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—Díez días después—

La guerra dio inicio, alrededor todo era un caos, soldados de otros países habían intentado tomar el control de Kandor, sin embargo para mi sorpresa los rebeldes y soldados que apoyaban a Lena, así como al señor Mon-El, acataban mis órdenes, no dudaban pues vieron como mis estrategias funcionaban. Teníamos la ventaja de tener la tecnología Luthor, con naves de guerra así como nuevas armas, además de que mi uniforme ya no necesitaba la capa, mis habilidades incrementaron, no podían hacerme daño alguno, gota de mi sangre no ha sido derramada; Lena es la segunda al mando, sin embargo parece ser la líder pues el señor Mon-El acepta sus consejos, y gracias a que ambos han mantenido las alertas activadas, nuestras últimas perdidas fueron Jeremiah y Eliza, aquel monstruo en la reserva negra, no ha intentado usar a los dragones de nuevo, me enfurecía no poder ir a arrancarle el corazón, pero mi deber es protegerla a ella.

-General—uno de los soldados me habla—Necesitamos su ayuda en Star City, los soldados de Britania están liberando a los prisioneros-

-Definitivamente enloquecieron, liberar a los verdaderos criminales, solo traerá caos innecesario-

-Los rebeldes aseguran, que han hecho un convenio e intentaron persuadirlos-

-¿Qué tipo de convenio?-

-Les prometieron libertad sin brazaletes, con la condición de ayudarlos en la guerra-

-Ordena a los soldados y rebeles retroceder, conozco a los presos, estarán muertos antes de siquiera disparar-

-Como ordene, General-

Lena estuvo atenta a nuestra conversación, por lo que venía a mí, espero no tenga objeción, porque ellos me necesitan, si esos presos son liberados sin brazaletes, incluso ella puede estar en peligro.

-Debo ir a Star City—digo en cuanto llega a mi lado—Britania está por liberar a los prisioneros, nuestras tropas no podrán contra ellos-

-No quisiera dejarte ir—toca el emblema de su familia en mi pecho—pero es nuestro General—besa mis labios—Ve, cuando acabes con ellos, te espero en la mansión-

-De acuerdo-

La abrazo y después me impulso volando a la velocidad del sonido; llego justo a tiempo, las naves de Britania estaban por desactivar las celdas, mis tropas estaban seguras, por lo que tenía total control de la situación; desciendo ante las miradas expectantes de los extranjeros.

-Incluso ustedes, no podrían controlar a los criminales de este país-

-Kara Zor-El—un hombre pelirrojo con el símbolo imperial de la reina en su país, era el primero en hacerme frente—Esperábamos que vinieras, en cuanto a los presos, tenemos todo bajo control-

-Ustedes deberían permanecer en su país, cruzar el océano para esto, ¿acaso su reina ansía más poder?-

-Nuestra reina busca la paz, esa mujer a la que tanto proteges, no es lo que piensas-

-Ya me han dicho eso antes y nunca lo creeré, ella busca la paz-

-Para ser la asesina más peligrosa del mundo, eres tan ingenua, esa bruja provocó la guerra-

-Mientes—esa ira de nuevo estaba inundándome—Ella no es ninguna bruja-

-Veo que todos tienen razón, te ha cegado, pudiste redimirte en el lado correcto, cada persona que has matado por ella, eran los buenos Kara-

AbnormalizeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora