Narra Neus:
Bajo a desayunar, mis ojos se encuentran con los de mi madre adoptiva y suspiró.
-¿Que pasa hermanita?-me revuelve el pelo.
-Nada, ¿Por?
-Últimamente te veo más feliz y menos... Irritante-rie.
-Pero serás-rio.
Me subo a su espalda, comienzo a pelear con el. Acabamos en el suelo, despeinados, con la respiración agitada y riéndonos como un par de locos.
-¿Sabes que?
-¿Que?-le miro.
Se pone encima sin dejar su peso.
-Me gusta que estés así de feliz-sonrie.
No sé qué decir, jamás ha hecho algo como lo que acaba de hacer ahora mismo. Sus ojos se encuentran con los míos y sube su mano hasta acariciar mis mejillas.
-Estás más guapa sonriendo-murmura en mi oído para después levantarse.
Me quedo en el suelo parada, sin saber que hacer, ¿Porque se ha comportado de esa manera?
-Hija, ¿Que haces ahí parada? Vamos, desayuna.
-Si-suspiro.
Me siento a desayunar, no sé si contarle esto a Carmen, quizás solo sean imaginaciones mías.
-¿Estas bien?
-Si-sonrio.
-Te he guardado tu chocolate favorito, los glotones de mis amigos casi se lo comen-rie.
-Gracias.
De nada-sonrie.
Pone su mano encima de la mía, la acaricia con suavidad a lo que yo la apartó incómoda.
-Lo siento.
-No...no pasa nada.
Dejo los platos en el fregadero, subo arriba y me doy una ducha, una sonrisa aparece en mi rostro al recordar cómo me salvó.
-¿Porque viene ese recuerdo a mi cabeza?¿Y porque Pablo se comporta así?-murmuro.
Rodeó mi cuerpo con la toalla y salgo. Cojo mi móvil y llamo a Nau por si quiere salir, necesito salir de aquí. Pero es extraño, no me lo coge.
NARRA NAU:
No dejo de mirar la pulsera de recién nacido, es increíble como ese hombre nos ha estado viendo la cara todo este tiempo.
-¿Que haremos?
-Quiero saber porque cojones no ha dicho nada.
-¿Le preguntamos?
-Espera.
Hago una fotocopia de la pulsera.
-¿Y eso?
-Esto nos vendrá bien.
-¿Para que?
-Ya lo sabrás.
Guardo la fotocopia en la caja fuerte, bajamos y entramos en el despacho, el está allí, tecleando cosas en el ordenador.
-¿Que pasa chicos?
-Venimos ha hablar contigo.
-Sentaros-sonrie-¿de que queréis hablar?
Dejo la pulsera encima de la mesa, el se pone blanco, muy blanco.
-¿De dónde habéis sacado esto?
-Eso no importa.
Se levanta y busca la caja en el armario, una vez que ve que la pulsera no está nos mira muy serio.
-¿Habéis estado registrando mis cosas?
-Eso no importa.
-Queremos saber porque ocultaste esto.
-Y sobre todo porque el nombre está tachado.
Suspira y se vuelve a sentar en la silla poniendo sus manos en la cabeza.
-Habla.
-Si, tuve una hija...
-¿Porque no dijiste nada?
-Porque mi hija murió en el parto.
-¿Y su madre?
-También...
No me da buena espina, a decir verdad no me la dio desde que entró aquí.
-Ya lo sabéis, ahora marcharos.
-¿Hay algo más que no nos cuentas?
-¡No!¡Largo!
-Descubriré toda la verdad.
-¡Ya lo sabes todo ahora largo!
Nos marchamos, me parece muy fuerte que le oculte esto a mi madre.
-Tienes una llamada perdida.
-¿De quién?
-Neus.
Le quitó el móvil rápidamente, miro su llamada perdida.
-Después dices que no te gusta-rie.
-Solo la quiero como amiga.
La devuelvo la llamada, pero esta vez es ella quien no coge, ¿Que pasara?
-No lo coge.
-Igual está ocupada.
-Me preocupa, el otro día intentaron violarla.
-¡¿Que?!
Me importa si y creo que más de lo que yo quiero aceptar.
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Hasta el último latido.
FanfictionCuéntales que fui el lugar más cálido que conociste y que me dejaste helado.