Hasta el último latido.

5:

Narra Neus:

Algo se me encoge dentro, la rabia y la furia salen a flote. Mi corazón late tan deprisa que dudo que sea bueno.

-¿Que pasa?-me mira.

-¿E...es...al...algo...tuyo?-logro decir.

-Es el novio de mi madre, ¿porque?

-No, por nada-suspiro.

Me ayuda a sentarme en la cama, me trae un vaso de agua y mientras me lo bebo el me cura los arañazos.

-¿Le conocías?

-¿Que?-murmuro.

¿Que si conocías a ese imbécil?-me mira.

No-murmuro mirando al suelo.

Levanta mi cabeza agarrando mi barbilla con el pulgar, le miro a los ojos. Se acerca, besa mi frente y me abraza.

-Tranquila, todo va a estar bien-murmura.

Asiento. Por insistencia de el acabo quedándome a dormir. Me presta una camiseta suya como pijama que me queda bastante grande.

-¿Donde dormiré?-le miro.

-Pues...-murmura tocando su nuca nervioso-no hay más habitaciones así que quédate aquí, yo iré a dormir al sofá.

Sonríe dulce, vuelve a besar mi frente. Cuando va a salir de la habitación le agarro del brazo obligándole a que se gire.

-¿Pasa algo?-me mira.

-¿Puedes dormir conmigo?-murmuro nerviosa-me siento segura si estás a mi lado.

Ay Neus, que te está pasando... Me mira algo nervioso, creo que va ha decir que no.

-Está bien-sonrie.

Sonrió, me tumbo en la cama tapándome hasta arriba y cierro los ojos.

-Buenas noches-murmuro.

-Buenas noches-se gira.

Acabamos los dos completamente dormidos, de un tirón. Hace muchísimo tiempo que no dormía así y creo que es porque él está a mi lado...A mitad de la noche me despierto por una horrible pesadilla, me siento en la cama y suspiró tratando de relajarme.

-Todo va a estar bien-murmura abrazandome por la espalda.

¿Te he despertado?-murmuro acariciando sus brazos.

-Tranquila.

Sonríe, se vuelve a tumbar y yo me abrazo a él. Al principio me da un poco de vergüenza pero se esfuma cuando el me abraza más fuerte.

Narra Adexe:

Voy con mis amigos de fiesta. Cuando entró el aroma a alcohol invade mis fosas nasales. Observó a la gente, unos bailan, otros beben y otros simplemente charlan a voces por la música en la barra.

-Tío, nos lo vamos a pasar muy bien-rie.

-Si.

Nunca me ha gustado beber alcohol, pero si el ambiente que hay en las discotecas.

-Vamos.

Vamos a la barra y pido algo sin alcohol.

-Vamos tío, no seas aburrido.

Me pide el típico ron con cola. Suspiró y doy un sorbo sintiendo el sabor amargo.

-Está bueno eh-rie.

-No sé cómo os podéis beber esto-suspiro.

Salgo fuera agobiado. Alguien choca contra mi. Me giro para encarar le.

-Tío, ¿Quieres?

-¿Que es?

-Pastillas-rie.

-¿Que clase de pastillas?-digo confuso.

-Pruebalas-rie y me las da.

Las miro, no se si hacerlo. Al último momento las tiro al suelo.

-¡¿Pero que haces imbécil?!-dice furioso.

-No voy a probar esa mierda.

-Ahora me debes dinero-me agarra de la camiseta.

-Las tienes en el suelo, cogelas y marchate.

Va a darme un puñetazo pero alguien le agarra. La miro, es una chica bastante hermosa.

-Déjale cariño.

-No.

-Cariño, da igual-coge la droga y se la da-vámonos.

-¡He dicho que no!

La empuja. Pongo a la chica detrás de mí y le doy un puñetazo.

-Ni se te ocurra volver a tratarla así.

-Es mi novia.

-Ya no.

Se enfurece aún más. La chica se abraza a mí por detrás en busca de protección. Le doy otro puñetazo consiguiendo que se marche, es un imbécil.