Quiero darte un beso

No me conoces, no me juzgues

POV; Arianne

Después de que manipulase a Eric un poquito para que se distrajese unos segundos,HABÍA GANADO A LOS DEMÁS, yo Arianna Lowell había conseguido no desmayarme en los primeros diez segundos de carrera.

Que orgullosa estaba de mí misma.

Me sentía un poco mal por Eric, pero se lo tenía merecido por ser un cerdo, no, para ser exactos, un cerdo mirador de piernas.

Creo que hoy era la primera vez en toda mi vida que llevaba pantalones cortos fuera de mi casa.

¡Y ayer me puse falda! Yeah,esa Arianne. Fuera complejos.

A quién voy a engañar, no estoy cómoda para nada, al parecer resultan atractivas,aunque yo no lo entiendo.

No me gusta que me miren,nada, pero NADA y que el centro de atención sean mis piernas no ayuda, porque al final encontraran algún defecto para criticar, puede que una mancha o un lunar,que camino como un pato...algo encontrarán para hundirme.

Eric me había felicitado. Este chico es bastante raro, es decir, todo el rato soy cortante y seca con él, pero se empeña en hablarme y en interesarse en mí.

Vete tú a saber, quizás es algo de Francia,no conozco tanto sus costumbres.

Ya se aburrirá y me dejará en paz, para buscarse alguna prostituta a la que tirarse.

Había conseguido que lo besara, dos veces.

Para ser sincera, no me quejaba, fue un primer y segundo beso de lo más....genial digamos.

Podría haber sido más romántico...puede ser, pero tampoco estuvo tan mal.

Era muy gratificante besar a alguien, además se instalaba un hormigueo en el vientre, irritante pero agradable.

Sentir su cuerpo completamente pegado al mío, por un par de segundos no fue tan malo, luego me incomodó un poco.

Sí, nada predecible, sarcasmo en el ambiente,Eric Peterson besa genial.

Un cliché más para la lista.

Lo que me confundió fue eso que me dijo de la lengua, yo no sabía que hacía mientras besaba, desconectaba mi mente, besaba como creo que sería lo más lógico.

Nah, tonterías de Eric para que me acostase con él.

Después de salir de los vestuarios, cambiada,bañada, peinada y menos sudorosa, y muy importante,con mis piernas tapadas (por unos vaqueros azules celeste) y llevando una camisa blanca de esas que se llevan ahora, corta, de volantes y de una tela bastante fresca para mi alivio, porque en septiembre todavía se notaba el calor del verano.

En mis pies llevaba unas sandalias.

Mis amigas no habían elegido la opción de Gimnasia, y para mi desgracia Lydia tampoco, por lo que estaba sola.

Siguiente clase, Literatura allá vamos.

Si tenía un poco de suerte,quizás me libraba de ver a Peterson hasta la clase...

Soy una chica sin suerte.

Peterson estaba apoyado en la pared de enfrente de los vestuarios, hablando con una rubia de mi clase, no sé como se llamaba... ¿Mindy?¿Mónica?¿Marisa?

La verdad y para ser sincera no solía aprenderme los nombres de la gente porque me daban total y completamente igual.

-Luego hablamos Zoe-se despidió Peterson de la chica.

Uy, casi acierto.

-Ma belle-dijo Peterson,corriendo detrás mío.

Yo no soy "ma belle" así que no respondí, ni me giré. Además no tenía ganas de hablar con él: