Dos días habían pasado. Sasuke no la habia dejado en ningun momento. Cuando ella le preguntó porque no lo hechaban, él le dii que había comprado esa habitación para uso exclusivo de ellos o de quien ellos mandasen. Eso supuso mas preguntas para ella, de donde sacaba todo ese dinero.
Sasuke las veía dormir a las dos, aunque Hinata no recordaba a su hija, la trataba de manera muy maternal. Se asusto al ver a Hinata sentarse y respirar de manera agitada. Se acerco a ella y le puso las manos en los brazos para que lo mirase.
-Hinata, ¿qué te pasa? - Preguntó asustada.
Ella simplemente se abrazó a él y comenzo a llorar, él la abrazó y la acarició esperando a que se calmase y quisiese hablar. No le decía nada, pero aun así Hinata se sentía reconfortada.
-He tenido una pesadilla. Le imploraba a mi padre que no me pegase. Vi a un hombre castaño, de pelo largo y mirada dura - dijo ella aun visiblemente asustada-.
-Eso es un recuerdo. Despues de eso se acercó a ti y antes de que te hiciese daño lo paré y te llevé con mi familia - dijó mientras la miraba-.
-Tenia 16 años - pronuncio mientras él limpiaba sus lágrimas y asentía-.
-Estabas avergonzada porque decias que apenas te conocía, que solo eramos compañeros de clase. Tu padre hizo que nuestras madres dejasen de ser amigas- ella lo miró atentamente a sus ojos negros-.
-Recuerdo que tus padres me acogieron y me trataron como a una mas, pero ya no recuerdo mas - dijo sosteniendose la cabeza y poniendo una mueca de dolor-.
-No pasa nada, habiendo recordado algo, aunque fuese algo malo, pronto recordaras todo - dio un beso en su frente -. Descansa, mañana podremos irnos.
-No quiero descansar ahora mismo. ¿Podemos hablar de algunas cosas? - Ella pudo ver que él asintió mientras que se sentaba y ella se acostaba mirandolo y abrazando a la niña que aún dormía placidamente-. ¿Cómo puedes tener esta habitación en exclusividad?
-Mi padre me dio el mando de la empresa y, aparte de otros negocios, este hospital es mio al 50%. Nuestro amigo Naruto tiene la otra mitad - dijo ella mirandola a los ojos-.
-¿Por qué cuidaste de mi? - Preguntó mirandola a los ojos.
-Sabes por qué, pero te lo diré. El mismo día que sucedio el accidente pensaba pedirte que te casases conmigo.
-Pero, ¿por qué? Me he podido ver y no soy el tipo de mujer con el que tu estarías.
-Es precisamente por eso. Tu nunca estuviste interesada en el dinero de mi familia o en seducirme. Simplemente fuiste tu - contestó él mirandolo a los ojos -. Eras tu, tan natural y sencilla. No te interesabas por mi y no por otras cosas. No me mal interpretes eres preciosa, pero no fue eso lo que me enamoró de ti. Tu no necesitabas reafirmaciones de mi amor a cada rato,me decias que con mis acciones ya te sentias amada.
-Cuentame que relación tenía con mi padre - en ese momento sentía curiosidad por todo-.
-Tu padre te pegaba cuando no hacias lo que el creía como algo correcto. Aquel día, el que has recordado, habias tenido lo que él llama una mala nota, cosa que no era cierta. Tenia un 9, pero el siempre quiso que fueses perfecta en todo - Sasuke podía leer la pregunta en los ojos de Hinata-. Aquel día estaba allí porque estabamos haciendo un trabajo de clase y cuando eso pasó yo estaba en el baño, él no sabia que yo estaba allí. Le di a tu padre un puñetado y le dije que no volviese a tocarte nunca mas. Recogimos tus cosas y nos fuimos a mi casa. Tu padre siempre te trató mal.
-¿Ha venido a verme? - Preguntó curiosa.
-No y si hubiese venido no le hubiese dejado verte. No permitiré que te haga mas daño - dijo mirandola con ternura, pero con voz dura y decidida-.
-Gracias.
Hinata cerró los ojos y antes de que él se diese cuenta ya estaba dormida. Se levantó, para arroparla y sonrió dulcemente.
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Cartas a Hinata: Lo que no me dio tiempo a decirte
Fiksi PenggemarTodos los días Sasuke escribe a Hinata una carta Los personajes no son mios son del gran masashi kishimoto