Hasta el último latido.

29:

Narra Adexe:

Vuelvo a caminar por los pasillos del hospital, no sé cuántas veces lo he hecho ya en los últimos días. Mi desesperación crece y crece a medida que pasan los minutos. Miro al doctor que sale de la habitación y me acerco rápidamente a el.

-¡Dígame que la ha salvado!

-Lo siento, hemos hecho todo lo posible por salvarla pero estaba muy débil y la noticia tan fuerte que le dio hizo que su corazón no pudiera más.

Colapso, grito y rompo todo lo que hay a mi paso, no puede ser, no, no y no me niego. Siento que alguien pone su mano en mi hombro y me giro rápidamente para ver quién es.

-¡Lárgate Alicia, necesito estar solo!

-Necesitas a alguien y no voy a dejarte solo.

-¿Ahora te haces la buena?

-He cambiado.

-Yo no creo en ese cambio así que vete.

Me mira por unos segundos, yo la miro con los inyectados en furia, los mismos ojos que alguna vez la miraron con amor.

-Está bien.

Se marcha, subo a la azotea del hospital y me siento allí. Hoy hay una estrella que brilla más que las otras. Recuerdo todo lo que hemos vivido juntos, desde que nos conocimos hasta ahora y doy un fuerte puñetazo a una pared que hay enfrente de mi. No me importa que mis nudillos sangre, solo necesito desprenderme de la rabia que siento al saber que ella no está.