Hasta el último latido.

Prólogo:

Neus es todo lo que nadie quiere. Se la pasa de fiesta en fiesta. Se mete en demasiados líos y casi nunca suele responsabilizarse de sus actos. Su madre la abandonó en un orfanato cuando tenía 4 años, paso de ser una niña dulce, carismática y alegre a una fría, calculadora y a la que solo le importaba ella misma. Nunca ha conocido lo que es el cariño de verdad, ni siquiera el de sus padres adoptivos que se la pasan trabajando para que ella pueda vivir bien. Su nombre se lo puso su padre, cuando volvieron del orfanato la niña se empeñó en cambiarse el nombre, decía que no quería recordar nada de su vida pasada.

Cómo ya sabréis mi nombre es Neus, tengo 22 años. No me gusta que controlen mi vida pero a mí me gusta tenerlo todo bajo control. Trabajo en una cafetería del centro de Madrid, suele venir muchísima gente pero hay uno que le tengo entre ceja y ceja, el, el único capaz de hacerme sacar de quicio con unas pocas palabras. Soy alta, mi pelo es castaño y mis ojos marrones. Muy común, lo sé. Mi carácter es bastante fuerte. No me gusta que manden sobre mi ni que me den órdenes. Solo tengo a mi grupo de amigos, mis padres adoptivos los consideran malas influencias pero es lo mejor que pude conocer en un mundo donde te juzgan por como eres. Nunca me he enamorado, soy más de hechar un polvo. Viví la violencia de género en mis propias carnes. Vi con la corta edad de 4 años como un imbécil asesinaba a mi madre a base de golpes y como poco después me llevaba a ese orfanato. Desde entonces no descanso, trabajo día y noche para meter a ese imbécil entre rejas de dónde nunca debió salir.

Toda la vida condicionada por un maldito problema en el corazón. No hagas esto, no hagas eso, no bebas eso, deberías hacer más ejercicio, ¿Dónde vas? Recuerda no hacer muchos esfuerzos. Todo porque acabe teniendo unos kilitos de más. No es fácil ser un chico como yo. Siempre he sido bastante tímido y a veces frío. Casi siempre se burlaban de mí y por eso decidí alejarme de la gente.

Mi nombre es Nau, Nauzet Gutiérrez para ser exactos. Tengo 20 años y aún siguen controlando mi vida como si no supiera cuidarme yo solo. Tengo mi grupo de amigos a los que mis padres llaman malas influencias, vale, puede que lo sean pero es lo único real que he conocido, nadie ha querido conocerme bien y ellos lo han hecho, aunque no les cuento todo, siempre suelo guardarme mis problemas para mí. Tengo un hermano, se llama Adexe. El es todo lo contrario a mi, el siempre ha sido el que más amigos hacia, el mejor de la clase y el más educado mientras yo me hundía cada vez más y más. Nunca he conocido lo que es querer tanto a alguien que hasta llega a doler, no he conocido aún a esa chica que pondrá mi vida patas arriba con tan solo sonreírme pero espero algún día conocerla. Mi carácter la verdad es que es bastante fuerte y a mí me gusta que sea así pero a mí familia no, dicen que tengo que ser más amable con la gente y bla, bla, bla... Si ellos supieran... Lo que desconocen de mí es que tuve depresión, me cure yo solo y por eso estoy orgulloso de mí, no necesite a nadie al que no le importará si estaba bien o no porque era su trabajo ayudarme.

Dos mundos completamente diferentes, dos vidas marcadas por dolorosos pasados, los dos pasaron casi por el mismo infierno ¿Que pasara cuando se encuentre? ¿Será verdad que los polos iguales se repelen o surgirá el amor?