te invadía él olor a rosas, una casa totalmente decorada y limpia.

—La casa maldita. —Escuche decir a mi compañero. —¿Enserio vivías aquí? —Asentí mientras Caminábamos hacía la entrada.

—En realidad venimos aquí a buscar mi diario.

Entramos a la casa, definitivamente parecía una casa de terror, él interior estaba lleno de tela de arañas, mucho polvo, los muebles costosos que pertenecían a mi madre estaban deteriorados, la madera crujía con cada paso que dábamos.

—Subamos a mi habitación.

Mi compañero asintió siguiendo me él paso escaleras arriba, En aquel pasillo se podía observar solos dos puertas, una estaba a medio tirar, esa pertenecía a la habitación de mi padre, mientras que la otra seguía intacta, seguía allí, llena de polvo y tela de arañas.

—¿Porque quieres tu diario?

—Es una larga historia. Sobre un chico misterioso, no se porque pero soñé con él anoche, lo familiarizaba con AZT.

—Cuéntamelo, una historia de amor en un edificio de terror, calmaría él ambiente.

—Esta bien.

<Antes era él blanco de Bullying en mi escuela, al ser tremendamente pálida con él cabello como fuego, al ser pobre para muchos vivía en la calle, por usar solo dos ropas en una semana, no tenía amigos. Pero era una simple adolescente, un chico comenzó a llamar mi atención, un chico de las bandas escolares, era misteriosos, siempre llevaba una capucha,se tapaba parte del cabello con un pañuelo y utilizaba lentes oscuros que impedía ver sus ojos. No se ¿como alguien pudo enamorarse de una persona la cual no conocía sus rasgos?. Este chico comenzó a adueñarse de mis sueños siempre, pero nunca revelaba algún rostro obsoleto...

Algo extraño comenzó a suceder, las chicas que me molestaban empezaron a ser humilladas de forma anónima, perdían su popularidad poco a poco, los chicos que molestaban empezaron a ir con moretones, brazos o piernas rotas. Alguien me estaba defendiendo anónimamente y eso llamo mi atención, comencé a buscar a aquella persona, mis sueños dejaron de ser de mi chico misterioso a ser de quien me defendía. Intentan acercarme a alguno pero salían corriendo con mi presencia, eso me asusto un poco. Hasta que un día alguien se me acerco.

—¡Hey, hola!—lo mire extrañada. —¿puedes ayudarme a buscar la dirección?, soy nuevo y ando algo perdido.

—Si, solo dame un momento.

Entré al baño de chicas que estaba justo a mi lado, pues ese era mi destino antes de que aquel chico se me acercara, cuando iba a salir pude escuchar varios gritos fuera del baño, así que asome mi cabeza para ver que pasaba. Me lleve una gran sorpresa cuando vi a mi chico misterioso con él chico nuevo elevado por él cuello.

—¿Que quieres de ella? —Gritaba furioso.

—¡soy nuevo!, Solo quería que me mostrara la dirección. —Este chico tenia mucho miedo.

—¡Alejarte de ella!. —Soltó al chico él cual empezó a correr.

El chico observo como la sombra del otro desaparecía  pero de un momento a otro se gira hacía mi, me alteré entrando completamente al baño, pasando él seguro mientras me apoyaba de este. Varios pasos se escucharon hasta detenerse frente a la puerta del baño, la perilla intentó girar pero al percatarse de que esta no abría se rindió yéndose de allí.

Tuve miedo durante todo el día, hasta que llegó la hora del almuerzo, me debatía entre ir o no a la cafetería pero antes de entrar un grupo de chicos me rodearon, supe inmediatamente que se tratan de la banda del chico misterioso cuando este apareció. No pude evitar temblar, tenía mucho miedo, pero mi tono cambio lo completo cuando este sacó una rosa y me la entregó. La agarre confundida pero aún con los pelos de punta, salí corriendo de allí con loca, jamas pensé que ese seria la última vez que lo vería.>

—Waoo, me hiciste llorar. —mi compañero fingió secarse una lágrima a lo que yo le respondí con un golpe en su hombro. —¡Auch eso dolió!

No le preste atención a mi compañero, ya que un cuaderno rosa se dejan ver debajo del colchón de una cama desgastada. Lo tomé en mis manos suavemente, no tenía ningún polvo, seguía como hacia años, seguía igual. Un sonido estruendoso se escuchó en la planta bajo. Andew y yo cogimos nuestras armas dispuestos a enfrentar a quien allá entrado a él lugar.

Seguíamos allí apuntando hacía la puerta, pasos se escuchaban acercarse a paso lento y seguro, pude observar como una silueta se movía, un hombre definitivamente. Cuando éste se poso en la puerta un brinco dimos los tres del susto, Era Christian.

—¿Que haces tu aquí? —Pude notar como tragaba en seco y miraba como siempre a Andew.  —¿Christian?

—Vengo aquí desde hace unos años, es mi refugio de él mundo real. —Miro él cuaderno que estaba en mis manos. —Perdón.

No sabía porque se disculpaba, su mirada no se apartaba del cuaderno.

—Perdón por haber leído tu diario, no sabía que te pertenecía, Allison lo siento.

Abrí él diario yendo a la última página que recuerdo haber escrito en él, al final habían letras diferentes.

"¿Quien es tu chico misterioso?, Soy yo Allison, lo siento mucho pero no me podía mostrar."

—¿Acaso... Tu? —mi cuerpo se tensó mucho. — ¿tu eres?

Pero antes de que el pueda responder, sentí con mi cuero perdía fuerza, sentí con caí a bruscas contra el suelo y todo se volvió negro.

"Ciertas veces recordar el pasado dolía, pero conocer por fin a alguien que formo parte de tu vida en él anonimatun dolía aún más."

Este capítulo se lo dedicó a ustedes, Las amo :3

Ana_Tabares12
BereniceCapi
letrasemi20042000

Justicia en mis manosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora