[Querido diario...] *. YoonMin .*

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NOTA:

Este capítulo contiene escenas obscenas. Leed bajo responsabilidad.

PD: Gracias a mis friends por brindarme las magníficas ideas para el lemon, ya que escaseo de conocimientos para redactarlo lol. Ahora sí, empieza el capítulo.

Fue una mañana, y parte de la tarde, demasiado deprimente para Jimin. Según él, ninguno de sus amigos se acordó de su cumpleaños. Y hasta tuvo que volver solo a casa de Hoseok, porque éste supuestamente tenía mucha prisa.

Dio una patada a una pequeña piedra que se encontraba en el camino, justo cuando rompió en llanto.

— ¿No decían que se preocupaban por mí? Entonces, ¿¡Por qué demonios se olvidaron de mi cumpleaños!?—Se limpió bruscamente las lágrimas con una mano, y con la otra agarró con fuerza y firmeza el asa de su mochila.—¡Aish! ¿Tan difícil es decir un "¡Felices diecinueve, Jimin!"? ¿Y por qué todos se pusieron de acuerdo en ignorarme? ¡Parece que hoy no existo para ellos! ¡Sois todos unos idiotas!

Quiso seguir haciendo su furioso berrinche, pero sus palabras dejaron de salir cuando abrió la puerta de la casa de Jung.

— Pe-pero... ¿Qué...?—Su mochila calló al suelo, al ver a sus amigos.

— ¡Feliz cumpleaños, Jimin!—Decían todos al unísono. Por fin, su fiesta de cumpleaños sorpresa se llevó acabo. Cuando Jimin los vio salir de detrás del sofá, con incontables globos, las lágrimas que derramó esta vez fueron de felicidad.

— Todo... ¿Todo esto estaba planeado?—Decía medio sollozando, limpiando sus mejillas. Los chicos se acercaron al pelinaranja, y Hoseok rodeó los hombros de Jimin con su brazo.

— Claro que sí, tontito. ¿Cómo podríamos olvidarnos de tu cumpleaños?—Hoseok depositó un suave beso en la cabellera naranja del bajito, haciendo que éste sonriera como un niño pequeño. Yoongi ignoró aquel gesto, para no empezar a actuar de manera celosa como siempre hacía.

— No te habrás enfadado, ¿Verdad?—Curioseó Taehyung. Él fue el que dio la idea, y no quería sentirse más culpable de lo que estaba.

— Al principio os quería mandar a la mierda, a todos.—Rió levemente, y su vista se posó sobre el más mayor.—SeokJin hyung, ¿Tú también sabías todo esto?

— ¡Por supuesto! Además, ¿Cómo iba a perderme tu cumpleaños?

— Por cierto, hyung.—Decía Jungkook, acercándose a su hermanastro.—Yoongi, SeokJin y yo te hemos preparado otra sorpresa más, aparte de los regalos que te vamos a dar.

— ¿También habéis comprado cosas? ¡No hacía falta!—Se quejaba Jimin. No le gustaba que los demás se gastasen el dinero en alguien como él. Sí, se infravaloraba demasiado.

Todos se reunieron al rededor de la mesa, Jimin en el centro. Cantaron la canción de cumpleaños, y Jimin sopló las velas de la pequeña tarta que preparó a escondidas la madre de Hoseok el día anterior. La escena parecía el cumpleaños de un niño, quién disfrutaba de abrir los regalos de sus amigos.

Yoongi, aparte de la canción que preparó junto a Jeongguk y SeokJin, adoptó un cachorro en la perrera del centro. Recordó cuando leyó en el diario de Jimin cuánto amaba los perros, y las ganas que tenía de cuidar a uno.

Así que, subió a la habitación de Hoseok y tomó al perrito entre sus manos. Bajó de nuevo al salón, donde la mirada de Jimin se clavó en el animalito siendo acariciado por Yoongi.

— Feliz cumpleaños, Jiminie.—Dijo Suga, entregándole el cachorro.

— Es... es demasiado lindo.—Acarició suavemente su cabecita, mientras mostraba una cálida sonrisa.—Bienvenido, hm... Holly.—Todos sonreían, al escuchar el nuevo nombre de su nueva mascota.—Gracias, Suga hyung. Cuidaré muy bien de Holly.—Sonrió, y vio cómo Jungkook sacaba de debajo de la mesa una cestita donde el perro podría acostarse. La puso en el suelo de la cocina, y enseguida el perro se tumbó en ésta.